El ejercicio táctico grafica como el enemigo emprende el camino hacia el Macizo, mas no logra mucho margen de avance, pues resulta desgastado a cada paso. Autor: Julio Martínez Molina Publicado: 21/09/2017 | 05:03 pm
SANTA CLARA, Villa Clara.— Desde la loma del Capiro el fuego de los disparos de medios motorizados, fusiles y las explosiones de bombas, revelan los puntos donde se baten los defensores de la ciudad ante el avance de los invasores.
Con la ayuda de los binoculares, a pesar de la densa cortina de humo, descubro los soldados disparando desde los árboles y posiciones en las que están casi enterrados. Mientras tanques, que estaban bien ocultos, salían sorpresivamente de los patios de las casas.
El enemigo comenzó el avance desde los suburbios de la ciudad con el fin de tomarla, para lo cual partió de la exploración área, seguida del ataque combinado de la aviación, de medios motorizados y la infantería.
Lo que ocurría trascendía de un enfrentamiento ficticio, pues en cada acción de la defensa del área urbana de Santa Clara, el comportamiento de las tropas y los mandos mostraba un verdadero realismo, ese de realizar las acciones exactamente como si todo fuera realidad.
Y ejemplo de ello fue el pelotón de infantería motorizada, cuya jefa es la joven teniente Geily Bermúdez Rodríguez, de 21 años. Luego de concluir la maniobra la vi buscar la sombra y el aire fresco debajo de un árbol.
«La tarea era lograr que mi pelotón cumpliera la misión que nos asignaron. En medio del combate tengo que corregir el fuego, determinar la dirección de ataque del enemigo; ocupar las posiciones más ventajosas del terreno, con un desplazamiento que haga difícil al adversario descubrirnos. Y después de disparar cambiar rápidamente de posición para no “regalarnos”», precisó.
Asevera que en el combate de hoy les fue bien. «Pero ese éxito, realmente no lo logramos ahora. Ha sido consecuencia de horas y más horas, de meses y años de preparación», enfatizó.
Lo mismo se podría decir del resto de la agrupación de tropas que participaron en la maniobra, integradas por pequeñas unidades de infantería, tanques, defensa antiaérea, de las milicias de tropas territoriales y brigadas de producción y defensa.
Montañas convertidas en cañones
MACIZO DE GUAMUHAYA, Cienfuegos.— La montaña es una zona de difícil acceso, orlada en su bella pero caprichosa geografía de desfiladeros, trillos angostos, cuevas, barrancos. Por ende, resulta un sitio ideal para emboscar al enemigo, desgastarlo y liquidarlo definitivamente.
El ejercicio táctico efectuado este sábado en el Escambray como parte de la Maniobra del Ejército Central en saludo a su aniversario 50, demostró como los oficiales, sargentos y soldados cubanos están preparados para no permitir el acceso del atacante a la cordillera y eliminarlo a sangre y fuego.
Pequeñas unidades regulares de infantería de montaña y Milicias de Tropas Territoriales actuaron como destacamentos guerrilleros en la serranía y en sus entradas. Están dotadas de moderno armamento y medios de comunicación.
El ejercicio táctico grafica como el enemigo emprende el camino hacia el Macizo, mas no logra mucho margen de avance, pues resulta desgastado a cada paso.
Nuestros hombres le detienen constantemente la marcha, mediante emboscadas de hostigamiento que no pueden prever ni detectar. Las combinan con obstáculos explosivos y no explosivos. Eso conduce a la desorganización y desmoralización del agresor.
La gloriosa batalla estratégica de la Sierra Maestra vuelve a repetirse. Son los mismos hombres de Fidel con su táctica de «muerde y huye», de cercos y doblecercos, hasta el total aniquilamiento del enemigo.
La elevada movilidad y astucia de los nuestros ante la planificación y realización de cada combate sobresalen en esta reproducción a escala de un combate real.
La seriedad con que actúan y su derroche de sacrificio corroboran que a estos hombres nadie los podrá domeñar. Ellos tendrán la misión, en compañía de nuestro pueblo uniformado y las brigadas de producción y defensa, de proteger nuestras montañas ante un ataque enemigo.
