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Casi diez millones de personas han aprendido ya a leer y a escribir con el método cubano de alfabetización para adultos Yo, sí puedo, que desde 2002 ha sido implementado en 30 países, según reporta la Agencia de Información Nacional (AIN).
Liset Valdés, subdirectora del Instituto Pedagógico Latinoamericano y Caribeño (Iplac), en conferencia de prensa, señaló que a principios de 2016 se debe sobrepasar esa cifra, pues para esa fecha se deben haber graduado las cerca de 795 000 personas que están en estos momentos en las aulas.
La directiva explicó a la AIN que el Yo, sí puedo ha llegado a naciones donde los propios colaboradores de la Isla se han asombrado de que el analfabetismo constituya un problema.
Tomemos el caso de España —comentó—, que en 2012 solicitó la ayuda porque en varias zonas rurales sumaban más de 400 las personas iletradas; o de Canadá, Australia y Nueva Zelanda, donde tuvimos que ir a instruir a las comunidades aborígenes en estos últimos años.
A veces ocurre que, si en una nación los iletrados están concentrados en una región o sector poblacional, el Estado no considera al analfabetismo como un problema, acotó, así que los gobiernos locales tienen que gestionar su propio presupuesto para desarrollar las campañas, o depender de una Organización No Gubernamental.
El método Yo, sí puedo, creado por la fallecida pedagoga Leonela Relys a solicitud del Comandante en Jefe Fidel Castro, ha sido adaptado a los idiomas inglés y portugués, así como también a los dialectos quechua, aymara, guaraní, creole, swahili y tetún, y próximamente será recontextualizado en lengua francesa.
