23
Con su triunfo de este viernes con las mismas armas que sus rivales han dominado la segunda ronda del campeonato, la ofensiva, los Cocodrilos de Matanzas se colocaron a juego y medio de sus víctimas, Las Tunas, en una jornada en la que, al fin, Víctor Mesa pudo dormir feliz, tras conseguir una doble victoria frente a los vigentes campeones de Granma.
El equipo de Víctor Figueroa le tiene cogida la medida a los Leñadores, a los cuales ha derrotado en seis de los siete desafíos en toda la temporada y buscarán hoy completar la barrida, en el estadio Julio Antonio Mella de los tuneros.
Si el cotejo del jueves fue cerrado (3-1), ayer los Rojos desplegaron su artillería para imponerse 11-3, con Yorbis Borroto, Yurisbel Gracial y Osvaldo Vázquez disparando tres hits cada uno, de los 16 disparados por el conjunto.
El receptor avileño, escogido como refuerzo de los yumurinos, remolcó cuatro carreras. En el inning de apertura empujó a Gracial con cohete al bosque izquierdo; en el tercero fletó a Yorbis con otra conexión por la misma pradera, y en el quinto sopló otro batazo por donde mismo para propulsar par de compañeros más para la goma.
El abridor por los matanceros, Irandy Castro, no llegó a completar un tercio de juego y cedió su lugar al también zurdo Dariel Góngora, quien se apuntó su primer triunfo con los Cocodrilos tras ser llamado para cubrir la vacante dejada por Javier Mirabal cuando este fue llamado a la selección nacional sub-23.
En 5.1 episodios, el camagüeyano Góngora ponchó a cuatro, transfirió a un solo hombre y no le marcaron carreras.
Por los derrotados, Danel Castro también se apuntó un trío de incogibles, dos de ellos tubeyes y par de corredores propulsados para el home plate.
De esta manera, los Rojos llegaron a 43 éxitos y 23 derrotas, mientras los Leñadores sufrieron su descalabro 21 con 44 victorias, y se mantienen como los máximos ganadores del torneo.
En el Latino, los Leones no creyeron en Lázaro Blanco en el primer juego de un doble programa y lo derrotaron con cerrada pizarra de 2-1, gracias a un bambinazo de Orlando Acebey en el quinto acto que quebró el abrazo a una anotación por bando.
Traído del bull pen para relevar a Denis Castillo, Eddy Abel García lanzó durante 6.1 inning en los que no le rayaron la tarjeta, permitió cuatro inatrapables, ponchó a tres y regaló un boleto. Del lado opuesto, Blanco aceptó las dos carreras de los Azules, y no gozó de su mejor control al enviar a cuatro para primera caminando y solo recetar un café amargo. Fue este el primer revés de Blanco con cinco aperturas definidas a su favor.
En el otro duelo, los dirigidos por Víctor Mesa empezaron agresivos, explotaron temprano a Alaín Sánchez y pisaron seis veces la goma en el inning de apertura, en un racimo en el que intervino el jonrón cien de Yoandry Urgellés en torneos nacionales.
En diálogo recientemente con el jardinero de los Azules, me había confesado que estaba haciéndole swing recto a la pelota para ayudar a su equipo, y que no estaba ansioso por completar el centenar de batazos de vuelta completa. Este viernes se le dio la oportunidad y empinó una bola más allá de las cercas para redondear la cifra.
Luego los orientales recortaron diferencia, pero Industriales, dispuesto a ganar su primera subserie en la segunda fase, volvieron a despegarse para asegurar la victoria por nocaut (13-3), con la que se quedaron solos en el tercer puesto de la tabla de posiciones con balance de 40-26.
Al cierre, los Cazadores de Artemisa les devolvieron el golpe a los Vegueros de Pinar del Río, con pizarra de 9-7 y volvieron al quinto puesto en solitario, pero distantes a cuatro y cuatro y medio juegos, respectivamente, de Granma, elenco que ocupa el cuarto lugar con 38-28, último puesto que otorga pasaje a la postemporada.
