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Cuba trabaja para que cada diabético del país tratado con insulina, disponga de un glucómetro -medidor de glucosa en la sangre- y de tiras reactivas producidas en el Centro de Inmunoensayo.
El periódico Granma informa este jueves que cerca de medio millón de cubanos, uno de cada 22, padece de diabetes mellitus, una alteración permanente del metabolismo caracterizada por el aumento de los niveles de azúcar en sangre.
En declaraciones a ese rotativo Neraldo Orlandi González, especialista en Endocrinología y Medicina General Integral, dijo que en la última década se duplicó en el país la prevalencia de esa enfermedad, al extremo que en la actualidad el 4,5 por ciento de la población es diabética conocida.
Alrededor de un 2,8 por ciento de las personas en la Isla tienen esta dolencia, pero lo desconocen y otro 12 por ciento son prediabéticas, o sea, están en riesgo de enfermar en los próximos años si no reciben la orientación y asistencia adecuadas.
También director del Centro de Atención al Diabético del Instituto de Endocrinología del Ministerio de Salud Pública, Orlandi González explicó las complicaciones cuando no se cumple el control estricto de este mal.
Recientemente, Antonio Márquez Guillén, Jefe del Programa Nacional de Diabetes y Embarazo, dijo a la prensa en Camagüey que Cuba es la única nación reconocida internacionalmente con un Programa de Atención al Diabético realizado de forma integrada.
En el país hay consultas con este tipo de atención en los policlínicos, y prácticamente todas las provincias disponen al menos de un Centro de Atención al Diabético (que incluye el servicio de Hospital de Día).
Los niños y jóvenes con ese mal reciben igualmente atención prioritaria, y durante la etapa vacacional se abren campamentos donde son adiestrados para que asuman la afección y tratamiento adecuados.
Con su programa integral, Cuba garantiza mejor calidad de vida a todos estos pacientes, logro con el cual saluda el Día Mundial de la Diabetes, instituido el 14 de noviembre.
