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El susto por la niña que se tragó la tuerca

Pequeña con cuerpo extraño alojado en el esófago resultó felizmente salvada gracias a la labor de un equipo multidisciplinario de médicos holguineros

Autor:

Juventud Rebelde

Una nueva urgencia, por una niña de seis años de edad con cuerpo extraño en el esófago, activó el pasado sábado 12 de agosto el Sistema Integrado de Urgencias Médicas (SIUM) de la provincia de Holguín, el Servicio de Otorrinolaringología y a otros especialistas del hospital pediátrico Octavio de la Concepción de la Pedraja, donde un equipo multidisciplinario logró con éxito extraerle el cuerpo extraño a la pequeña, según reportó el periódico ¡Ahora! en su edición digital.

Fotos: Periódico Ahora

En horas de la tarde de aquel día, al hospital de Banes llegó una abuela con la nieta en brazos, que manifestó que «la niña se había tragado una tuerca, accidentalmente, y era epiléptica», lo cual hizo, además de comunicar esta emergencia, de las más frecuentes en los infantes, que se valorara en el cuerpo de guardia de esa institución y se le realizaran radiografías, a través de las que se observó el objeto en el esófago cervical.

Ese día estaba de guardia localizable el doctor Alberto Ibarra Batista, especialista en Otorrinolaringología, y  fue avisado con premura para asistir el caso.

El joven médico indicó un nuevo estudio radiográfico y de inmediato la llevó al salón de operaciones, donde realizó una esofagoscopia bajo anestesia general para extraer la tuerca, sin mayores complicaciones, aunque el proceder resultó bastante trabajoso, según explicó el doctor.

Ibarra Batista, quien estuvo acompañado en este acto por la anestesióloga Moraima Gendis, el doctor Oscar López y el cirujano Adrián Ramírez, señaló que el esófago de la paciente estaba muy traumatizado, pero sin perforación, por lo cual se le colocó, bajo visión endoscópica, una sonda nasogástrica para dar reposo al tubo muscular que transporta los alimentos y líquidos desde la boca hasta el estómago.

Aseguró que la niña ha evolucionado de manera satisfactoria en la sala de hospitalización, le fue retirada la sonda y tolera la dieta líquida sin mayores problemas.

Sobre este hecho y otros similares que han sido atendidos en el hospital pediátrico, el especialista enfatizó: «El mejor consejo a familiares de pequeños es que eleven la prevención para evitar estos casos, que en la mayoría de las ocasiones tiene un desenlace feliz, pero puede el paciente complicarse.

«Es preciso tener cuidado en el ambiente donde se encuentran los niños,  y no propiciarles que tengan a su alcance objetos que puedan llevarse a la boca, la nariz o los oídos», dijo.

 

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