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Sebastian Kurz, del Partido Popular (ÖVP). Autor: Reuters Publicado: 16/10/2017 | 09:06 pm
VIENA, octubre 16.— Con más del 97 por ciento de las boletas de las elecciones generales escrutadas, el conservador Partido Popular (ÖVP) tenía este lunes el 31,7 por ciento de los votos y su candidato, el hasta ahora ministro de Exteriores Sebastian Kurz, puede convertirse, con 31 años, en el primer ministro más joven de Europa.
El sitio web de RTVE reportó que en segunda posición se sitúa el Partido Socialdemócrata (SPÖ) del canciller federal Christian Kern, con el 26,9 por ciento, y en tercer lugar el ultraderechista Partido Liberal (FPÖ), con el 26,0 por ciento. Por detrás se hallan los liberales del partido NEOS, mientras Los Verdes quedan fuera del Parlamento.
Aunque este lunes se hacía el recuento de los 890 000 votos por correo, Kurz afirmó que el resultado «es un claro mandato para cambiar a Austria» y agregó que «si recibimos un encargo para formar Gobierno, voy a hablar con todos».
Los analistas coinciden en que la ultraderecha, que estuvo muy cerca de ganar las elecciones presidenciales de 2016, podría ser decisiva para formar Gobierno, como ya ocurriera en 1999.
Mientras los conservadores aumentaron sus votos casi en ocho puntos porcentuales y los ultranacionalistas 5,5 puntos —respecto a las elecciones de 2013—, los socialdemócratas se mantienen con los mismos apoyos que hace cuatro años.
«Austria ha vivido un vuelco a la derecha. El SPÖ es una alternativa al populismo conservador», declaró el canciller Kern.
Casi 6,4 millones de austriacos estaban llamados a las urnas el pasado domingo para elegir a los 183 diputados del Parlamento que ejercerán el poder legislativo en los próximos cinco años.
El debate de la campaña electoral estuvo dominado por la inmigración. El plan del partido conservador de Kurz es cortar las ayudas económicas a los refugiados y prohibir que otros extranjeros reciban los pagos si no han vivido en el país durante al menos cinco años. En su último acto, Kurz prometió erradicar la inmigración.
«Debemos parar la inmigración ilegal en Austria porque si no, no habrá orden y seguridad», respondió al tabloide Osterreich. Entre sus propuestas, el joven político quiere cerrar las principales rutas de los inmigrantes en Europa, desde los Balcanes y en el Mediterráneo.
