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El llamado ha sido a defender la Revolución

Es un acto cínico que aquel que aplica la política de bloqueo a todo un pueblo durante más de 60 años, y la recrudece ahora en medio de una situación tan compleja como la pandemia, se quiera presentar como nuestro gran salvador, reflexionó el mandatario cubano en su comparecencia de este lunes

 

Autor:

Yoelvis Lázaro Moreno Fernández

El Presidente cubano, Miguel Díaz-Canel Bermúdez, al comentar sobre los hechos del pasado domingo, puso énfasis en el tema mediático e hizo referencia al calentamiento que se realiza en las redes sociales, como parte del nuevo espacio público digital. «En las últimas semanas se incrementó la campaña en redes sociales contra la Revolución Cubana, y se plantearon un grupo de matrices alrededor de los problemas y carencias que estamos viviendo.

Esa es la manera en que actúan, a través de la inconformidad y la insatisfacción, llevando a las protestas a partir de manipular las emociones y sentimientos de las problemáticas que tiene la población, resaltó.

El Presidente dijo que había escuchado los planteamientos de algunas de las personas que realizaron hechos de protesta o manifestaron insatisfacción, y destacó que «no todos son contrarrevolucionarios». Hay una minoría de contrarrevolucionarios que trató de liderar estas acciones, pero ahí tenemos personas, revolucionarias o no, insatisfechas, con confusiones, incomprensiones, con falta de información y también con deseo de manifestar alguna situación particular, resaltó.

Ahora bien, «¿en torno a qué montaron esas insatisfacciones y hacia qué estaban dirigidos todos esos esfuerzos mediáticos bien pagados en los cuales se centraron estos días? Al problema eléctrico, que es una realidad, al desabastecimiento de alimentos y medicamentos y a los problemas de las tiendas en divisas. Todos esos temas que están presentes en nuestra sociedad como insatisfacción. ¿Y cuál es el origen de ello? El bloqueo”, aseveró el Presidente.

«Por lo tanto —añadió—, todo lo que dicen es un discurso muy hipócrita y de doble rasero, de calumnias y manipulador, es un discurso de mentiras. Ya explicamos cómo el bloqueo afecta al sistema electroenergético nacional. Conocemos cómo nos limita los ingresos en divisas con los cuales tenemos que comprar alimentos.

«Nosotros necesitamos más de 2 000 millones de ingresos en divisas para comprar alimentos que no satisfacen todas las demandas de la población. Pero también tenemos que comprar insumos para la agricultura, maquinarias, piezas de repuesto, fertilizantes y herbicidas», precisó.

Asimismo, continuó, el bloqueo nos ha limitado para adquirir materias primas con las que producimos medicamentos. «El esfuerzo que hace el país en la producción de medicamentos gracias al potencial científico y productivo que tenemos es increíble. Nosotros necesitaríamos gastos entre 1 500 y 1 900 millones de dólares para comprar los medicamentos que cubren el cuadro básico del país. Y eso se logra con una inversión de 300 millones.

«Nosotros somos capaces de producir comprando materias primas la mayor parte de ese cuadro básico. Hay otros que tenemos que comprar. Con 300 millones nosotros logramos el rendimiento para el que tendríamos que gastar de 1 500 a 1 900 millones. Y actualmente no hemos dispuesto ni de los 1 500 millones, ni tan siquiera de los 300. En medio de esto hemos tenido que dedicar una parte de esos pocos ingresos a enfrentar la pandemia y desarrollar las vacunas», subrayó. El mandatario cubano hizo alusión a cómo nuestros científicos han desarrollado las vacunas sin los miles de millones de los que disponen otros países. «Hay teclas e informaciones que no las tiene ningún programa de computación, y que son las del compromiso y la voluntad, las de la reafirmación de ser soberanos, que la tienen nuestros científicos. Y con eso es con lo que se ha logrado producir vacunas.

«Pero para producir vacunas a nosotros también nos faltan insumos y determinados componentes que se están buscando para tener, en el menor tiempo posible, todas las dosis y producciones que necesitamos para nuestra población y para brindar al mundo», dijo.

Díaz-Canel se refirió al tema de las tiendas en divisas y recordó que en varias ocasiones se ha explicado cómo se llegó a esa medida, «que no era deseable».

«Si nos cierran, si nos cercan, si no tenemos dinero, ni tan siquiera para abastecer las tiendas en moneda nacional, teníamos que captar una parte de esa divisa que estaba en el país, y con esa divisa salir a comprar para reaprovisionar esas tiendas y también para ofertar y mejorar los abastecimientos en las tiendas en moneda nacional, que son para toda la población», explicó.

«Hemos captado divisas. Pero, ¿dónde se nos cortó esa posibilidad? Como parte de las medidas restrictivas y el habernos puesto en la lista de países supuestamente patrocinadores del terrorismo. Entonces no hemos podido exportar la divisa que hemos captado y eso nos ha cortado los flujos financieros para cumplir con ese propósito».

El Presidente cubano aseguró que hacia todo lo que hacemos en función de mejorar a la población es hacia donde se han dirigido.

«Quieren cambiar un sistema para imponer qué tipo de Gobierno en Cuba. El de la privatización de los servicios públicos, el que da más posibilidades para una minoría rica y no para una mayoría. El que no tendría en cuenta los intereses y las necesidades de todos, el que no haría esfuerzos adicionales como los que tenemos que hacer».  

«¿No es un discurso muy hipócrita y cínico que tú que me bloqueas, que llevas a cabo la política que viola los derechos humanos de todo un pueblo durante más de 60 años y la recrudezcas en medio de una situación tan compleja como la pandemia, y te quieras presentar como el gran salvador?», se preguntó el mandatario cubano.

«¿A qué le temen? Al ejemplo de Cuba, a lo que pueda hacer Cuba en otras situaciones de más posibilidades económicas. ¿Por qué no pueden ser capaces de convivir civilizadamente en una relación con un país, aunque tengamos diferencias ideológicas, que no constituye ninguna amenaza para Estados Unidos? A nosotros no nos interesa cómo el Gobierno y el pueblo norteamericanos quieran hacer su gobierno. Pero sí exigimos que nos respeten la autodeterminación, la soberanía y la manera en que la mayoría de los cubanos han aceptado defender el socialismo», afirmó.

Con tristeza el Presidente cubano reconoció que hay un sector de nuestra sociedad que delinque, y este domingo se vieron delincuentes. Las protestas no eran pacíficas, pues hubo vandalismo, se rompieron y tiraron piedras a tiendas en divisas, se robaron artículos de las tiendas en divisas, se apedrearon a fuerzas de la policía, se viraron carros. Un comportamiento totalmente vulgar, indecente y delincuente, dijo.

«Ya hoy están las campañas centristas de los que quieren quedar bien con Dios y con el diablo, de los que en un determinado momento nunca quisieron denunciar el bloqueo y por tanta crítica que tuvieron en las redes sociales, ahora sí hablan de bloqueo y de condena al bloqueo, pero dicen que nosotros no buscamos una solución política elevada convocando al pueblo a enfrentar al pueblo.

«Nosotros no llamamos al pueblo a enfrentar al pueblo. Nosotros hicimos un llamado al pueblo a defender su Revolución y sus derechos, y el pueblo apoyó. Nosotros no hemos alentado a nadie desde las posiciones de fuerza o violentas. El pueblo fue a discutir y a argumentar, pero lo enfrentaron con violencia, y el pueblo se defiende y defiende sus derechos».

Díaz-Canel señaló que con todo este montaje quieren separar y fracturar pueblo de Estado, Gobierno y Partido.

«Entonces, el famoso cambio de régimen. ¿A quién le molesta el supuesto régimen cubano? ¿A quién le molesta el sistema político cubano? A la mayoría del pueblo no, porque es esa mayor parte la que construye este sistema y lo ha refrendado en miles de procesos democráticos de debate público, donde han participado también las personas que tienen una opinión diferente a la Revolución.

«¿A quién le molesta? Al Gobierno de Estados Unidos. ¿Por qué no ve las virtudes que tiene este sistema de Gobierno en Cuba, que es capaz de trabajar con y para todos, que tiene políticas públicas con un impacto tremendo en la educación, la salud,  el deporte, la cultura, la seguridad y asistencia social, y en la tranquilidad ciudadana, que todos los embajadores y turistas pueden apreciar? ¿Por qué quieren ir en contra de eso?

«¿Por qué arman todas estas desenfrenadas maniobras que terminan en el aliento al vandalismo, a la delincuencia, y al final hacen cerrar más las filas de este pueblo? Nos unen más, nos ponen más claro cuáles son las verdaderas intenciones, de dónde vienen, y entonces salen estas actitudes de apoyo y defensa legítima de la Revolución.

«¿No es cruel? ¿No es brutal? ¿No es inhumano? ¿No son genocidas todas esas acciones? Han tenido la respuesta que merecían y van a seguir teniéndola, como la han tenido en Venezuela y en otros pueblos que han tratado de agredir. Estamos conscientes de cómo podemos vencer también esa agresión», precisó.

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