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El presidente nicaragüense, Daniel Ortega, dijo que su gobierno pedirá a Estados Unidos la extradición de Luis Posada Carriles por los actos terroristas cometidos por él contra su país, reacción que se unió a la amplia condena escuchada una vez que se confirmó la libertad condicional del criminal, quien llegó al aeropuerto internacional de Miami este jueves al mediodía.
Vestido de traje y con un paso rápido que desmentía las dolencias aducidas por la defensa y el propio aspecto de Posada Carriles cuando la fiscalía impidió su liberación, unos días atrás, el encartado abordó la camioneta que lo llevó desde la prisión de Nuevo Otero al jet privado, y desembarcó unas horas más tarde en Miami por el ala que la terminal aérea destina a ejecutivos, en una operación que observadores dijeron se realizó «con secretismo».
Las autoridades migratorias habían anunciado la semana pasada que retomarían bajo su custodia a Posada por existir en su contra una orden de deportación dictada por el juez Abbot a fines del año 2005; pero no interfirieron este jueves su salida.
En tanto ese momento llega, Posada también deberá llevar un grillete electrónico para ser monitoreado, y no podrá salir de la residencia de su esposa si no es para ir al médico, a tenor con las condiciones plasmadas en su dictamen por la jueza Kathleen Cardone.
Sin embargo, al subrayar que Posada no ha sido aceptado como un ciudadano de Estados Unidos, el comunicado de la Oficina de Inmigración y Aduana (ICE) afirmó que la orden de supervisión requiere que Posada «se entregue al ICE para ser deportado en caso que obtenga documentos de viaje necesarios para reubicarse en cualquier punto fuera de los Estados Unidos».
Como si esa posibilidad no hubiese sido explicitada de modo legal o pensando, quizá, en la variante de la fuga, Dean Boyd, portavoz del Departamento de Justicia, «advirtió», desfachatado: «Esperamos que aparezca en la Corte el 11 de mayo para su procedimiento criminal».
La llegada de Posada Carriles a Miami provocó los esperados pronunciamientos de satisfacción de representantes de organizaciones terroristas anticubanas que recaudaron los 350 000 dólares de la fianza, y cuyo dinero no habría servido si, atendiendo a la petición de la fiscalía, la jueza Cardone hubiese investigado su procedencia para notar que era totalmente dudosa. Entre los festejadores estaban miembros de Unidad Cubana, Alfa 66 y Vigilia Mambisa, cuyo presidente, Miguel Saavedra, identificó a esa camarilla como el clan que son: «la familia que lo ha respaldado desde siempre».
VENEZUELA NO CEJARÁAl conocer que Posada, fugado de una prisión venezolana en 1985, había abandonado la cárcel el presidente Hugo Chávez exigió una vez más la extradición.
«Venezuela toda levanta su voz, indignada por la protección que el gobierno imperialista de Estados Unidos le sigue dando al padre de todos los terroristas, de todos los tiempos, en el continente americano», reclamó.
En entrevista concedida a Randy Alonso durante la Mesa Redonda Informativa de la TV Cubana, el abogado que representa a la nación bolivariana en esa solicitud, José Pertierra, advirtió que Venezuela no va a descansar hasta que el terrorista Posada Carriles sea procesado ante la justicia.
«El proceso de extradición sigue», advirtió Pertierra. «O lo extraditan o lo juzgan en Estados Unidos».
El letrado también ratificó su opinión de que la impunidad fue asegurada desde que las autoridades judiciales estadounidenses sacaron a Posada de la custodia del Departamento de Seguridad y lo llevaron ante el de Justicia para encausarlo por mentir acerca de su entrada en EE.UU. Pertierra no descartó que si se le lleva ante las cortes el día 11 del mes próximo pueda salir el 12, pues la condena que se le imponga podría resultar mínima y quedar convalidada por el tiempo que Posada Carriles lleva a disposición de los tribunales en EE.UU.
Las llaves de la prisión las ha tenido todo el tiempo la Casa Blanca, reiteró el abogado. Y este jueves las utilizó para abrir sus puertas. (Marina Menéndez Quintero)
UN JUICIO CONTRA LOS BUSH«Estados Unidos se ha negado a tratar a Luis Posada Carriles como un terrorista», afirmó este jueves Ricardo Alarcón de Quesada, miembro del Buró Político y presidente del Parlamento Cubano, durante el II Taller Nacional de Experiencias de la Brigada de Instructores de Arte José Martí.
El presidente de la Asamblea Nacional apuntó que mediante toda suerte de piruetas judiciales el gobierno estadounidense ha dado «la versión de que estaban actuando contra Posada. Sin embargo, lo protegían, hasta llegar al momento en que un tribunal dijera que este hombre ha estado vinculado a los hechos más infames de este continente, desde Playa Girón hasta el asesinato de John F. Kennedy».
«Lo ponen en libertad, porque se determinó que no lo pueden mantener encerrado por una simple falacia, en un país que es el paraíso de la mentira. Esta es una trampa para no dejar que otro lo enjuicie por terrorismo. Porque un juicio contra Posada sería un juicio contra Bush pequeño y contra su papá». (Yelanys Hernández Fusté)
BAYAMO TAMBIÉN PROTESTÓMás de 100 000 bayameses protestaron contra la liberación del terrorista internacional Luis Posada Carriles, y la consideraron una descarada ofensa a la moral humana.
En la Plaza de la Patria obreros, campesinos, estudiantes, amas de casa, militares, artistas e intelectuales, reafirmaron que el pueblo de Cuba no desmayará en su lucha contra la afrenta.
