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Cuba y Azerbaiyán: un cálido encuentro

Comienza hoy la 18va. Cumbre del Movimiento de Países No Alineados, en Bakú. Encuentro entre presidentes cubano y azerí constata alto nivel de las relaciones y la amistad entre los dos países

Autor:

René Tamayo León

BAKÚ, Azerbaiyán.— El Presidente de la República de Cuba, Miguel Díaz-Canel Bermúdez, llegó en la tarde del jueves a esta capital para asistir a la 18va. Cumbre de Jefes de Estado y de Gobierno del Movimiento de Países No Alineados (Mnoal), y poco después (pasadas más o menos unas dos horas), fue recibido por su homólogo azerí Ilham Aliyev, con quien estuvo conversando algo más de 40 minutos.

La noticia pudiera sorprender a los periodistas que saben lo complicado que resulta que un Jefe de Estado anfitrión de la segunda reunión magna más grande del mundo (después de los segmentos anuales de alto nivel de la Asamblea General de la Organización de las Naciones Unidas) atienda en la víspera, fuera de protocolo, a otro dignatario y le dedique lo que es, sin dudas, «un buen tiempo».

El cálido encuentro constituyó una expresión del alto nivel de las tradicionales relaciones de amistad entre los dos países y pueblos.

Según trascendió, los estadistas abordaron el favorable estado de los vínculos bilaterales, temas relativos a la agenda internacional y, por supuesto, hablaron sobre la 18va. Cumbre del Mnoal, cuyo segmento de alto nivel comienza hoy en la mañana y debe terminar el sábado cerca de la noche.

La primera actividad del mandatario cubano en esta ciudad fue rendirle tributo al padre de la nación azerí contemporánea, Heydar Aliyev, en cuya tumba depositó una ofrenda floral, precisamente al lado de la que envía sistemáticamente el presidente Ilham, hijo de Heydar.

Díaz-Canel llegó a Bakú desde Minsk, segunda escala de una gira internacional para realizar visitas oficiales a Irlanda y Belarús, y una visita de trabajo a Rusia, además de venir a Bakú para la Cumbre del Mnoal.

Al partir hacia la nación asiática en la mañana de este jueves (hora local), el mandatario caribeño fue despedido por su par bielorruso, Alexander Lukashenko, con quien había sostenido conversaciones oficiales el miércoles.

También fuera de protocolo, Lukashenko fue a despedirlo desde la alfombra roja que nuevamente se colocó en la losa del aeropuerto capitalino de aquel país centroeuropeo.

Así es Bakú

Es moderna y tradicional. Desde hace siglos, en la arquitectura azerí convergen escuelas del oriente y del occidente. Todavía sigue siendo así. Con aliento futurista, a veces desafiando la gravedad, las nuevas torres de cristal —las hechas o las que se levantan— ocupan parte del espacio citadino.

No obstante, y a pesar de que son muchas y serán más por las innumerables torres-grúas que se avistan por doquier, el ímpetu posmoderno, con sus novedosos materiales, no subsume otras obras recientemente terminadas o que también se construyen, y que mantienen el estilo tradicional del Cáucaso islámico, aunque el de aquí tiene identidad propia: la marca y decide la vista y la brisa del mar Caspio —siempre ha sido así.

Al menos esa es la percepción de este redactor a partir de lo visto mientras transitaba la urbe para ir a dar cobertura a una actividad del Presidente cubano, quien recorrió con la delegación que lo acompaña algunos de sus lugares, como el llamado Mirador del Bosque Montañoso, que ofrece una vista bastante abarcadora de Bakú, sobre todo de su litoral.

Esta es la primera visita de un presidente cubano a Azerbaiyán, pero Cuba sigue inspirando cariño aquí. Continúa siendo la legendaria Isla de la Libertad para los pueblos que integraban la antigua Unión Soviética.

Centenares —por no decir miles— de jóvenes antillanos estudiaron aquí las más insospechadas carreras, tanto técnicas como de ciencias sociales y de humanidades. Los azeríes guardan recuerdos —y hasta amores— de aquellos años, cuando la algarabía —por no decir gritería— típica de los caribeños rompía el trasiego pausado de los paseantes.

foto: Estudios Revolución

Cuba siempre no alineada

La delegación cubana a la Cumbre de Jefes de Estado y Gobierno del Mnoal, encabezada por el Presidente Miguel Díaz-Canel, está integrada también por Bruno Rodríguez, ministro de Relaciones Exteriores, y Rodrigo Malmierca, titular de Comercio Exterior y la Inversión Extranjera, además de otros directivos y expertos de nuestro país.

La 18va. Cumbre del Mnoal se desarrollará a partir de hoy bajo el lema: Defendiendo los Principios de Bandung para asegurar una respuesta adecuada y concertada a los desafíos del mundo contemporáneo.

La cita de los Jefes de Estado y de Gobierno fue antecedida por la Reunión preparatoria de altos funcionarios, que sesionó del 21 al 22 de octubre, y por la Reunión ministerial preparatoria, que se efectuó entre ayer y antier, todas en Bakú.

Azerbaiyán, a través del mandatario Ilham Aliyev, recibirá la Presidencia del Movimiento por los próximos tres años, de manos del Jefe de Estado venezolano, Nicolás Maduro, que lideró el Mnoal desde la Cumbre de Margarita, de 2016.

Como siempre ha reiterado, Cuba (que acogió la celebración de dos Cumbres —1979 y 2006—) está plenamente comprometida con el Movimiento y sus demandas, como la preservación y fortalecimiento del multilateralismo, y la solución pacífica de los conflictos a través del diálogo y la negociación.

La Habana también sostiene su compromiso de continuar trabajando junto a otros Estados miembros por el establecimiento de un orden internacional democrático, justo y equitativo, que responda al reclamo de paz, desarrollo sostenible y justicia de los pueblos de todo el mundo.

Sin lugar a dudas, el Mnoal, como mecanismo de concertación política de los países del Sur, mantiene su relevancia en la coyuntura internacional actual. Cuba trae a Bakú su voz, que esta vez será la del Presidente de la República, Miguel Díaz-Canel Bermúdez.

 

Los principios de Bandung

  1. Respeto por los derechos fundamentales del hombre y para los fines y principios de la Carta de las Naciones Unidas.
  2. Respeto para la soberanía y la integridad territorial de todas las naciones.
  3. Reconocimiento de la igualdad de todas las razas y de todas las naciones, grandes y pequeñas.
  4. Abstención de intervenciones o interferencia en los asuntos internos de otros países.
  5. Respeto al derecho de toda nación a defenderse por sí sola o en colaboración con otros Estados, de conformidad con la Carta de las Naciones Unidas.
  6. Abstención de participar en acuerdos de defensa colectiva con vista a favorecer los intereses particulares de una de las grandes potencias. Abstención por parte de todo país a ejercitar presión sobre otros países.
  7. Abstención de actos o de amenaza de agresión y del uso de la fuerza en los cotejos de la integridad territorial o de independencia política de cualquier país.
  8. Composición de todas las vertientes internacionales con medios pacíficos, como tratados, conciliaciones, arbitraje o composición judicial, así como también con otros medios pacíficos, según la libre selección de las partes en conformidad con la Carta de las Naciones Unidas.
  9. Promoción del interés y de la cooperación recíproca.
  10. Respeto por la justicia y las obligaciones internacionales.

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