Juventud Rebelde - Diario de la Juventud Cubana

Tokio ajusta los cinco aros  

Apenas mil invitados habrá la noche de la inauguración de los juegos olímpicos, presenciando in situ el desfile de las delegaciones y el programa artístico

Autor:

Norland Rosendo

TOKIO.― A falta de cinco días para el inicio de los Juegos poco se les ha escapado a los organizadores sobre la ceremonia inaugural, más allá del inmenso vacío que significarán 67 000 lunetas sin ocupar en el estadio olímpico el próximo 23 de julio.

Apenas mil invitados habrá esa noche presenciando in situ el desfile de las delegaciones y el programa artístico, todos VIP (muy VIP), encabezados por el emperador japonés, Naruhito, y también confirmó su asistencia la primera dama de Estados Unidos, Jill Biden.

También se supo que durante las competencias serán utilizados sonidos grabados en ediciones olímpicas pasadas para que los atletas no sientan tanto la sensación de vacío en la inmensidad de las instalaciones.

Mientras se ultiman los detalles del programa inaugural y salen a la luz novedades que harán más agradable la inédita cita estival, van llegando las delegaciones a la villa olímpica en medio de una tensa situación sanitaria que obligó a las autoridades locales a extender hasta el 22 de agosto el estado de emergencia.

Un día después del arribo, el grupo de cubanos que partió de La Habana el pasado miércoles comenzó a entrenarse dentro de la villa, cuya apertura recientemente tampoco tuvo el glamour mediático acostumbrado.

Los boxeadores fueron quizá los que más quemaron energías y sus rutinas atrajeron la atención de personas de otras nacionalidades, según el jefe de prensa de la delegación cubana, Roberto Ramírez, quien obtuvo declaraciones de Rolando Acebal, al frente del colectivo de entrenadores del buque insignia del deporte cubano.

«Se han mostrado muy bien después de una travesía significativa, sin pérdida de velocidad, resistencia y otros parámetros importantes. Ha sido como si estuviéramos en Cuba, sin que la diferencia de 13 horas y el agotamiento propio de un trayecto tan largo se hicieran sentir. Durmieron bien, descansaron, y la forma mostrada es un indicador muy positivo», aseveró el estratega.

No solo los cubanos han tenido que buscar alternativas para calentar sus músculos, pues no habrá otras facilidades para entrenamientos hasta cinco días antes del comienzo oficial de las competencias.

A pesar del fuerte dispositivo de bioseguridad, el sábado fue reportado el primer caso positivo a la COVID-19 en la villa olímpica, pero el propio presidente del COI, Thomas Bach, dijo que no representa peligro para el resto de los alojados en el recinto.

Ese mismo día, los organizadores confirmaron que otras 13 personas asociadas a los juegos también fueron detectadas con el nuevo coronavirus y en lo que va de julio suman más de 40.

Por mucho que el mecanismo creado aquí funcione como una poderosa red para atrapar positivos y evitar contagios, parece que noticias así van a compartir titulares durante estos días, aunque Bach diga que Tokio es una ciudad muy segura para esta edición de los Juegos.

 

 

 

 

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