Juventud Rebelde - Diario de la Juventud Cubana

1. S.: Siento que me comunico bastante bien, pero padezco de timidez al intentar conquistar a las mujeres. Aunque los deseos sean casi incontrolables, no logro ni siquiera decir Hola. Temo no ser correspondido, quedarme sin palabras en algún momento de la conversación… En fin, no sé cómo establecer una conversación para conquistar o coquetear. Mis amigos me preguntan cuándo me verán casado o con una novia, por lo que me avergüenzo con facilidad, aunque no lo demuestre. He tenido mis relaciones, pero no han sido formales. Quiero tener hijos, formar mi familia, disfrutar del placer de ser padre, y a la vez que mis padres disfruten del placer de ser abuelos. No quiero ir a la consulta de sicología, porque mi carácter no me lo permite y sería muy bochornoso. Soy un hombre de 35 años.

Según tus propias palabras, sabes comunicarte bien. Ese no es el problema. Solo guardas silencio para evitar el fracaso de una conquista. Deseando la aceptación femenina, evitas un saludo que te confronte la desilusión.

Es difícil establecer una relación sin disponerse a perder. El amor implica aceptar la falta de garantías, la falta propia y el riesgo de sufrir pérdidas. Es por eso que tendrías que desear mucho una relación comprometida para atravesar todos los retos que esto implica. No basta que quieras mostrar una familia a tus amigos y padres. Sin riesgo de ninguna pérdida: de palabra, de correspondencia, de bochorno, será difícil que surja un Hola atrevido.

Si continúas perdiendo oportunidades por defenderte de cualquier posible fracaso, podrás consultar a un profesional que te ayude a entender esa elección de corazas que te defienden, pero te alejan de lo que crees desear.