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La medida beneficia a miembros de las FARC-EP que hayan culminado el proceso de dejación de armas. Autor: El Espectador Publicado: 21/09/2017 | 07:00 pm
BOGOTÁ, julio 10.— Otros 3 252 miembros de las FARC-EP recibieron el beneficio de la amnistía, en virtud de un decreto firmado este lunes por el presidente Juan Manuel Santos para seguir dando cumplimiento a los acuerdos de paz.
Con esa cifra ascienden a un total de 7 400 los excombatientes que disfrutan de la medida, reportó el diario El Tiempo. El de este lunes fue el tercer decreto emitido por el mandatario para la aplicación de la ley de amnistía a los exguerrilleros.
El paso cumple la letra de los Acuerdos de Paz firmados en La Habana en noviembre pasado entre el ejecutivo y las FARC-EP. A tenor con lo suscrito, la amnistía se otorga a los miembros de la guerrilla que hayan culminado el proceso individual de dejación de armas —certificado oficialmente por la ONU el pasado 27 de junio— y que estén señalados exclusivamente de delitos políticos y conexos, enfatizó el diario, que citó a la Presidencia al explicar que se considera como tales —entre otras causas consideradas como faltas— el porte ilegal de armas y de uniformes militares, sedición y asonada.
Los que sean considerados delitos de lesa humanidad deberán dirimirse en la Procuraduría Especial de Paz, que ya ha sido legislada, pero para la que faltan definir detalles de su funcionamiento. Esa es una entidad considerada esencial para proseguir con la implementación de lo pactado, que tiene ahora su foco más importante en la reinserción de los exguerrilleros a la vida civil.
Además de las amnistías firmadas por el Presidente, los jueces de la República pueden otorgar, dependiendo del caso, dicho beneficio a miembros de la organización que se encuentren en las cárceles. De acuerdo con fuentes del Gobierno, dijo el reporte, mediante esa última vía (a través de los jueces) han salido de las cárceles 1 400 miembros de las FARC-EP.
Esa cifra, sin embargo, se queda corta atendiendo a lo acordado. Hasta los primeros días de este mes solo más de 800 insurgentes presos se habían beneficiado con la medida, cuando ya debían haberse liberado unos 3 000. Ello motivó una huelga de hambre que respaldaron cerca de 1 500 de esos prisioneros, para pedir la aceleración del proceso.
También este lunes el Consejo de Seguridad de la ONU aprobó por unanimidad una nueva misión en Colombia para seguir contribuyendo a la implementación del proceso, como estaba pactado en el acta de paz de noviembre.
Según dijo AFP, esta misión de la ONU tendrá un período inicial de 12 meses y comenzará el 26 de septiembre, cuando finaliza la primera.
Funcionarios de Naciones Unidas, junto a representantes del Gobierno y las FARC-EP, conformaron la misión de verificación y seguimiento que atendió a la parte inicial del proceso de desmovilización.
