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No hay otro método de trabajo, sobre todo en estos tiempos, que el Gobierno en la calle, a partir de una comunicación directa, oportuna, veraz y transparente con la población, afirmó el miembro del Buró Político y Primer Ministro, Manuel Marrero Cruz, al evaluar este sábado la marcha de la recuperación en Mayabeque, luego del paso del huracán Ian.
Con la totalidad de los servicios básicos restablecidos, el Jefe de Gobierno reconoció la rapidez de las acciones recuperativas en el territorio, si bien los daños no fueron muy significativos, lo que permite concentrar esfuerzos y recursos en los lugares más afectados.
No obstante, afirmó, «alcanzar el ciento por ciento de la recuperación implica, más que el fin, el punto de partida para llegar con más fuerza al resto de los problemas acumulados, que son mucho mayores».
En la reunión, que tomó como escenario la empresa de muebles Signo, de Batabanó, uno de los municipios afectados, la gobernadora de Mayabeque, Tamara Valido Benítez, informó que los principales daños estuvieron asociados a la
penetración del mar en tres asentamientos costeros: Surgidero de Batabanó, Playa Mayabeque y Playa Caimito.
Añadió que el agravamiento del estado de los drenajes, los perjuicios en más de 320 viviendas, sobre todo en los techos, y la pérdida de bienes, enseres y equipos electrodomésticos figuraron entre las principales afectaciones.
Marrero Cruz también recibió una información pormenorizada sobre el proyecto de rehabilitación integral del consejo popular de Surgidero de Batabanó, orientado hacia cuatro líneas fundamentales: acueducto y alcantarillado, viales, vivienda, y mejora y acondicionamiento de instituciones sociales.
En ese sentido, trascendió que, en materia de abasto de agua, ya se construyeron cinco kilómetros de conductora, que permite el servicio intradomiciliario a los pobladores, cuya fase de puesta en marcha debe culminar en este mes de octubre.
Además, se trabaja en la limpieza de 12,8 kilómetros de zanjas y canales, de ellos 1,5 de zanjas interiores, unido a la primera etapa de rehabilitación del alcantarillado para evitar el vertimiento de residuales a las calles.
El Jefe de Gobierno insistió en el análisis de las causas que dilataron la puesta en marcha de dicho proyecto, y reiteró, una vez más, la necesidad de establecer un intercambio permanente con la población.
No podemos comprometernos a resolver todos los problemas de una vez, dijo, aunque es lo que quisiéramos; pero si algo tenemos que derrochar es atención e información a las personas. «Todo aquello que demande una respuesta, no puede dejarse para mañana y hay que estar ahí, dentro de las comunidades, trabajando y buscando soluciones».
Surgidero tiene otro rostro
Acompañado por el vice primer ministro Jorge Luis Perdomo Di-Lella, ministros y viceministros de varios sectores, y las autoridades locales, Marrero Cruz visitó un asentamiento donde se están construyendo las viviendas reubicadas de Surgidero de Batabanó, afectadas por varios eventos hidrometeorológicos.
Allí, interesado por los tiempos de fabricación y la sostenibilidad de los suministros, llegó hasta la vivienda asignada a Neilín Caridad Ortiz y Reinaldo Espinel, un matrimonio con cuatro niños que lo perdió todo, menos la confianza en la Revolución.
«La casita de nosotros se desbarató, y ahora nos dieron esta. Mira qué linda. No me voy a cansar nunca de agradecerles a todos», aseguró Reinaldo, quien, al decir de las autoridades locales, se sumó desde el primer momento a la construcción de su hogar.
Seguidamente, el Primer Ministro recorrió las calles de Surgidero, donde las zanjas abiertas y el ajetreo confirman la envergadura de lo que allí se ejecuta. «De los 12,8 kilómetros de zanjas y canales ya tenemos listos 7,7», aseguró Yosvany Rubí, delegado del Instituto Nacional de Recursos Hidráulicos en Mayabeque, al tiempo que mencionó los 11 kilómetros de redes de alcantarillado en los cuales se labora.
Marrero Cruz también conoció de los avances en la vialidad: de diez kilómetros previstos, ya se trabaja en seis de vías principales, y se sumarán cuatro de calles secundarias.
El recorrido también incluyó una bodega, actualmente en proceso de remodelación, el puerto, y la empresa pesquera Mayabeque, entidad con indicadores productivos que hablan de eficiencia y, sobre todo, de potencialidades para seguir ampliando, entre otros surtidos, los productos con destino a la población.
