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TEHERÁN, abril 9.— El presidente de Irán, Mahmud Ahmadinejad, manifestó este lunes que su país ha logrado producir uranio a escala industrial, lo que suscitó reacciones adversas de parte de EE.UU. y sus aliados.
Durante un acto en las instalaciones nucleares de Natanz, el mandatario precisó: «Me llena de orgullo anunciar que nuestro querido Irán pertenece desde hoy a la lista de países productores de combustible nuclear a escala industrial», citó la agencia IRNA.
Ahmadinejad, que habló ante personalidades del mundo de la política, la cultura y la ciencia del país, añadió: «El 9 de abril del pasado año Irán accedió a la tecnología para la producción de combustible atómico, y durante este último año, y gracias a la labor de los físicos nucleares, se ha llegado a la fase de la producción industrial de combustible».
En referencia a la Agencia Internacional de Energía Atómica (AIEA), el presidente iraní indicó que hace 35 años su país es miembro de esa organización, «y también ha rubricado el Tratado de No Proliferación Nuclear, pero no se ha visto beneficiado por ello».
«Según los estatutos de la Agencia, sus miembros, explicó, además de poder producir combustible atómico, deben gozar de todos sus privilegios, y todos los miembros de la AIEA tienen el deber de ayudar a los demás a hacer valer sus derechos recogidos tanto en dichos estatutos como en las normas del TNP, a cambio de que no se produzca desvío alguno en sus programas hacia usos militares», recordó.
«Pero, lamentablemente, toda esta transparencia y colaboración legal y pacífica mostrada por Irán es discutida por unas cuantas potencias que se oponen, las mismas que también explotan esta fuente de energía, que se han desviado a todas luces y han violado las reglas» añadió.
Para EE.UU., en tanto, el anuncio de que Irán produce uranio a escala industrial constituyó «un nuevo gesto de desprecio a la comunidad internacional», mientras que el gobierno británico urgió a Teherán a suspender todas las actividades de enriquecimiento de uranio.
Según DPA, otro que se sumó a la desaprobación, fue el secretario general de Naciones Unidas, Ban Ki Moon, quien pidió hoy en Nueva York a Irán que cumpla con las resoluciones del Consejo de Seguridad de la ONU.
La AIEA, con sede en Viena, evitó comentar el anuncio.
Por su parte, Ali Lariyani, secretario del Consejo Superior de Seguridad Nacional y responsable de las negociaciones nucleares, expresó que «hoy, cuando se ha completado nuestro ciclo de combustible nuclear, estamos dispuestos a iniciar unas negociaciones no dictadas con el fin de lograr un entendimiento mutuo, y si los occidentales están interesados en entenderse con Irán, hoy mismo sería el día de este entendimiento».
Lariyani apuntó que Irán está dispuesto a negociar «y a entendernos con los países occidentales con el propósito de disipar sus preocupaciones por un Irán nuclearizado, pero no estamos dispuestos a detener nuestros progresos científicos».
El alto negociador iraní enfatizó en que EE.UU. y sus aliados «deberían saber que el logro de un entendimiento con Irán no pasa por los corredores de las resoluciones la ONU, y si en lugar de interactuar se opta por la vía de las tensiones, tendrían que saber que Irán también reaccionará en serio».
Lariyani reiteró que el arma atómica no tiene cabida en la doctrina política de la República Islámica.
