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Rechazo a políticas de Duque en la «toma de Bogotá»

Cientos de focos de protestas surcaron la capital contra las políticas del presidente Iván Duque, en otra jornada tensa, marcada por las acusaciones de abusos gravísimos en la represión del estallido social iniciado hace un mes y medio

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Juventud Rebelde

BOGOTÁ, junio 9— Miles de manifestantes volvieron a movilizarse de manera pacífica este miércoles en esta ciudad para cumplimentar la denominada «toma de Bogotá», convocada por el Comité Nacional del Paro como continuación de sus protestas, y luego de abandonar el diálogo con el Gobierno por falta de voluntad de este para abordar el temario presentado, explicaron sus miembros.

Cientos de focos de protestas surcaron la capital, dijo Télam, contra las políticas del presidente Iván Duque, en otra jornada tensa, marcada por las acusaciones de abusos gravísimos en la represión del estallido social iniciado hace un mes y medio, y con la investigación de esos actos bajo la lupa de la Comisión Interamericana de los Derechos Humanos (CIDH), cuyos representantes están en el país.

Los manifestantes, en su mayoría jóvenes, marcharon pacíficamente con pancartas y banderas para llegar, mediada la tarde, a un hotel de Bogotá, donde líderes del Comité se reunirían con integrantes de la misión de la CIDH.

Según informó el vocero del Comité y presidente de la Central Unitaria de Trabajadores, Francisco Maltés, en la cita presentarían un informe que da cuenta de unas 70 muertes, cerca de cien desaparecidos y más de 3 000 casos de abuso policial desde el estallido de la crisis social y política el 28 de abril pasado, así como el preacuerdo que pactaron con el Gobierno el pasado 24 de mayo y que este aún no había firmado el lunes, razón por la cual abandonaron la mesa de conversaciones.

El Comité Nacional del Paro busca dejar constancia de lo que consideran una «falta de voluntad política que ha habido de parte del Gobierno para garantizar los derechos humanos, y particularmente en el ejercicio de la protesta», explicó Maltés, citado por el diario local El Espectador.

Los excesos de la fuerza pública volvieron a ser ostensibles este propio miércoles, cuando efectivos de seguridad y miembros del temible Esmad (Escuadrón Antidisturbios) reprimieron con saña a indígenas que intentaban derribar la estatua de Cristóbal Colón en la calle 26, según denunció la organización defensora de derechos humanos Defender la Libertad.

«El Esmad no cumple los protocolos de actuación, dispara al cuerpo de la gente. Alcaldesa Claudia López, ¿qué vale más la vida o una estatua? Exigimos garantías para el pueblo MISAK y que la Fuerza Pública actúe como corresponde», escribió la ONG en un mensaje en Twitter dirigido a la alcaldesa de Bogotá.

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