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Foot cover de Noticia Autor: Juventud Rebelde Publicado: 05/06/2018 | 10:01 am
El Senado francés condecoró al cubano Virgilio Ponce por su contribución a las relaciones entre los dos países, lo cual constituye principalmente «un reconocimiento a Cuba», declaró el laureado, según informa PL.
«Para mí este es un reconocimiento a Cuba, más que a mí, porque yo lo único que he hecho es divulgar la realidad cubana, he ayudado a que se conozca la verdad de mi país», sostuvo en entrevista con Prensa Latina.
El presidente del Senado galo, Gerard Larcher, hizo entrega oficial a Ponce de la condecoración, en ceremonia realizada como parte de la Semana de América Latina y el Caribe en Francia.
De este modo se reconoció su aporte al desarrollo de los nexos bilaterales, su trabajo de promoción de la imagen de Cuba en Francia y otros países europeos, y su rol aglutinador dentro de la comunidad cubana residente en el denominado viejo continente.
La labor de Ponce comenzó poco después de llegar a Francia a finales de la década de 1980, cuando «vi que la información que se divulgaba de Cuba no era real, y eso me molesto mucho».
En ese momento comenzó las acciones dirigidas a comunicar por todas las vías posibles, uniendo esfuerzos con otros cubanos residentes en Francia y en Europa, lo que incluye numerosas conferencias ofrecidas en diversas entidades e instituciones.
«Nosotros no decimos que somos perfectos, pero nuestro sistema es el más humano que existe en el mundo y es el que más le ha dado al pueblo», explicó.
Con el desarrollo de Internet y las redes sociales se ha ampliado esa labor para llegar a un público cada vez más numeroso, a través de plataformas como el grupo Martianos, creado por Ponce en Facebook.
El presidente del Senado galo, Gerard Larcher, hizo entrega oficial a Ponce de la condecoración, en ceremonia realizada como parte de la Semana de América Latina y el Caribe en Francia.
De este modo se reconoció su aporte al desarrollo de los nexos bilaterales, su trabajo de promoción de la imagen de Cuba en Francia y otros países europeos, y su rol aglutinador dentro de la comunidad cubana residente en el denominado viejo continente.
La labor de Ponce comenzó poco después de llegar a Francia a finales de la década de 1980, cuando «vi que la información que se divulgaba de Cuba no era real, y eso me molesto mucho».
En ese momento comenzó las acciones dirigidas a comunicar por todas las vías posibles, uniendo esfuerzos con otros cubanos residentes en Francia y en Europa, lo que incluye numerosas conferencias ofrecidas en diversas entidades e instituciones.
«Nosotros no decimos que somos perfectos, pero nuestro sistema es el más humano que existe en el mundo y es el que más le ha dado al pueblo», explicó.
Con el desarrollo de Internet y las redes sociales se ha ampliado esa labor para llegar a un público cada vez más numeroso, a través de plataformas como el grupo Martianos, creado por Ponce en Facebook.
