Estevao celebra su gol contra Chile y la clasificación de Brasil a la Copa Mundial de Futbol Estados Unidos, México y Canadá 2026. Autor: Tomada de X Publicado: 12/09/2025 | 09:57 pm
Cuando quedan menos de 300 días para que el balón eche a rodar en el estadio Azteca, el póster de selecciones participantes en la Copa Mundial de Fútbol se actualiza con la llegada de seis nuevas banderas de dos continentes diferentes. Algunas candidatas a todo. Otras simples participantes. Pero las seis con la alegría de clasificar a la gran fiesta del deporte más hermoso del mundo.
Sudamérica vivió sus últimas dos jornadas con un panorama bastante definido, y 4 billetes que se saldaron sin demasiado ruido. Brasil, Colombia y Uruguay sellaron sus pasaportes a Estados Unidos-México-Canadá con sendas goleadas de 3-0 a Chile, Bolivia y Perú respectivamente. Paraguay no pasó del empate contra Ecuador, pero ese punto le bastó para tomar vuelo sin escala a la fiesta mundialista por primera vez en quince años. Estos resultados dejaron el terreno listo para una última jornada que fue intrascendente en los que respecta a pasajes directos, pero al rojo vivo en la definición del clasificado al repechaje intercontinental. En un duelo indirecto, Venezuela y Bolivia vivieron a pocos kilómetros de distancia una noche para el recuerdo o el olvido, dependiendo con que catalejo se mire.
Venezuela tenía todo para ponerse a un partido de llegar al primer mundial de su historia. Jugaban en casa, ante una Colombia que no se disputaba nada más allá del orgullo. Dependían de ellos mismos, a diferencia de un conjunto boliviano que tenía que ganar y esperar una debacle vinotinto. La noche no pudo empezar mejor en el Monumental de Maturín, cuando Telasco Segovia adelantó a las primeras de cambio a Venezuela, poniendo a todo un país a soñar con la clasificación mundialista. Pero eso sería solo el prólogo de una jornada que parecía interminable. Venezuela vivió un partido de altos y bajos, incluidas dos remontadas visitantes y un póker de Luis Javier Suárez, delantero colombiano que se vistió de inesperado héroe amarillo y verdugo local, para que terminara de llover café en Maturín. Un segundo tiempo de lágrimas, donde la cancha se tiñó de color dorado, pues solo un equipo existió en el terreno, sentenció a un conjunto venezolano que no solo perdió la batalla de la arepa, sino también se quedó en sus manos con un montón de sueños rotos por culpa de un pistolero con pasado en el fútbol español.
Mientras las lágrimas se apoderaban de la tierra del Joropo, en el Alto boliviano Carlo Ancelotti en su cuarto examen con la verdeamarelha se enfrentaba al rival más duro de su carrera como entrenador: la altura. Jugar sobre 4000 metros al nivel del mar no es cosa de juego, y si lo haces frente a un equipo acostumbrado a eso, la derrota se pinta sola. Un polémico penal transformado por Miguelito al filo del descanso bastó para despertar a toda una afición. Y aunque en el papel era un duelo sin emoción, Bolivia le imprimió un extra salido de la nada, y de no ser por un Allison colosal la vergüenza carioca hubiera alcanzado matices de tragedia. La segunda mitad recibió un cambio de look con la entrada de los titulares brasileños en detrimento del equipo Z que había tomado el inicio, pero ni eso fue suficiente para evitar que la salteña venciera a la samba, que el cóndor volara más alto que nunca, y que los verdes se pongan a un pequeño paso de volver a una Copa Mundial de futbol 32 años después.
Cerraban así las puertas de una eliminatoria sudamericana que nos muestra un reflejo de lo que vendrá en el futuro. De ser la fase más espectacular camino a un mundial, a volverse una eliminatoria monótona, donde un grupo de favoritos clasificarán sin tirarse mucho de los pelos teniendo un mayor colchón de reserva, donde clasificará más de la mitad de los conjuntos implicados y varias jornadas no tendrán nada en juego. Un simple dato para entender la magnitud del cambio: si Brasil hubiera terminado en la quinta posición en la que concluyó en esta fase, pero con el formato anterior, habría tenido que ir a jugar repechaje con un rival del otro lado del mundo.
Leones y Águilas sacan su pasaje en África
Mientras en este lado del mundo cuatros equipos sacaban su ticket, cruzando el Océano Atlántico dos planteles también se agenciaban su boleto a la cita mundialista del próximo verano. Primero fue la selección de Marruecos, que aun guardan frescos recuerdos de lo ocurrido en la última cita mundialista, cuando se convirtieron en el primer equipo africano en colarse en una semifinal mundialista. Los leones del Atlas superaron sin dificultad a sus rivales, y con puntuación perfecta de 21 unidades superan por 11 a la selección de Tanzania y son inamovibles de la cima.
Un par de días después fueron las Águilas del Cartago quienes sellaron su clasificación mundialista. Túnez llegó a 22 puntos de 24 posibles, y con aún seis en juego, son inalcanzables para Namibia y Liberia, sus más cercanos perseguidores en el grupo H de la región africana. En Qatar hicieron un mundial sobresaliente, robándole puntos a la mismísima selección de Francia, y el próximo año, con los cupos ampliados y selecciones de menor abolengo presentes, el cómputo de puntos puede seguir aumentando.
A falta de dos partidos varios equipos de África acarician con sus manos el boleto al paraíso. Egipto, Ghana, Argelia y Sudáfrica deben lograrlo sin muchas complicaciones en el próximo mes de octubre, al igual que la gran revelación de este proceso mundialista: la selección de Cabo Verde. El modesto conjunto caboverdiano dio la campanada derrotando a la todopoderosa Camerún, y una victoria sobre la débil selección de Libia en poco menos de un mes los pondría en el póster de clasificados, sumándose a Uzbekistán y Jordania como los planteles debutantes en la próxima Copa Mundial de Fútbol.
El telón de los encuentros de selecciones nacionales cae por este mes. Los jugadores vuelven con sus clubes a vivir el día a día de las competiciones domésticas, a jugar los fines de semana y comenzar los torneos continentales entre semana. La eliminatoria mundialista descansa durante poco menos de 31 días, y lo hace con seis nuevos contendientes al trono, con seis nuevas bolas que se suman al sorteo del próximo diciembre.