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París, 4 jul (PL) La decisión final sobre el futuro de la central nuclear de Fessenheim, la más antigua del parque galo, se mantiene hoy en suspenso.
El Gobierno desestimó las conclusiones emitidas por la Autoridad de Seguridad Nuclear(ASN), la cual anunció esta tarde que bajo determinadas condiciones podrá continuarse durante 10 años más la explotación del reactor número uno de la instalación.
Durante una conferencia de prensa, el presidente de la ASN, André-Claude Lacoste, declaró que la central está apta para continuar su actividad durante una década complementaria a condición de cumplir con ciertas prescripciones técnicas.
Entre ellas citó el reforzamiento antes del 30 de junio de 2013 de la losa de hormigón sobre la cual se construyó el reactor.
No obstante, pese a la decisión de la ASN, la ministra gala de Ecología, Nathalie Kosciusko-Morizet, reconoció como necesario el informe de la Autoridad pero aclaró que el fallo no determina nada.
La titular reiteró que las decisiones serán tomadas a partir de noviembre cuando se conozcan los resultados del control de seguridad ordenado sobre todas las centrales tras la catástrofe japonesa en Fukushima.
Fessenheim, situada en Alto Rin (este) sobre una zona sísmica entró en servicio en 1977.
Los residentes cercanos al lugar sostienen como una de sus principales preocupaciones la capacidad de la instalación de resistir el embate de fenómenos naturales.
La central posee dos reactores nucleares de una potencia de 900 megavatios cada uno.
El 26 de junio pasado miles de personas formaron una cadena humana alrededor del sitio para llamar la atención sobre el peligro potencial al cual se exponen, de continuarse su explotación.
