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No le pagaron el día de la vacunación

El doctor Florencio Hernández Núñez, quien reside en la calle 96, no. 9906, entre 99 y 103, en Güines, provincia de Mayabeque, cuenta que el 6 de febrero de 2023, día en que fue a vacunarse, el doctor Melvys Rodríguez, director del Centro Provincial de Medicina Deportiva donde él labora, orientó despojarlo del cobro por esa jornada.

Añade que él reclamó al Órgano de Justicia Laboral de Base, y después al Tribunal municipal, esos dos órganos judiciales le dieron la razón al director, desestimando su demanda.

Entonces, él elevó su  demanda al Tribunal Provincial de Mayabeque. Y este, en su sentencia, le hizo saber el 7 de noviembre de 2023, que le asiste la razón, pues está previsto por ley que resulta procedente en este caso el pago del salario promedio del trabajador el día que no asiste al centro laboral por haber ido a vacunarse, al amparo del artículo  116 del Código del Trabajo.

«No es posible, afirma, que se me afecte el salario, como de hecho ocurrió, por causa de una interpretación errada  de la ley en tanto el proceso de vacunación no ha cesado y dicha norma  aún se mantiene vigente… y que fue publicada en la Gaceta Oficial  Extraordinaria del 2022, totalmente vigente y no derogada aún.

Esta, precisa, dispone abonar el pago del salario promedio a los trabajadores que no asisten al trabajo el día que concurren al centro asistencial u otro destinado a tales fines para su vacunación contra la COVID-19, la del menor que está a su cuidado o la del adulto mayor que precisa del acompañamiento del trabajador.

Aclara que escribe para que su situación sirva de ejemplo a otras direcciones de los  centros laborales del país, para que no cometan el mismo error.

Sin solución problema de albañales

Dania Martínez Mora escribe desde Calle Martí  126, entre Aguilera y Patricio Lumumba, en Niquero, Granma, para contar que en su hogar, cuando llueve mucho, por los tragantes les entran las aguas albañales y abarcan toda la superficie de la casa.

En ocasiones, dice, esa situación se mantiene durante dos o tres días. Y es del conocimiento del delegado de la circunscripción y del Presidente del Consejo Popular y el Gobierno.

«Por debajo de nuestra casa, afirma, pasa el alcantarillado que antes del triunfo de la Revolución hizo el central Roberto Ramírez Delgado. Y entonces todos los años lo limpiaban. Después, nunca más lo han hecho, y la obstrucción de ese alcantarillado es la que ha propiciado esa situación».

Señala que el 10 de mayo pasado hubo una inundación que afectó a casi todo el municipio, y en su casa  el agua subió aproximadamente un metro. El piso del patio se rompió en una parte, y el Gobierno les vendió siete bolsas de cemento.

«Pero como no levantaron las losas para ver dónde estaba la causa del problema, dice, cada vez que llueve, aunque sea un poco, el agua entra y se va deteriorando aún más. Recientemente, en otra inundación, se volvió a romper otra parte del patio y el hueco es grandísimo. En la inundación pasada el 11 de este mes, en la saleta se levantaron seis losas, y por ellas salía gran cantidad de agua albañal.

«Todo esto, refiere, es de conocimiento de la delegada, que sola no puede hacer nada; del Viceintendente que atiende la construcción, y del Intendente».

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