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Una intensa jornada de trabajo ocupó a los delegados al 12mo. Congreso de la UJC en el Palacio de Convenciones de La Habana, este jueves durante la última sesión de la cita, cuando no faltó entusiasmo y alegría, así como la reflexión aguda y el combate crítico a lo mal hecho, modos que caracterizan cualquier reunión en la que los jóvenes revolucionarios cubanos toman la palabra.
Allí estaban Miguel Díaz-Canel Bermúdez, Primer Secretario del Comité Central del Partido y Presidente de la República, junto a los miembros del Buró Político Esteban Lazo, presidente de la Asamblea Nacional del Poder Popular y del Consejo de Estado; Roberto Morales Ojeda, secretario de Organización del Comité Central del Partido, y Manuel Marrero, Primer Ministro, entre otros dirigentes.
También asistieron a la sesión de clausura los Comandantes de la Revolución Ramiro Valdés Menéndez y Guillermo García Frías; así como el Comandante del Ejército Rebelde José Ramón Machado Ventura, quienes junto a los jóvenes celebraron los aniversarios 62 y 63 de la UJC y la OPJM, respectivamente.
La jornada plenaria del magno evento comenzó con el análisis del informe central, el cual motivó una
veintena de intervenciones que culminaron con la aprobación del texto y el plan de acciones de trabajo de la organización para la próxima etapa.
De igual forma se sometió a aprobación por los delegados las propuestas presentadas por Díaz-Canel en sus intervenciones durante el debate, y en franco diálogo con los jóvenes les propuso crear un espacio para realizar encuentros sistemáticos de innovación juvenil, en los que se analicen problemáticas claves de la sociedad cubana actual y se propongan soluciones.
También sugirió realizar una labor política desde la UJC para que todos los jóvenes cubanos se vinculen al estudio o al trabajo, lo cual fue acogido positivamente por los militantes presentes.
Momento de singular importancia fue la lectura de la Resolución de la juventud cubana en solidaridad con la causa palestina, en la que se denuncia el apoyo cómplice del Gobierno de Estados Unidos, que intenta naturalizar y justificar el genocidio que comete Israel, con lo cual solo ha conseguido alentar el odio y la violencia contra el pueblo palestino e impedir la búsqueda de una solución justa y duradera a ese conflicto.
Posteriormente se presentaron los resultados de las votaciones y el nuevo Comité Nacional de la UJC, y su Buró. Resultó electa primera secretaria de la organización Meyvis Estévez Echevarría, quien dio lectura a la Declaración de la Juventud cubana, que fue recibida por el Comandante del Ejército Rebelde José Ramón Machado Ventura, en nombre del General de Ejército Raúl Castro Ruz, líder de nuestra Revolución.
El texto refiere que el Congreso fue un homenaje a Cuba, a su historia, a su pueblo y a sus jóvenes, y un tributo especial a Fidel, quien creyó siempre en la juventud y sigue siendo inspiración, como lo fueron nuestros próceres, para la juventud de su tiempo, herederos todos de las tradiciones de lucha del pueblo cubano y de los pueblos del mundo.
En sus palabras de cierre del encuentro, el Presidente Díaz-Canel reconoció la profundidad y alegría presentes en el Congreso, «incluso en estos tiempos difíciles y desafiantes, cuando el sector que menos crece en la sociedad es el de los menores de 30 años, y donde la niñez y la juventud se desarrollan en las condiciones de un país castigado y perseguido en su economía, pero también en sus sueños.
«El gran mérito de la juventud cubana que vive, estudia y trabaja aquí, es que saltan por encima de todas las dificultades que tienen para salir a luchar diariamente por una Cuba mejor, y los jóvenes han sabido probarse como revolucionarios defensores de las mejores tradiciones patrióticas, desde los tiempos de Céspedes», comentó.
