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Arjen Robben será uno de los grandes ausentes Autor: AFP Publicado: 28/11/2017 | 10:16 pm
La génesis de esta historia se remonta a más de dos años en el pasado, cuando en diferentes latitudes del planeta las selecciones se alistaban para ser parte de una de las batallas deportivas más colosales, y que cada cuatro veranos congrega en un solo sitio a las más grandes estrellas del fútbol.
Hasta 209 equipos compitieron a partir de aquel momento en un espectáculo masivo y apasionante, cuyo clímax tendrá lugar en Rusia, entre los meses de junio y julio próximos.
Luego de concluida la primera parte de esa contienda, durante la cual se celebraron 868 partidos y fueron anotados 2 454 goles, han sido otorgados los 31 boletos en disputa a aquellos conjuntos que mejor expusieron sus capacidades sobre la cancha. Ahora solo queda esperar el 1ro. de diciembre, fecha del sorteo que predestinará el camino hacia el título.
Sin embargo, este capítulo de la historia no pretende dar protagonismo a aquellos que ganaron su derecho a batallar por la gloria, sino que dedicará un instante a «los otros», esos que apartados de esta edición deberán aprovechar el próximo ciclo para reconstruir su fútbol y esperanzas.
A primera vista, el listado de los «caídos» parece tener bastante de azul, pues nada menos que una squadra histórica como la italiana se quedó fuera de la cita, hecho que privó a Gianluigi Buffon, leyenda viva de la portería, de jugarla por sexta ocasión, y así convertirse en el atleta con más participaciones en el torneo. Junto con él cayeron otros «viejos gladiadores» como Bonucci, Chiellini y De Rossi, mientras que jóvenes talentos como Insigne, Bernardeschi y Verrati, deberán esperar un poco por su momento.
Otras son las estrellas del Viejo Continente que faltarán a la fiesta, entre quienes destacan Gareth Bale (Gales), Arda Turan (Turquía), Arjen Robben (Holanda), Miralem Pjanic y Edin Dzeko (Bosnia), Jan Oblak (Eslovenia), David Alaba (Austria), Sokratis Papastathopoulos (Grecia), Marek Hamsik (Eslovaquia), Stevan Jovetic y Stefan Savic (Montenegro), Andriy Yarmolenko (Ucrania) y Henrikh Mkhitaryan (Armenia).
Desde América, rojos son los colores de la «desgracia», pues Chile, coronada dos veces a nivel continental —2015 y 2016—, no alcanzó tampoco su pasaje, un fracaso que parece señalar el final de una época dorada, encabezada hasta la fecha por Alexis Sánchez, Arturo Vidal, Claudio Bravo, Gary Medel, Charles Aránguiz y Eduardo Vargas.
También será echado en falta el talento de otros representantes de este lado del Atlántico, como son el estadounidense Christian Pulisic, al igual que los ecuatorianos Felipe Caicedo, Enner y Antonio Valencia.
África también aportó su dosis de decepción, pues nada menos que tres conjuntos considerados como habituales: Camerún, Ghana y Costa de Marfil, no animarán los terrenos rusos con sus vivos colores e intensa energía. Así, los aficionados añorarán, entre otros, a los marfileños Yaya Touré, Gervinho y Aurier, al gabonés Aubameyang y a los ghaneses Ayew, Gyan y Partey.
Aunque la relación podría crecer si se busca más a fondo, basta con mirar a los tristemente ilustres miembros de este «club», para percatarnos de cuánto nos perderemos de aquí a unos meses. Eso sí, a pesar de esas ausencias, sería totalmente injusto pensar que no habrá suficiente magia en Rusia para hacernos disfrutar —televisión mediante— de un verano lleno de estrellas.
