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La representación juvenil cubana que está en Perú descuella por su alegría y sus sentimientos solidarios. Autor: Yuniel Labacena Romero Publicado: 09/04/2018 | 09:20 pm
LIMA, Perú.— Un llamado a seguir procurando alianzas entre las nuevas generaciones de latinoamericanos que apuestan por la genuina unidad de todos los países del continente, y un homenaje a Fidel, eterno impulsor de la solidaridad entre los pueblos y de las juventudes progresistas del mundo, devino el singular encuentro sostenido por jóvenes cubanos que asisten a los foros paralelos de la 8va. Cumbre de las Américas —que tendrán lugar a partir de hoy en esta capital— con estudiantes de la Universidad Nacional Mayor de San Marcos.
En el intercambio, que se desarrolló en la Facultad de Ciencias Sociales, de la referida casa de altos estudios, Ronal Hidalgo Rivera, al frente de la delegación juvenil antillana, resaltó el papel protagónico que tienen los jóvenes cubanos en diferentes sectores de la vida económica y social del país, y agradeció por este espacio de reflexión, que ayuda a seguir pensando una América más unida desde sus hijos más jóvenes.
Hidalgo Rivera significó el aporte y lugar que han tenido los jóvenes a lo largo de todo el proceso revolucionario cubano, y cómo la participación real de los más nuevos ha sido un camino para la transformación social y la apertura de oportunidades y posibilidades para todos.
Bernardo Dolmos Arzubialde, primer secretario de la Juventud Comunista del Perú Patria Roja, mostró satisfacción por la oportunidad de esta cita para seguir consolidando los vínculos entre los pueblos cubano y peruano y demostrar que la integración es un camino posible.
Varios estudiantes del país andino intervinieron y hablaron de las luchas universitarias que tienen lugar aquí hoy, de cómo la policía entró a la Universidad y desalojó a los estudiantes tratando de buscar el control de la casa de estudios, como hechos que son completamente ajenos a la realidad de la educación superior cubana.
Como colofón del encuentro y demostración de que el arte también une a los pueblos, repentistas cubanos y músicos peruanos se unieron en una gran cruzada cultural.
