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El boxeo, con siete clasificados, tendrá otra vez una elevada cuota de responsabilidad en las aspiraciones de Cuba. Autor: Roberto Morejón/JIT Publicado: 07/07/2021 | 08:36 pm
Serán menos de los habituales y competirán en condiciones atípicas. Han sufrido las consecuencias de la pandemia, sus entrenamientos han debido adecuarse a la nueva realidad y aun así irán a Tokio con el mismo nivel de convencimiento de cada ocasión. Su porcentaje de eficacia, si se quiere cumplir el pronóstico marcado, tendrá que rozar la perfección. Sin embargo, incluso a sabiendas de cada obstáculo, existen 69 razones para confiar.
Esa será, precisamente, la cifra de asistentes por Cuba a la magna cita multideportiva japonesa, donde el objetivo será ubicarse nuevamente entre los 20 mejores del medallero: una meta posible, pero extremadamente compleja. Para ello contará con el talento y el empuje de 36 hombres y 33 mujeres, 37 de los cuales han tenido al menos una participación en certámenes olímpicos.
Bajo los cinco aros, habrá incursión cubana en 15 deportes, divididos de la siguiente manera: atletismo (18), lucha (12), boxeo (7), judo (6), canotaje (5), tiro (5), levantamiento de pesas (4), tenis de mesa (2), voleibol de playa (2), natación (2), pentatlón moderno (2), taekwondo (1), gimnasia artística (1), ciclismo (1) y remo (1).
La noticia ha sido oficial tras los últimos anuncios de las federaciones con algún interés por parte de atletas antillanos, como es el caso de la Federación Internacional de Pesas, que finalmente no anunció ningún cubano entre sus últimos participantes para Tokio 2020+1.
Las principales esperanzas de la delegación están signadas, por supuesto, en el tradicional buque insignia, el boxeo, que esta vez intentará llevarse al menos par de diademas para contribuir, junto a la lucha —tanto la libre de uno y otro sexo, como la greco— y el atletismo, el de mayor número de competidores para la urbe japonesa, al propósito de llegar a cinco o seis títulos y escalar a puestos de vanguardia del medallero.
Varias de estas disciplinas disfrutan por estos días de bases de preparación en el extranjero y los demás deberán partir rumbo a Japón en las próximas jornadas, en aras de acoplarse con tiempo a la diferencia en el horario y además cumplir con las estrictas normas sanitarias impuestas por los anfitriones en pos de garantizar el éxito organizativo de tan trascendental justa.
El tiro deportivo, por ejemplo, regresó hace poco de una estadía en la provincia española de Granada, donde pudieron ver acción y paliar la escasez de municiones, tras un buen período de asueto a causa del coronavirus y sin posibilidad alguna de incursionar en competencias internacionales.
Otros deportes como el canotaje, el ciclismo, la lucha libre (m y f), el pentatlón moderno, la natación y el atletismo cuentan con sus principales figuras actualmente fuera de Cuba, este último incluso con participación frecuente en mítines y paradas de la Liga del Diamante en Europa, lo que ha dejado noticias halagüeñas, como los tiempos de Rose Mary Almanza en la doble vuelta al óvalo.
Ya con el conocimiento oficial de quiénes intentarán situar al deporte cubano en la cúspide mundial, solo queda esperar con toda la paciencia posible hasta que el 23 de julio próximo enciendan el pebetero en Tokio y podamos al fin disfrutar del inicio de los Juegos.
