24
WASHINGTON, septiembre 26.— Tras aguacero de críticas por el pésimo manejo de esta crisis, el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, anunció una próxima visita a la asolada isla de Puerto Rico, según publicó AFP.
«Iré a Puerto Rico el martes» próximo, dijo Trump a periodistas en la Casa Blanca, señalando que fijó la fecha del 3 de octubre para no interferir en los esfuerzos de recuperación.
«Esa gente es muy importante para todos nosotros», dijo antes de agregar que «hemos mandado enormes cantidades de alimentos y agua». La sinceridad de la primera oración es cuestionada.
Llueven acusaciones de que su gobierno no asistió a Puerto Rico con la misma urgencia que lo hizo con Florida y Texas, dos estados fuertemente golpeados por huracanes en las últimas semanas.
Puerto Rico, un Estado Libre Asociado a Estados Unidos desde 1952, recibió el impacto de dos potentes huracanes, Irma y María, que dejaron a la mayor parte de sus 3,4 millones de habitantes sin agua corriente, electricidad y comunicaciones, un cuadro que hacen más dramática la escasez de comida y combustible. Tanto residentes como autoridades han hecho desesperados pedidos de ayuda a Washington.
«Hay personas que no tienen ni comida ni agua desde hace 14 días», dijo el martes Carmen Yulin Cruz, alcaldesa de San Juan, a CBS News.
Trump fue especialmente cuestionado por tuitear el fin de semana sobre la alegada «falta de respeto» a la bandera nacional de jugadores del football americano, sin mencionar el drama de Puerto Rico. El salsero boricua Marc Anthony le pidió en un tuit, con palabra fuerte incluida, que deje de hablar de la Liga Nacional de Football Americano y «haga algo» en el «necesitado Puerto Rico».
Apelando a una «acción rápida» de la administración Trump y del Congreso, el gobernador de Puerto Rico, Ricardo Rosselló, recordó que la isla «es parte de Estados Unidos» y recalcó la necesidad de «apoyo total» del Gobierno.
