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Una mañana diferente, pioneros emocionados corrían y jugaban esperando el comienzo de la actividad que marcaría el inicio de una nueva etapa de su vida estudiantil. La escuela primaria Carlos Hernández Fernández, del capitalino municipio Plaza de la Revolución, en La Habana, vestía sus mejores galas para ver crecer a los 33 pioneros de 3er. grado que arriban a la Organización de Pioneros José Martí (OPJM).
Al comenzar el matutino especial, tres niños orgullosos desfilaron de un extremo a otro del patio, con la bandera de la estrella solitaria y luego todos cantaron el Himno de Bayamo.
Risas, lágrimas de felicidad y emoción emanaban de los rostros de padres orgullosos, que colocaban la pañoleta roja y el distintivo de la OPJM a sus pequeños. Los maestros también dejaron ver su satisfacción y repetían una y otra vez la frase: «Mis niños están creciendo».
Ya es fácil percibir el sentir patriótico de los más pequeños. Todos los infantes que hoy realizaron el tradicional cambio de pañoleta juraron ser fiel a la organización, cumplir con sus deberes, estudiar, trabajar y luchar inspirados en los héroes de la Patria, declararon su oposición a la Ley Helms-Burton y al bloqueo económico y financiero contra Cuba.
Actos como este demuestran cuan importantes son los niños dentro de la sociedad cubana, los más pequeños sienten el compromiso de continuar luchando por la Patria que les vio nacer porque como ellos mismos ratificaron hoy: ¡Son felices aquí!
