Juventud Rebelde - Diario de la Juventud Cubana

¿Secreto con las utilidades?

Rafael Martínez Silva, secretario general de la sección sindical de la Agencia de Seguridad y Protección en Isla de la Juventud, revela en su carta la inconformidad de los trabajadores de esa entidad por el estado de desinformación y desconocimiento en que los tiene la empresa, subordinada al Grupo Empresarial Gemar del Ministerio de Transporte.

«Como trabajadores de esta Empresa, manifiesta, tenemos derecho a conocer el Plan y el Real del monto de utilidades formadas de 2024, tanto a nivel de empresa como del territorio Occidente, al cual pertenecemos. Y el monto asignado a cada uno de los trabajadores».

Agrega el sindicalista que ninguna de esas informaciones se les había comunicado aún hasta el 31 de julio pasado, cuando nos escribió.

«Como secretario general de la sección sindical he realizado gestiones para que se nos den a conocer dichos datos, con el director del Territorio Occidente, Yosvani Borrego Pino. Y con la secretaria del Sindicato Transporte y Puertos en el Municipio Especial de Isla de la Juventud, Yenisleidis Mascleris Falso, quien
elevó la inquietud al Sindicato Nacional del Transporte. Y aún no se nos ha dado respuesta alguna».

Espera Rafael que con esta revelación pública, luego de agotadas las gestiones hechas por las vías internas administrativas y sindicales, sea restablecido ese derecho laboral al respecto.

¿Quién responde por el daño a la propiedad?

Lemay Padrón Oliveros (Manglar 580, apto. 304, entre Infanta y Retiro, Centro Habana, La Habana) cuenta que el pasado 29 de julio estaba en apagón y comenzó a restablecerse el servicio a las 11 de la noche. Se iba y volvía la corriente varias veces en un lapso de 20 minutos, tras lo cual dejaron de funcionar el
backup de su computadora y la batería de la laptop, todos instrumentos de su trabajo diario.

A la mañana siguiente, y cumpliendo con el procedimiento que la Unión Eléctrica dispone, reportó el asunto al 18888. Y le dijeron que en 24 horas le darían curso a su expediente (64313). Poco tiempo después fue el carro de la guardia. Y al llegar le advierten que solo llegaban hasta el metro contador. Ahí no había ningún problema, pero de todas formas hicieron la medición correspondiente y le dijeron que no podían hacer nada más porque no encontraron anomalías: Lógicamente, si fueron diez horas después.

Volvió a llamar al 18888 y le dijeron que el reporte seguía abierto, y luego irían especialistas a medir sus equipos. Pero nunca ocurrió. Y cuando llamó al otro día le dijeron que se comunicara con la OBE de su municipio, que es la que debe enviar a los técnicos.

Decenas de llamadas esa tarde fueron infructuosas. Y al otro día, cuando logró comunicar, Marlén, especialista de Atención a la Población, le planteó que la culpa no fue de la UNE, porque el metro contador no tenía problemas. Y que nadie iría a ver sus equipos dañados.

«Como consumidor, afirma Lemay, me siento indignado y engañado al ver la falta de responsabilidad de la empresa con un daño que evidentemente causaron ellos con la inestabilidad del servicio. Porque una cosa son los apagones en consonancia con la difícil situación energética que vive el país, y otra la mala manipulación en los circuitos, ya sea por negligencia de una persona, o porque se quieren activar cuando no están listos.

«Por cierto, las dos noches siguientes se repitió el mismo quita y pon de la electricidad. Esto es con equipos que no son de “primera necesidad”. No quiero imaginar todos aquellos que han visto dañado su refrigerador, por ejemplo, porque la respuesta de la UNE es siempre la misma: No es culpa de ellos. ¿Quién responde por el daño a la propiedad? ¿Para qué proclaman que darán la cara si luego lo que hacen es evadir su responsabilidad?», concluye.

Para que lleguen  sus quejas  o planteamientos  a  esta sección, usted deberá enviarlos al correo lectores@juventudrebelde.cu, sin olvidar su nombre y apellidos y la dirección particular donde reside.

 

Comparte esta noticia

Enviar por E-mail

  • Los comentarios deben basarse en el respeto a los criterios.
  • No se admitirán ofensas, frases vulgares, ni palabras obscenas.
  • Nos reservamos el derecho de no publicar los que incumplan con las normas de este sitio.