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Mirando desde arriba y con justificado optimismo me atrevo a augurar un prominente resultado de Cuba en los clavados, durante el Campeonato Mundial de deportes acuáticos a celebrase en Shangai, China, dentro de dos meses.
La medalla de bronce alcanzada por José Antonio Guerra y Jeinkler Aguirre en la plataforma sincronizada de la más reciente fase del Grand Prix, con sede en la ciudad canadiense de Montreal, y la suma total de cuatro preseas en seis presentaciones —contando también la Serie Mundial—, ratifican las posibilidades de nuestro estelar dueto en suelo chino.
Esta parada norteña del Grand Prix resultó bastante hospitalaria para los caribeños. Guerra y Aguirre sacaron 421,62 puntos del fondo del tanque, solo superados por las parejas de China y Rusia con 442,56 y 441,87, respectivamente.
En su accionar por los proscenios acuáticos del orbe, los antillanos inauguraron su colección de esta temporada con un metal de bronce mojado en Madrid, durante los primeros «brincos» vistos en el Grand Prix. Esa fue la única ocasión que consiguieron un registro inferior a las 400 unidades (381,66).
Posteriormente se proclamaron campeones a diez metros del agua en la Serie mundial, pues la capital rusa les «regaló» el oro después de compilar sus mejores números de por vida (463,02).
En sus posteriores salidas en este certamen el tanque de clavados no los recibió como esperaban. De esta forma tuvieron saltos muy pobres en las citas de Beijing, China, y Sheffield, Inglaterra.
Sin embargo, la fase final de la competición volvió a despedir con alegría a los nuestros, ya que en Guanajuato, México, la dupla cubana volvió a sacar un premio gordo del agua, pues el bronce alcanzado les aseguró un segundo lugar en el listado general con 54 puntos.
Los alemanes subcampeones olímpicos, Patrick Hausding y Sascha Klein resultaron los líderes del escalafón. En tanto, la pareja china Yuan Cao-Yanquan Zhang, monarca de la Copa Mundial, culminaron terceros.
Ninguna de las fases de la Serie Mundial vio coronarse al mismo monarca, prueba de la rivalidad existente entre estos «monstruos acuáticos».
El ranking general del Grand Prix aún está sin actualizar, pero dos preseas de bronce deben reservarles un buen puesto a Guerra y Aguirre, aunque durante esta lid no asistirán a todas las convocatorias. Veremos cómo termina todo este show de saltos espectaculares.
Seguimos esperando que los nuestros apelen con efectividad a su «arma secreta», pues el complejo salto de 4,5 vueltas al frente sigue guardado en el «closet». Ojalá las aguas de Shangai les reserven alguna medalla a los cubanos. A fin de cuentas están bien clavados en la altura.
