Joanne K. Rowling, la autora de la saga de Harry Potter, ha ganado nuevamente protagonismo no por sus novelas, sino por pronunciarse críticamente sobre los frecuentes comentarios que el presidente norteamericano Donald Trump difunde en la red social Twitter, a quien calificó como «imprudente» e «insensible».
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El poeta portugués Manuel Alegre ganó el premio Camoes 2017, la mayor distinción de la literatura en lengua portuguesa, en virtud de una obra difundida más allá de su ámbito lingüístico y que cuenta entre sus mayores logros los poemarios La plaza de la canción (1965) y El canto y las armas (1967). Alegre fue un opositor al régimen de Oliveira Salazar y militó en el Partido Socialista Portugués.
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Los lectores españoles redescubren la obra de Luisa Carnés (1905-1965), una escritora comprometida que escribió en los años 30 novelas sobre mujeres obreras que percibían salarios míseros. Luego de la caída de la República relató el dolor causado por la represión franquista. El largo exilio no hizo que bajase la voz y se acomodase a las circunstancias: tras 25 años en México, continuó escribiendo por la paz y contra el consumismo escapista o la segregación racial, como lo evidencian los textos agrupados en la antología Trece cuentos (1931-1963), de reciente aparición.
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Cuando el diablo salió del baño es una novela que narra la historia de una mujer que malvive en París, gracias a una ayuda para desempleados de larga duración. El alquiler de su minúsculo apartamento le deja apenas cien euros para pasar el mes. En cierto modo es una víctima de sus propias ilusiones porque ha dejado un empleo razonable para dedicarse plenamente a la literatura. La autora de esta novela es Sophie Divry, quien nació en Montpellier en 1979. Sus dos libros anteriores Signatura 400 (traducido a numerosos idiomas) y La condition pavillonnaire han sido grandes éxitos.
Para el autor alemán Bernhard Schlink (Bielefeld, 1944), cuya novela El lector lo ha catapultado a la fama, uno de los problemas cruciales de su existencia consiste en asumirse como parte de una generación que nació al final de la guerra o justo después, y luego vivir la experiencia de que el padre, o un tío, o su maestro, hayan estado involucrados en algo horrible durante el Tercer Reich. Las respuestas a esos dilemas confiesa haberlas encontrado en la escritura.
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Tyler Knott Gregson se revela como una rareza en el panorama poético norteamericano. Habita en las montañas de Helena (Montana), es budista y se gana la vida como fotógrafo de bodas. Su libro Cazadores de la luz ha vendido más de 150 000 ejemplares en Estados Unidos. The New York Times se muestra escéptico acerca de su talento —apunta que este tipo de autores siempre son ignorados por la crítica y no ganan premios literarios— pero reconoce que es «el equivalente literario a un unicornio».
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Ayobami Adebayo nació en Nigeria y es la sensación entre los nuevos novelistas africanos. Escribió Quédate conmigo en 2013, al cabo de tres años publicada por Canongate Books, la editorial independiente más célebre de Reino Unido, lo cual le valió ganar el Baileys Women’s Prize 2017, el premio literario femenino más prestigioso que allí se entrega. La novela se desarrolla en el contexto de la convulsa situación política y social de Nigeria en los años 80. Yejide y Akin viven felizmente, hasta que ella descubre que no puede quedarse embarazada y la familia de él lo presiona para que tome una decisión que rompa con los ideales de la pareja.
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