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Con una leve inclinación de cabeza el líder bolivariano saludó al Apóstol luego de colocar ante él la hermosa ofrenda de rosas, y luego contempló la capital desde el mirador que se erige en lo alto del monumento. Autor: Marcelino Vázquez Hernández/ACN Publicado: 21/04/2018 | 10:36 pm
En lo que constituyó el primer acto oficial del nuevo presidente cubano, Miguel Díaz-Canel Bermúdez, y también, el momento para ser depositario del primer saludo personal que recibe de otro mandatario luego de su elección, se encontró en la mañana de este sábado con su homólogo venezolano, Nicolás Maduro Moros.
El Presidente de la República Bolivariana inició la jornada con el homenaje a Martí, ante cuya estatua en el Memorial que lleva su nombre depositó una ofrenda floral acompañado por su esposa y Primera Combatiente de Venezuela, Cilia Flores, y por el viceministro cubano del Exterior, Rogelio Sierra.
Con una leve inclinación de cabeza el líder bolivariano saludó al Apóstol luego de colocar ante él la hermosa ofrenda de rosas, y luego contempló la capital desde el mirador que se erige en lo alto del monumento.
Minutos después sería el recibimiento oficial en el Palacio de la Revolución. Como es tradicional, ambos mandatarios pasaron revista a la Guardia de Honor con los acordes del Himno del 26 de Julio, tras lo cual saludaron a las respectivas delegaciones con ese aire fraterno que caracteriza los nexos bilaterales entre nuestros países.
Venimos a renovar la esperanza
«Hemos venido transitando sobre dificultades, sobre sueños, esperanzas; y hoy venimos a renovar la esperanza, los sueños y a apuntar hacia el futuro», dijo el Presidente venezolano a la prensa cuando se le interrogó sobre la posibilidad de que emerjan proyectos bilaterales conjuntos de esta visita, de cara a la compleja situación regional.
Maduro destacó la necesidad de «visualizar, diez años adelante, qué más se puede hacer, qué más es necesario hacer por nuestros pueblos; y hablo del pueblo cubano y del venezolano, pero también de Nuestra América, de América Latina, del Caribe.
«Qué más hay que hacer para echar bases profundas e indestructibles de la unión política; de la unión espiritual y moral. Sobre todo, de unión económica que es la que va a cimentar la liberación verdadera», señaló.
La independencia y la liberación del siglo XXI va a descansar sobre la posibilidad de que nosotros construyamos una unión poderosa en lo económico, dijo Maduro, quien manifestó el propósito de realizarlo con el compañero Presidente Miguel Díaz-Canel, con el compañero Raúl, «que sigue al frente de la vanguardia, dirigiendo la batalla, y con Cuba».
«Nosotros tenemos mucho que hemos hecho pero falta mucho por hacer, y vamos a apuntar sobre todo lo que falta por hacer», señaló.
