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NUEVA YORK, septiembre 27.— Rusia se pronunció este viernes en la Asamblea General de Naciones Unidas contra las operaciones militares para solucionar los conflictos, en clara alusión a la situación en Siria y la posibilidad de una intervención estadounidense.
«En el último tiempo se extendió la idea de que la intervención militar o la amenaza son un método eficiente para los problemas internacionales, sostuvo el ministro del Exterior de Rusia, Sergei Lavrov, ante la Asamblea General de la ONU. «Y eso a pesar de que todas las experiencias con este tipo de operaciones en los últimos años demostraron que no sirven, no tienen sentido y son destructivas», dijo DPA.
Atenerse a este tipo de políticas es «un camino extremadamente peligroso que mina los fundamentos del actual ordenamiento mundial y pone en peligro la postura común sobre la no proliferación de armas de destrucción masiva», manifestó.
China, en tanto, pidió una rápida solución política al conflicto en Siria y exigió que se convoque rápidamente la segunda conferencia en Ginebra y que haya avances más rápidos para una solución política.
Según el canciller chino, Wang Li, cuya nación forma parte de los cinco miembros permanentes del Consejo de Seguridad de la ONU, su país bloqueó, junto a Rusia, varias resoluciones para Siria en los últimos años, en las que se intentaba condenar al Gobierno de Bashar al-Assad, porque, dijo, respetamos los deseos y decisiones del pueblo sirio.
Este viernes, el Consejo de Seguridad aprobó una resolución sobre las armas químicas de Siria que abre el camino para una solución política del conflicto, indicó el canciller ruso Serguei Lavrov.
El texto establece la base para superar la crisis, indicó el Ministro ruso, quien subrayó que la resolución no está regida por el Capítulo VII de la Carta de la ONU y no autoriza ninguna operación militar automática, en el caso de que Siria no cumpliera con las condiciones, apunta DPA.
El documento coincide totalmente con el acuerdo alcanzado por Rusia y Estados Unidos en Ginebra. Lavrov considera que es seguro que Siria colaborará con los inspectores de armas químicas «con buenas intenciones y constructivamente.
«Rusia está dispuesta a ayudar en todo sentido en las tareas que hay por delante», añadió.
