CARACAS, junio 26.— El enfrentamiento a la guerra económica que el presidente Nicolás Maduro anunció como prioridad de este mandato junto al diálogo, comienza una etapa importante este miércoles, cuando las autoridades y los empresarios locales deben fijar precios a productos esenciales para la población.
La medida la dio a conocer hace cuatro días el ahoraviceministro para el área económica,Tareck El Aisssami, quien puntualizó que de las citas debe emerger un «gran acuerdo» para «sincerar las estructuras de costos» de al menos 50 bienes esenciales —los renglones del llamado
Plan 50— y fijar «precios acordados de estos».
El Aissami dijo que los precios serán resultado del consenso con los productores, industriales y comerciantes que participarán en las citas, y que nada se impondrá, aunque les pidió «jugar limpio», dijeron reportes de prensa. «Nadie puede justificar que en 24 horas se cambien hasta tres o cuatro veces los precios de los productos que están en los anaqueles», afirmó.
El titular también aseveró que el Gobierno ofrecerá a los empresarios todo el apoyo y les exigirá «que se desvinculen de las agendas de desestabilización de guerra económica», en alusión al asedio de que ha sido objeto el ejecutivo de Nicolás Maduro desde el año 2013 con el desabastecimiento provocado por la derecha empresarial, lo que provoca el acaparamiento así como la subida artificial de los precios, con el consiguiente incremento de la inflación.
El Aissami también aclaró que una vez acordados los precios, quien rompa el acuerdo adoptado recibirá todo el peso de la ley al entenderse que «ese comercio o ese productor está comprometido con una agenda golpista», añadió.
Los precios serán publicados en un manual de procedimiento que se pondrá en circulación, y que los mercados deberán acatar para su funcionamiento y organización de comercialización, dijo AVN.
Según otras fuentes, el Gobierno inició hace algunas semanas el abordaje de mercados populares donde existían indicios de especulación, acaparamiento y elevación de los precios.
«No vamos aceptar que se siga especulando de manera criminal y delictiva (...) No vamos aceptar la guerra contra nuestro pueblo», apuntó.
Otra agresión que pesa sobre el abastecimiento y la vida de los venezolanos son las medidas punitivas de carácter financiero que la administración de Donald Trump le impuso a Venezuela desde agosto del año pasado.
Precisamente, el nuevo paso del ejecutivo de Maduro coincide con la llegada a Brasil, este martes, del vicepresidente estadounidense Mike Pence, quien viajará también a Ecuador y a Guatemala.
Aunque a su periplo se le adjudican propósitos específicos en cada nación, es un secreto a voces que la búsqueda de nuevas medidas de presión contra el Gobierno de Maduro forma parte de la agenda.
