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Greta Romero. Autor: Redacción Cultural Publicado: 10/04/2024 | 08:22 pm
La actuación es un viaje de autodescubrimiento, una travesía que lleva al actor al desdoblamiento mientras explora los límites de su propia expresión. Para Greta Romero, este viaje comenzó en su infancia, cuando una oportunidad en La Colmenita le abrió las puertas al mundo del arte escénico.
«Yo era una niña bastante tímida y La Colmenita me permitió desdoblarme al máximo y saber que podía hacerlo». En esta reconocida compañía infantil recibió una formación integral, que abarcaba desde el canto y el baile hasta la proyección de la voz en el escenario. Eso sentó las bases para su carrera posterior.
Tras esta reveladora experiencia, Greta fue seleccionada en un casting para un programa infantil en Habana Radio, de la Oficina del Historiador de la Ciudad, donde ha trabajado incansablemente durante 24 años. «Los programas dramatizados infantiles y juveniles en los que allí trabajo me han entrenado en el cambio de voces y en especialidades tan complicadas como la narración», comenta la actriz.
Pero el camino de Greta no se limitó a las ondas sonoras; su pasión por las tablas la llevó a formar parte del Grupo de Teatro Olga Alonso, una experiencia que describe como verdadera academia. «El Olga Alonso ha sido una escuela para muchos actores de nuestro país, para mí también lo fue», afirma.
Bajo la dirección del maestro Humberto Rodríguez, Greta tuvo la oportunidad de llevar a escena clásicos del teatro cubano, como La casa vieja, Contigo pan y cebolla, y Andoba. Esta etapa le permitió,
además de perfeccionar sus habilidades actorales, profundizar también en la riqueza del teatro como forma de arte.
Actualmente, la actriz nos regala a Susana en la telenovela Viceversa. Su personaje, una joven que lucha por ser feliz y tener una relación de pareja plena, se ve opacada por las sombras del pasado, al ser víctima de una violación. Con su actuación conmovedora y visceral, Greta no solo da vida a un personaje complejo y multifacético, sino que también arroja luz sobre temas delicados y relevantes en la sociedad contemporánea.
«Viceversa es mi primer drama seriado de larga duración en la televisión. Lo más desafiante para mí fue interiorizar los conflictos que enfrenta el personaje de Susana, los cuales me resultaban totalmente ajenos. Por lo tanto, no pude recurrir a ninguna experiencia personal para abordarlos.
«Escuché testimonios de mujeres víctimas de abuso sexual, conversé con sicólogos y realicé investigaciones en internet. Además, recibí la ayuda de Eduardo Eimil, director de actores de la novela, durante la etapa de ensayos y en el rodaje, así como las pautas siempre oportunas de Loisys Inclán, la directora general».
—¿Qué te atrajo de Susana como personaje?
—Fue un desafío asumir el papel debido a las escenas intensas que el personaje requería, lo cual me atrajo. También lo abordé con profundo respeto, ya que la historia de Susana puede impactar en muchas mujeres que hayan sido víctimas de abuso sexual y estén enfrentando situaciones similares a las que ella vive a lo largo de la novela, a menudo en silencio. Visibilizar esta realidad implica una gran responsabilidad».
—Susana es un personaje roto por la vida, pero con una cualidad redentora: la dulzura. ¿Cómo encontraste el equilibrio para retratar esa dualidad?
«Efectivamente, Susana es un personaje que experimenta mucho sufrimiento, pero tampoco queríamos retratarlo como una persona arisca o amargada. Por el contrario, es una joven que también muestra alegría, ternura, coquetería... y se enamora. Considero que ese equilibrio se logró perfectamente».
—Hablemos de su relación con Gerardo. ¿Crees que desafía o rompe con algunos estereotipos presentes en las telenovelas y la sociedad en general?
—Me alegra mucho haber sido emparejada con Rolando Rodríguez en la ficción, interpretando el personaje de Gerardo. En primer lugar, porque es un excelente actor y se ha convertido en un amigo personal. Además, nuestra pareja en pantalla desafía los estereotipos sociales.
«Rolando y yo no nos conocíamos antes de comenzar a filmar la novela, pero desde nuestros primeros encuentros en los ensayos nos propusimos lograr la mayor química posible entre los personajes, rompiendo así con las ideas preconcebidas de parejas idílicas que muchos tienen en mente. Como se puede ver en la pantalla, somos dos jóvenes que se aman y se apoyan mutuamente».
—¿Cuál fue tu momento favorito o más memorable durante el rodaje de Viceversa?
—Intenté disfrutar al máximo cada escena en la que participé. Quizá el momento más emotivo fue el aplauso final que todo el equipo nos dedicaba a cada actor al terminar nuestra última escena de rodaje. En mi caso, fue una escena muy emotiva, grabada de madrugada. Luego, recibir ese aplauso de las personas que me acompañaron durante meses de filmación fue algo realmente conmovedor».
—Para quienes siguen Viceversa, ¿puedes adelantar algo sobre el desarrollo futuro de Susana?
—El conflicto principal de mi personaje ya está establecido: es una joven víctima de abuso sexual. Esto deja en ella numerosas secuelas que se irán revelando a lo largo de la trama, así como otros conflictos externos que surgirán.
La actriz detrás del personaje
—Eres graduada de Historia del Arte. ¿De qué manera esta formación influye en tu desempeño como actriz?
—La carrera de Historia del Arte proporciona herramientas para comprender y valorar el arte. Además, fomenta la apertura mental y la creatividad, así como habilidades en escritura e investigación, esenciales para cualquier profesional. En mi experiencia, ha sido como un colchón que sustenta todas mis actividades rutinarias, incluso más allá de la actuación.
—Desde 2014 participas en radionovelas, policiacos y espacios de orientación social en Radio Arte...
—Trabajar en la productora Radio Arte es un desafío constante. El ritmo de producción allí difiere del de la televisión o el teatro. A diario se graban varios programas; por ejemplo, puedes finalizar un capítulo de una novela cubana y, de inmediato, dirigirte a otro estudio para comenzar con un policiaco. Es decir, en cuestión de minutos, debes cambiar de personaje y adaptarte a otro contexto.
«El tiempo para desarrollar los personajes también es limitado, ya que generalmente terminamos una novela y la siguiente semana comenzamos otra. Por lo tanto, la agilidad, la creatividad y la audacia son elementos clave en este entorno».
—Además de la actuación, has incursionado en la conducción de programas. ¿Cómo equilibras ambas facetas en tu carrera?
—Tengo un gran respeto por la conducción, una especialidad compleja que requiere práctica constante. Por eso me esfuerzo por mantenerla al mismo nivel que mi trabajo como actriz.
«Desde 2015 soy la conductora del programa Estar Contigo, en la emisora Radio Taíno, el cual se transmite todas las noches de lunes a sábado. Además, en televisión, soy la presentadora de Banda Ancha, un programa de Cubavisión que aborda las últimas tecnologías y su impacto en la sociedad».
Con una personalidad pausada y tranquila, Greta Romero se reconoce a sí misma como perfeccionista y amante del arte en todas sus formas. Para ella, la vida es un constante intercambio, ya sea compartiendo con amigos cercanos o conectando con aquellos que están lejos, a través del mundo digital.
Cuando el telón baja y los focos se apagan, Greta encuentra refugio en el yoga, donde halla la serenidad para equilibrar su espíritu creativo. Además, su pasión por la sicología la lleva a interactuar con podcast que exploran las profundidades del alma humana, nutriendo así su mente inquieta.
En cuanto a sus proyectos actuales, la joven actriz se sumerge en un mar de historias, tanto en la radio como en la televisión. No se conforma con lo convencional, sino que busca nuevos horizontes creativos. Aspira a seguir trabajando en las novelas de Radio Arte, pero no se detiene ahí; junto a un grupo de amigas ha dado vida a un podcast titulado ¡Uy! El arte…, donde exploran la historia del arte desde una perspectiva fresca y accesible, disponible gratuitamente para todos los amantes del conocimiento en internet.
En palabras de la propia actriz: «El arte es el hilo que teje las historias de la vida, y yo soy solo una tejedora que busca entrelazar el alma de mi público con el universo de emociones que habitan en cada personaje que interpreto».
(Fragmentos de la entrevista publicada en la revista Alma Mater)
