25
Adriana ya está recuperada de la lesión que la aquejó en San Salvador. Foto: Cortesía de la entrevistada Autor: Cortesía de la entrevistada Publicado: 07/10/2023 | 11:46 pm
Pocos recuerdan el pasado 7 de julio con tanta emoción como lo lleva en la memoria la habanera Adriana Cantillo Tundidor. Ese día hizo historia porque ese viernes pasó de ser la principal figura del patinaje femenino cubano en la actualidad a convertirse en la primera mujer criolla que se colgaba al cuello una medalla de plata centroamericana en esta disciplina. Inolvidable.
Sin embargo, la joven patinadora aspira a que esa presea no luzca en sus vitrinas en solitario y, con ese anhelo, arrecia su preparación rumbo a los Juegos Panamericanos de Santiago 2023, en los que intervendrá en la modalidad de 200 metros contra meta y 500 metros, sus dos eventos favoritos de la pista, según contó a JR tras su reciente participación en el campeonato mundial de su deporte, el cual tuvo por sede a la urbe italiana de Montecchio Maggiore, en Vicenza.
«En Santiago 2023 no se competirá en 100 metros, prueba en la que en el certamen mundialista terminé entre las diez mejores corredoras del planeta (octavo puesto). Tristemente no pude medir mis capacidades a este nivel en las modalidades que sí están convocadas en Chile, pues solo alcancé a llegar a la sede de la competencia finalizando la lid, algo que afectó mucho mi preparación para los Panamericanos.
«Aun así me siento muy bien. Serán mis primeros juegos continentales y tengo muchas ganas de vivirlos. Ahora mismo se puede decir que estamos en una preparación especial y casi competitiva con miras a esta justa, la cual enfrentaré como siempre, con la mejor actitud», afirmó la atleta capitalina.
Con un adiestramiento netamente nacional y todas las dificultades que eso trae consigo, más el agravante de no contar en el país con una pista con las medidas oficiales, cuando en Santiago todos los eventos serán exclusivamente sobre esta superficie, la muchacha, oriunda de La Lisa, mantiene buen ánimo.
«Por mi experiencia, y teniendo en cuenta que América es el continente más fuerte en la disciplina y que todos ellos están entrenando al más alto nivel, pudiera decir que vamos a dar lo mejor de nosotros, pero los pronósticos son discretos. Hace muchos años que no veía tanto nivel en el patinaje internacional como el que existe hoy».
Tal y como sucedió en San Salvador, nuevamente la colombiana fuera de serie Geyni Pájaro debe erigirse como una de las rivales más potentes a la que enfrentará Adriana en el Patinódromo Panamericano de la comuna de Ñuñoa.
«Geyni es una patinadora que inspira confianza, seguridad y me encanta competir con ella. En los últimos tres años hemos compartido disímiles eventos. Claro que sueño con algún día cruzar la línea por delante de ella, aunque sé que es algo difícil de lograr, pues es una atleta que me lleva diez años de ventaja al más alto nivel dentro de nuestro deporte.
«Pero no es solo Geyni, en Chile veremos patinadores de renombre en América y eso no me presiona, al contrario. Soy una atleta a la que le gusta competir siempre contra los mejores», destacó.
Pocos saben que Adriana cruzó segunda la meta en San Salvador con un músculo de su pierna izquierda lesionado desde la primera carrera de los 100 metros y, aun así, la cubana logró posicionarse todo el tiempo detrás de la colombiana Pájaro. Quizá por eso tiene aún más mérito ese metal centroamericano que ahora sueña con repetir, aunque en un escenario mucho más complejo, porque compitió contra dos rivales: la atleta cafetera y el dolor.
Por eso, tras tres meses de aquel julio glorioso, sigue feliz, aunque no satisfecha. «No estoy conforme porque salí a aquella final con un tiempo de 10.8 y Geyni con un 10.7 y el dolor me impidió patinar como hubiese querido, por lo que me quedé con la duda de qué tan lejos podía haber llegado ese día. Pero habrá más carreras, no se acabó allí», puntualizó Cantillo Tundidor.
