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Pinceladas olímpicas de Tokio 2020

Solo seis meses nos separan del inicio de la cita estival de este año. JR comparte curiosidades y detalles que nos acercarán un poco más a su magnífica sede

Autor:

Lianet Escobar Hernández

Cuando la exactitud nos coloca a medio año del inicio de los Juegos Olímpicos de Tokio 2020, cuya inauguración será el 24 de julio venidero, las noticias que llegan desde la sede nipona nos hablan de curiosidades, ideas atrevidas y hasta de simulacros de terremotos.

Del nuevo estadio olímpico al Nippon Budokan

En pleno corazón tokiota se levanta el Estadio Olímpico, un recinto que a 56 años de su primera inauguración, ha sido revivido para albergar a 68 000 espectadores, según la Agencia francesa de noticias (AFP).

La locación, reinaugurada en diciembre pasado, acogerá las ceremonias de apertura y de clausura, además de la mayoría de las pruebas de atletismo y algunos partidos de fútbol.

Una curiosidad: los baños del nuevo estadio cuentan con retretes cuyos botones de las distintas funciones, también estarán en braile, para asegurarse de que sean accesibles para todos, según los organizadores del certamen.

Otra construcción imponente de estos juegos será el Centro Acuático, que se levanta en la bahía de Tokio y donde se efectuarán las pruebas de natación, natación sincronizada y clavados.

Una de sus peculiaridades es que cuenta con un muro modulable para convertir su piscina principal de 50 metros en dos piscinas separadas de 25 metros cada una. La profundidad de las piscinas también es modificable.

Por otro lado, el Sea Forest Waterway es un nuevo centro para las competiciones de remo y canotaje situado en una isla artificial de la bahía de Tokio y se trata nada más y nada menos que de una piscina de una longitud de dos kilómetros, con ocho calles. Su construcción durará hasta mayo y su capacidad ronda los 24 000 asientos.

Sin embargo, para algunas publicaciones extranjeras será el Nippon Budokan, templo de las artes marciales donde competirán judocas y karatecas, una de las sedes más atractivas por su historia.

El centro fue construido para albergar las pruebas de judo de los Juegos de 1964 y además es también un mítico centro de conciertos en Japón, el cual recibió a los Beatles en 1966, durante su primera actuación en el país.

A soñar sobre camas de cartón

En una lengua de tierra rectangular «prestada» por el mar, se alza la Villa Olímpica, instalación que está compuesta por 21 edificios de 14 a 18 pisos, con capacidad para 18 000 camas durante los Juegos Olímpicos y 8 000 para los Paralímpicos.

Pero lo sensacional de este centro se haya dentro de las habitaciones, pues las delegaciones asistentes al evento dormirán sobre lechos de cartón.

Takashi Kitajima, director general de la villa, informó en conferencia de prensa a inicios de enero que se trata de una iniciativa ecológica y que serán camas resistentes que pueden aguantar hasta 200 kilos, lo que equivale a 440 libras.

Se dijo también que las camas individuales se reciclarán después de los Juegos para fabricar productos de papelería y que el material de los colchones —que no estarán hechos de cartón y que además se desmontan en tres módulos distintos y su firmeza puede ajustarse— se convertirá en productos de plástico.

Colores y tradición

El aspecto de las entradas que se usarán para ingresar a las competiciones estará inspirado en colores de trajes tradicionales para ocasiones especiales en Japón.

Según los organizadores, cada ticket de forma rectangular tendrá pictogramas de la disciplina deportiva y de la sede en la que se llevarán a cabo las competiciones y están  inspiradas en una gama de colores básicos usados en la creación de textiles utilizados para la confección de los famosos kimonos japoneses.

Los cuatro colores que se utilizarán son el rojo, el azul, el malva  y el verde.

Prevenir para no lamentar

Japón se encuentra ubicado en las zonas sísmicas más activas del mundo, por lo que los organizadores de Tokio 2020 se preparan desde ya para las peores situaciones, siempre con la esperanza de que ninguna de ellas se haga realidad.

Por tal motivo se han realizado diversos simulacros en varias de las instalaciones y se tienen en cuenta desde el llamado a evitar el pánico, la pronta evacuación de los posibles heridos y los eventuales incendios en la ciudad, hasta los daños a las estructuras de las instalaciones deportivas.

Los tifones son otro de los desastres naturales en los que se ha pensado, y con calma, luego de que en octubre pasado el potente tifón Hagibis azotara el país provocando un centenar de muertos y la cancelación inédita de tres partidos del mundial de rugby que se estaba disputando en Japón. 

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