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Cobertura especial: La Habana, capital de la solidaridad y el antiimperialismo (+ Fotos)

Con la participación de más de mil delegados extranjeros y alrededor de 200 delegados nacionales, inició el Encuentro Internacional de Solidaridad con Cuba y el Antiimperialismo

Autores:

Ana María Domínguez Cruz
Marianela Martín González

En presencia del primer secretario del Comité Central del Partido Comunista de Cuba y Presidente de la República, Miguel Díaz-Canel Bermúdez, inició el Encuentro Internacional de Solidaridad con Cuba y el Antiimperialismo, con la participación de más de mil delegados extranjeros y alrededor de 200 delegados nacionales.

Ulises Guilarte de Nacimiento, miembro del Buro Político y secretario general de la Central de Trabajadores de Cuba (CTC), expresó un saludo fraterno y militante a los asistentes, y les agradeció su presencia en este foro de debate para alcanzar un mundo mejor, basado en la integración entre los pueblos y el internacionalismo.

«La causa principal de nuestros problemas es el resultado de resistir un despiadado bloqueo económico, comercial y financiero, recrudecido sin límites en los últimos años, ignorando el reclamo unánime de su condena por las Naciones Unidas.

«Persiguen nuestras fuentes de ingreso de divisas, obstruyen canales de suministro de insumos para generar escasez, sembrar desaliento y deteriorar nivel de consumo y bienestar del pueblo, sin que exista un solo argumento de carácter ético o moral para sostener esa política hostil que no sea la voluntad de Cuba de defender su legítimo derecho de existir como nación soberana e independiente».

Guilarte de Nacimiento aseveró que el reconocimiento mayor será para la heroicidad de nuestro pueblo, que protagoniza con firmeza el desarrollo de nuestro modelo económico y social. 

«Somos conscientes de las pretensiones del imperio de socavar nuestra identidad nacional al intentar fracturar nuestras raíces desde la colonización cultural, pero contamos con la solidaridad y el compromiso militante de todos los que nos acompañan desde la admiración, el respeto y el cariño».

Están presentes además Esteban Lazo, presidente de la Asamblea Nacional del Poder Popular y Manuel Marrero Cruz, Primer Ministro de la República de Cuba, así como otros miembros del Buro Político, dirigentes de organizaciones de masas, políticas y sociales y del Instituto Cubano de Amistad con los Pueblos (ICAP).

Cuba patrocina la paz y el entendimiento entre los pueblos

«Cuba patrocina la paz, el entendimiento entre los pueblos y el respeto a los derechos internacionales. Cuba, con los hermanos latinoamericanos, defiende esta región como zona de paz. Cuba practica la solidaridad y el gobierno de Estados Unidos no nos perdona que seamos un pueblo digno, revolucionario y valiente, y que hayamos hecho esta Revolución en sus propias narices».

Así expresó Anayansi Rodríguez Camejo, viceministra del Ministerio de Relaciones Exteriores de Cuba, durante su intervención en la inauguración del Encuentro Internacional de Solidaridad con Cuba y el Antiimperialismo, que sesiona hoy en el capitalino Palacio de las Convenciones.

«La solidaridad con Cuba crece y no podemos defraudar las esperanzas. Continuaremos en nuestra batalla por un nuevo orden internacional, basado en la justicia social. No renunciaremos a la defensa de las causas justas del mundo, sin injerencias ni intervenciones extranjeras».

Rodríguez Camejo reafirmó que el bloqueo impuesto por el gobierno estadounidense es el principal obstáculo a nuestro desarrollo y las pérdidas en todos los sectores de la producción, los servicios y la vida del país lo demuestran en la cotidianidad.

«Nuestros trabajadores de la salud y de la ciencia padecen las consecuencias, y por consiguiente la población. El bloqueo les niega el acceso a equipamiento, reactivos e insumos de todo tipo, utilizados en la atención médica y la investigación, lo cual impide desplegar capacidades y conocimientos a plenitud en función de la salud de todos los pueblos del mundo, incluyendo el estadounidense, porque no podemos exportar nuestros medicamentos a ese país».

Agregó que estas acciones se profundizaron en el peor momento de la pandemia e impidieron que adquiriéramos insumos o productos vitales para la atención a los pacientes.

«El bloqueo califica como un acto de genocidio porque se intentó matar a un pueblo entero, pero nuestros médicos y científicos se crecieron ante la adversidad y desarrollaron cinco candidatos vacunales. Ellos y nuestro personal de salud son héroes. Salvaron el país.

«Podían desarrollarse más los sectores agrícolas y alimentarios. Hoy se les niega el acceso al mercado estadounidense, enfrentan la falta de combustible, fertilizantes y neumáticos. Ello repercute en los niveles de producción y la calidad de la alimentación que nuestro pueblo recibe».

La vicetitular de Relaciones Exteriores subrayó que los sectores de la educación, la cultura y el deporte también se han afectado. Condenó que, además, se prive a niños y niñas en situación de discapacidad de acceso a aditamentos para su desarrollo y calidad de vida.

«A nuestros intelectuales y artistas cubanos se les restringen sus vínculos con sus colegas estadounidenses, se agreden los lazos culturales entre ambas naciones y nuestros deportistas no pueden cobrar premios ganados en certámenes de talla mundial. A ellos se les niega el otorgamiento de visas para participar en eventos en Estados Unidos o se les imponen restricciones absurdas, y ante ello, nuestro Team Asere demostró que es posible una relación civilizada».

Rodríguez Camejo afirmó que las transacciones financieras de Cuba son objeto de una feroz persecución, aplicada por varias agencias estadounidenses que monitorean constantemente y llegan a todos los rincones del mundo para castigar a quienes negocien con nuestro país.

«Son muchas las restricciones para el uso del dólar, la negativa de bancos extranjeros a prestarnos servicios, la imposición de multas millonarias a entidades estadounidenses y de terceros países por violar el bloqueo. Nos salva la solidaridad de numerosas naciones, pero nuestro pueblo es víctima de esa cruel política».

«La inclusión de Cuba en lista de estados patrocinadores del terrorismo tuvo como efecto inmediato la suspensión de operaciones por parte de muchos bancos, lo que conllevó a la paralización de transferencias dedicadas a la compra de alimentos y medicamentos

«Cuba no patrocina el terrorismo. Cuba ha sido víctima de acciones terroristas, organizadas y observadas con complicidad por el gobierno de Estados Unidos, que permitió que terroristas connotados vivieran tranquilamente sin responder ante la injusticia cometida».

La funcionaria hizo referencia a las acciones desplegadas en el terreno de la desinformación, financiadas con fondos federales y utilizando las herramientas de las nuevas tecnologías para, en el campo digital, fabricar artificialmente una oposición política, generar inestabilidad, alentar la emigración irregular y afectar la tranquilidad ciudadana.

«Ello constata que se emplean métodos de guerra no convencional y que la política de sucesivos gobiernos no ha variado en los últimos 63 años.

«Resistir es la palabra de orden, y debemos hacerlo con creatividad. Debemos trabajar duro, con inteligencia, avanzar y continuar luchando por la liberación del bloqueo, batalla en la que esperamos contar con los que profesan solidaridad hacia nosotros.

«Continuaremos utilizando espacios para denunciar acciones de guerra económica, política y mediática que se nos aplican. Cuba no se rinde ni se doblega. Avanzamos con firmeza en la actualización del modelo económico y social, con la participación activa y consciente de los trabajadores y con la solidaridad de pueblos hermanos».

Rodríguez Camejo ratificó el apoyo de Cuba a los pueblos palestino, saharaui y sirio y, además, reafirmó nuestra posición de defender procesos emancipadores, de resistencia y lucha de Venezuela, Nicaragua y Bolivia. Agregó, además, que es un honor continuar siendo la sede de la mesa de diálogo por la paz en Colombia.

«A 200 años de la Doctrina Monroe, seguiremos exigiendo una transformación de relaciones en el hemisferio, basada en la integración regional. Seguiremos luchando por la paz y el derecho a existir de manera soberana».

En la jornada, los asistentes asistirán al trabajo en Comisiones para debatir sobre la unidad antiimperialista, los derechos de los jóvenes trabajadores, el movimiento femenino por la paz y la solidaridad entre los pueblos, los desafíos de la clase obrera en el mundo contemporáneo y las luchas de los movimientos de solidaridad, sociales y populares por las causas justas.

El enemigo es el mismo: el imperialismo

Yosmine William jamás había salido de Estados Unidos y la primera vez que lo hace es para conocer al pueblo cubano y dejar claro que los jóvenes como ella, que allí defienden el derecho a la salud, la educación y en todos los ámbitos abogan por la inclusión de las minorías, también están contra el bloqueo del gobierno de su país contra la Isla.

Esta diseñadora de 31 años es parte de la delegación del país norteño al Encuentro Internacional de Solidaridad con Cuba y el Antimperialismo, compuesta por 160 jóvenes perteneciente a diferentes movimientos sociales, la cual sesiona en el capitalino Palacio de Convecciones, en el que participan más de 1 300 sindicalistas y activistas sociales de todo el mundo.

Yosmine, al igual que Karla Reyes, quien ejerce el magisterio en escuelas públicas de Nueva York, patentizó su respeto a la resistencia del pueblo cubano y a la capacidad creativa constatada en los lugares visitados en su estancia al país caribeño.

En el evento celebrado en el capitalino Palacio de Convenciones ambas jóvenes dejaron mensajes de amor para esta Isla admirada en todo el mundo por quienes como ellas luchan por un planeta justo.

Karla, quien nació en Estados Unidos, pero sus padres son salvadoreños, llegados al país norteño huyéndole a la guerra civil atizada en su país por el imperialismo, entre 1979 y 1992, explica que son parte de la Asamblea Internacional de los Pueblos y defienden el derecho a la soberanía de todos los países, con énfasis en los que son atacados por el imperialismo estadounidense.

«Estamos aquí para decirle al mundo que el mismo imperio que bloquea a Cuba es el que se opone a los movimientos sociales en Estados Unidos.      Por eso el futuro está en la unidad y perfeccionar el socialismo».

Yosmine, quien reside Atlanta, capital del estado de Georgia, milita en el Partido Socialismo y Liberación, el cual tiene miembros en todo Estados Unidos. Sus luchas más intensas son por defender los derechos de las mujeres, los servicios básicos de la población y el ecosistema. En su recorrido a centros de producción en Cuba quedó impresionada con el modo en que mujeres como ellas dan soluciones a problemas que ocasiona el bloqueo.

«Vimos mujeres del Contingente Blas Roca Calderío trabajando en la instalación de un sistema hidráulico, sin apenas tener recursos debido al bloqueo del gobierno de mi país. Estaban innovando para que lo que estaban montando se hiciera con calidad. Si no fuera porque hay gente como esa, el país estuviera mucho peor, pero por donde quiera que pasamos vimos cubanos que no se rinden, y eso nos da fuerza para seguir en nuestra lucha», acota.

Yosmine denuncia que en Georgia el aborto está prohibido para quienes hayan rebasado las seis semanas, lo que obliga a muchas mujeres a viajar a otros estados donde no hay restricciones, pero corren el riesgo de ser procesadas aun cuando las razones para abortar estén justificadas.

Ambas muchachas creen que en los jóvenes está toda la responsabilidad de salvar al mundo de la voracidad del imperialismo, y dicen que hay que ir a la búsqueda de los puntos que unen y tratar con respeto las diferencias. «Un mundo mejor puede ser diverso y con justicia social», sostiene Karla. Al tiempo en que la diseñadora de Atlanta conmina a batallar defendiendo el amor y la igualdad entre los seres humanos.

Cuba no se rendirá nunca

«La juventud cubana es revolucionaria y sabemos que con ella contamos para avanzar. Debemos ofrecerle la oportunidad de tener un proyecto de vida en este país sin paternalismo, brindándole la posibilidad de que participen en las situaciones y proyectos más diversos y que asuman su rol, tan importante, en la lucha contra la hegemonía imperialista que Estados Unidos despliega en el mundo. Cuba no se rendirá nunca, y contamos con los jóvenes para seguir adelante».

Así ratificó el primer secretario del Comité Central del Partido Comunista de Cuba y Presidente de la República, Miguel Díaz-Canel Bermúdez, en su intervención durante el debate generado en la Comisión La unidad VS Doctrina Monroe, como parte del programa del Encuentro Internacional de Solidaridad con Cuba y el Antiimperialismo.

«Los tres pilares básicos del desarrollo al que nos dirigimos tiene a los jóvenes como protagonistas: la ciencia e innovación, la transformación digital de la sociedad y la comunicación institucional y social, y será con nuestros esfuerzos y el apoyo de la solidaridad que nos ofrecen otros pueblos, que lograremos lo que pretendemos».

Díaz-Canel Bermúdez recordó que hoy existe una lógica imperialista de hegemonía y de dominación, que lleva al mundo a las guerras, las sanciones, las injerencias y la construcción de muros. No es el mundo que queremos, queremos un mundo mejor, sin imperialismo, afirmó.

«En esa lógica de dominación hegemónica es clave la colonización cultural que lidera Estados Unidos contra nuestros pueblos para quebrar las raíces, las esencias, la cultura en su más amplia expresión. Aspiran a destruir nuestros valores, tradiciones y aportes a la historia. Para poder dominar el mundo, pretenden que se acepten sus paradigmas y que los pueblos renuncien a su identidad.

«Por eso hay que defender la historia y la cultura de nuestros pueblos porque de lo contrario, se asumiría sin pensamiento crítico lo que ellos imponen», exhortó.  

Hizo referencia a lo sucedido hace 200 años cuando se instauró la Política de la fruta madura, vaticinando nuestra caída y dependencia hacia Estados Unidos, y posteriormente la Doctrina Monroe, expresión ideológica de esa cultura de hegemonía.

«Persiste esa prepotencia, dudando de nuestra capacidad para vivir de manera soberana. Evidencia una actitud de desprecio hacia nuestros valores y con esa sentencia de "América para los americanos", demostraron que no abogaban por eliminar desigualdades, sino que querían el continente para ellos, para su dominio. Ven a América Latina como el traspatio de su sociedad, y quieren apoderarse de nuestras riquezas naturales y explotar a las clases obreras, en función de sus intereses».

La política de asfixia económica que desplegó el gobierno estadounidense desde la década del 60 evidencia la esencia genocida de sus pretensiones, agregó.

«Ante la lógica imperialista buscamos la unidad antiimperialista. Ahora más que nunca, pues acuden a elementos de la guerra no convencional para destruir a los pueblos».

Enfatizó el Presidente cubano en la maldad que entraña el recrudecimiento del bloqueo impuesto a Cuba en plena pandemia, con el objetivo de ahogar nuestra economía.

Recordó que el Periodo Especial fue un momento difícil que vivió nuestro pueblo «y estamos aquí, firmes y con dignidad. No es la primera vez que enfrentamos una difícil situación, y no será la primera vez que nos rindamos. Tenemos retos grandes pero la alternativa nunca será rendirnos. No esperen de Cuba que se rinda».

Insistió Díaz-Canel Bermúdez en que estamos en el escenario de una fuerte batalla ideológica porque defendemos unidad y continuidad en nuestros principios, en medio de una guerra mediática intensa y un programa de colonización cultural y de subversión política e ideológica financiado por millones de dólares de los fondos del gobierno norteamericano.

«Como siempre digo: Seguiremos poniéndole el pecho a las balas. Nos han tirado a matar y aquí estamos. No nos vamos a morir, y no lo digo por retórica sino por convicción. El pueblo cubano da lecciones cotidianas de creatividad, resistencia y heroísmo en medio de este difícil escenario.

«Algunos se marchan, se cansan o pierden la confianza, pero somos más los que luchamos, los que compartimos nuestras ideas, los que nos unimos para avanzar. Nuestros jóvenes lo demostraron durante la pandemia. Combatían la infamia en las redes sociales, estuvieron en la zona roja, diseñaron y produjeron ventiladores pulmonares, participaron en la creación de las vacunas, y continúan dando ejemplos de heroísmo».

Aseveró que trabajamos en la perfección de nuestra democracia socialista, y recordó los tres procesos democráticos desarrollados recientemente: la aprobación del Código de las familias, la elección de los delegados a las asambleas municipales y de los diputados.

«No tuvimos las estadísticas históricas pero son superiores a las que muchos esperaron. La difícil situación económica no impidió que esos procesos se realizaran y el pueblo demostró que apoya a la Revolución.

«Esta Revolución no fue importada, fue la solución para derribar el capitalismo dependiente que tenía esta nación. No nos corresponde el capitalismo de Primer mundo y eso hay que recordarlo, por eso debemos ser capaces de producir en medio de esta situación de cerco y bloqueo recrudecido que nos imponen y ofrecer más ofertas desde la gestión local hasta la nacional. Debemos garantizar nuestro futuro, unidos».

Fueron emotivas cada una de las intervenciones de los participantes, en las que se ratificó el apoyo a Cuba y se mostró admiración y respeto por los logros obtenidos. Tal fue el caso de Miya, representante de The People's Forum in New York; Singh Haridwar vicepresidente nacional de AITUC (Central Sindical Indio; David Denis, de Barbados y Salama Alachir, Secretario General de Trabajadores Saharauis.

  Fotos: Ariadne Prado.

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