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SANAA, enero, 13.— Fuerzas militares de Yemen aniquilaron al jefe de una célula de Al-Qaeda en la provincia oriental de Shabwa, mientras el gobierno negó hoy haber renovado una oferta de diálogo con quienes persistan en la violencia.
El gobernador de la mencionada demarcación, Ali Hassan Al-Ahmadi, confirmó este miércoles la muerte de Abdulah Mehdar, cabecilla de un comando armado de Al-Qaeda en la región de Al-Houta, unos 600 kilómetros al este de Sanaa.
Según Al-Ahmadi, las fuerzas de seguridad rodearon la pasada madrugada la vivienda donde permanecía escondido Mehdar y tras un tiroteo lo eliminaron, mientras soldados continuaron la búsqueda de los restantes miembros de esa milicia irregular.
La agencia estatal SABA reportó, además, que dos soldados del ejército perecieron hoy en una emboscada en una carretera de la propia provincia de Shabwa, pero obvió detalles del incidente.
Asimismo, el Ministerio del Interior aseguró que al menos 15 musulmanes chiitas pertenecientes a la secta Al-Zaydi fueron murieron en enfrentamientos con líderes tribales leales al gobierno y en operaciones militares contra bastiones Houthis en el noroeste.
En los últimos días arreció la ofensiva de las fuerzas armadas contra los Houthis en la provincia de Saada, donde los rebeldes chiitas aseguran que también son atacados por la aviación de Arabia Saudita, reino donde gobierna la rama islámica sunnita wahabita.
Sin embargo, junto al conflicto en la frontera noroeste, el gobierno de Ali Abdulah Saleh intensificó la persecución contra la red del yemenita Osama Bin Laden tras conocerse que un atentado fallido en diciembre a un avión estadounidense fue planeado en este país árabe.
Entretanto, un portavoz del Ministerio de Relaciones Exteriores desmintió reportes de prensa, según los cuales, el canciller yemenita, Abu Bakr al-Qirbi, había renovado una oferta hecha antes por el mandatario para conversar con líderes de los Houthis y de Al-Qaeda.
Al-Qirbi, aclaró el vocero, repitió ayer en una rueda de prensa que el reciente llamado del presidente Saleh a miembros de Al-Qaeda para hablar «tiene varios medios para contrarrestar la amenaza terrorista, incluido el diálogo intelectual (sic) con elementos extremistas».
«Cualquier diálogo con Al-Qaeda será parte de un programa adoptado por el gobierno para abrir la puerta a aquellos elementos engañados que renuncien a la violencia, retomen la senda correcta y se inserten en sus comunidades como buenos ciudadanos», recalcó la fuente.
La agencia SABA recordó que Saleh invitó a platicar sin recurrir a la fuerza y sin alterar la paz pública. «El diálogo es el mejor método, puede incluso incluir a los Houthis y a Al-Qaeda siempre que depongan las armas y abandonen la violencia y el terrorismo», apuntó.
