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El Consejo de Seguridad de la Organización de las Naciones Unidas (ONU) aprobó este sábado por unanimidad una resolución (no obligatoria) que exige a todas las partes en Siria que faciliten el acceso de la población a la ayuda humanitaria y en la que se advierte que habrá «pasos adicionales» en caso de incumplimiento, informa Telesur.
El texto demanda además el fin de los bombardeos aéreos sobre las ciudades y que se levante de forma inmediata el asedio que viven varios centros urbanos como la ciudad vieja de Homs, el campamento de refugiados palestinos de Yarmuk (sur de la capital) y varias zonas en las inmediaciones de Damasco (capital).
Rusia y China -aliados del Gobierno sirio- respaldaron en esta ocasión el texto propuesto por Occidente, tras haber vetado varias iniciativas similares en las que se incluían condenas al Gobierno de Bashar Al Assad y se amenazaba con sanciones a Siria.
La colaboradora de teleSUR en Nueva York (sede de la ONU, EE.UU.), informó que «tanto Rusia como China han pedido que no se politice esta ayuda». Asimismo, explicó que este texto busca ayudar especialmente a los niños que se han visto afectados en este conflicto.
La resolución incluye algunos puntos en los que ha insistido Rusia en numerosas ocasiones, como una condena del terrorismo que ejercen grupos vinculados a Al Qaeda en el país y sus «graves violaciones del derecho humanitario internacional en áreas controladas por la oposición».
El documento aprobado se centra en la necesidad de aliviar el sufrimiento de la población civil y propone toda una serie de medidas para mejorar su situación a corto plazo, como que se permita el acceso de los convoyes humanitarios a todo el país.
«Si esta resolución se aplica rápidamente y con buena voluntad, al menos algo del sufrimiento puede ser aliviado», señaló el secretario general de la ONU, Ban Ki-moon.
Ban recordó que la mitad de la población siria necesita ayuda humanitaria de forma urgente y alertó una vez más que los civiles son «víctimas diarias de una violencia brutal y de ataques indiscriminados».
La aprobación de la resolución supone además uno de los primeros consensos sobre el conflicto sirio en el seno del Consejo de Seguridad de la ONU, que se ha mantenido profundamente dividido durante los casi tres años de conflicto.
La guerra en Siria, que arrancó en marzo de 2011 ha dejado unos 140 mil muertos, según la ONG Observatorio Sirio de Derechos Humanos.
En tanto, unas seis millones de personas se han visto obligadas a desplazarse y más de dos millones se han refugiado en los países vecinos, de acuerdo con cifras de la ONU.
