Juventud Rebelde - Diario de la Juventud Cubana

Vocación por la judicatura

En los jóvenes, el sistema de tribunales populares encuentra una fuerza para el sostenimiento de la legalidad y el valor de la justicia

 

Autor:

Santiago Jerez Mustelier

Sus cortas edades y carreras judiciales no les menguan el compromiso, el sentido de la justicia y la vocación de servicio. Ninguno sobrepasa los 26 años y desde finales de enero, Melissa de la Caridad Alayo Hechavarría, Xian Fong Zamora, Alberto García Nodal y Yusmielis García Clark fueron nombrados presidentes de los Tribunales Municipales Populares en Cerro, Regla, Guanabacoa y Boyeros, respectivamente.

Entre tanta vorágine que supone la preparación constante para dirigir y encauzar a un tribunal; escuchar, dar curso y aclarar las inquietudes de la población; estar al pendiente de las nóminas y el pago a los trabajadores; atender sentencias, autos y providencias… los jóvenes hallaron un espacio para compartir con Juventud Rebelde sus criterios sobre la responsabilidad que desempeñan y los rumbos del sistema judicial cubano.

—¿Cuán retador es combinar su condición de jueces con la labor de encabezar un tribunal municipal?

—Melissa Alayo: Tenemos que ser justos al tomar cualquier decisión, tanto en el orden administrativo como el jurisdiccional. Ello es complicado porque debes recomponer los intereses de muchas personas, que a veces te exceden en años vividos y de trabajo.

«Implica desdoblarnos porque no decides sobre cuestiones frías, sino que dictas sobre bienes, o con quién se queda un menor, cuántos años va a pasar una persona privada de su libertad… Se trata de ser integrales y humanos».

—Xian Fong: A pesar de haber egresado recientemente de la academia, la cotidianidad en un tribunal no es nueva para nosotros; desde tercer año fungimos como asistentes judiciales. Además, contamos actualmente con el apoyo, impulso y acompañamiento de la dirección del Tribunal Provincial en La Habana».

—Yusmielis García: En mi caso, tengo el privilegio de liderar ahora al colectivo en el que trabajo desde que me gradué. De ahí que la preparación sistemática sea necesaria, porque compartes labor con profesionales que llevan más de 30 años en su haber como juristas.

Yusmielis García Clark cree en que, a diferencia de otros países, aquí el juez no está enajenado del contexto social. Fotos: Abel Rojas Barallobre

«Cuando las personas solicitan una entrevista con el presidente del tribunal y se percatan de que somos jóvenes, se muestran algunas veces incrédulos, dudan de tu capacidad… Por ello debemos demostrarles dominio de la legislación, conocimiento de las materias.

«Incluso si no se tienen todas las luces sobre una temática en específico, hay que apostar por el tino, la humildad y la perspicacia para consultar con otros colegas y darle respuestas certeras y convincentes a la población».

—Alberto García: Nuestra juventud nos resta experiencia de la vida, que es muy importante a la hora de impartir justicia. Pero nos sobran la entrega, las ansias de aprender todos los días algo nuevo y el respeto y amor por la profesión.

«No negaremos que presidir un tribunal es arduo y abarcador, nos disminuye las horas de vida social, de estar en la casa con la familia; pero nos sentimos realizados. Que con nuestra edad, estemos investidos de tan alto cargo, es un honor y nos inspira a dar lo mejor de cada uno».

Guardianes de la Legalidad

Con orgullo en el rostro, los cuatro jueces coinciden en que un punto a favor de ellos y los profesionales del ramo es que son de pueblo. «A diferencia de otros países, aquí el juez no está enajenado del contexto social. Como siempre enuncia nuestro presidente del Tribunal Supremo Popular, Rubén Remigio Ferro: el magistrado cubano tiene que tener ojos y oídos pegados a la tierra, ser perito de peritos», afirma Yusmielis García.

Para Xian Fong «ser servidores públicos no es una mera consigna; nos debemos al pueblo, así está mandatado por la Constitución y debemos cumplirlo efectivamente».

Melissa de la Caridad Alayo Hechavarría comenta que se debe dar calidad a las decisiones judiciales. Fotos: Abel Rojas Barallobre

En tanto, Melissa Alayo considera que los jueces actuales tienen nuevos retos ante sí, porque «los tiempos cambian, y el derecho evoluciona a la par de las sociedades, por lo que en algún momento podríamos decidir cuál de las dos madres tendría la custodia de su hijo. Hay que estar preparados para lo que vendrá».

—¿Por cuáles caminos ustedes consideran que debe transitar en el futuro nuestro sistema judicial y de tribunales?

—Alberto García: Seguir siendo guardián de la constitucionalidad, de los derechos que se recogen en nuestra Carta Magna (…), interpretarla siempre en beneficio de los ciudadanos. El sistema judicial se está reordenando para atemperarse a nuestros tiempos. Sus normas necesitan oxigenación, cambios en las estructuras, los métodos y las formas de impartir justicia; y en esa dirección ya se trabaja.

El sistema judicial debe seguir siendo guardián de la constitucionalidad y los derechos ciudadanos, opina Alberto García Nodal. Fotos: Abel Rojas Barallobre

—Melissa Alayo: Dar a los cubanos calidad en las decisiones judiciales, esto es lo principal para que la gente confíe en su sistema judicial, que tiene que ser un tronco seguro y vigilante sempiterno de la legalidad.

—Xian Fong: Es preciso adaptarse, cada vez más, a la digitalización e informatización de los procesos. Por ejemplo, ya se emplea en el municipio capitalino de Diez de Octubre el expediente judicial electrónico, un elemento novedoso en nuestras instituciones, y ello conlleva mayor preparación de los jueces y el personal auxiliar.

«Se añade la aprobación, como parte del cronograma legislativo, de un grupo de leyes y normativas importantes como la Ley del Sistema de Tribunales, el Código de Procesos, la Ley de Procedimiento Penal… las que incorporarán nuevos desafíos y ampliarán las competencias».

—¿Cómo elevar la cultura jurídica de la población?

—Yusmielis García: Los medios de comunicación deben profundizar los espacios dedicados a las temáticas jurídicas. No quiero ser absoluta, pero muchos cubanos no conocen su Constitución a cabalidad, tampoco sus derechos y deberes. Aprovechar para informar y esclarecer todo cuanto sea necesario, conduciría a que existiese mayor conocimiento de las normas y su aplicación.

—Xian Fong: Desde la Facultad de Derecho de la Universidad de La Habana, y de forma similar en otras provincias del país, se encaminan proyectos de consultorías o audiencias comunitarias, tanto en espacios físicos como virtuales, para aclarar preocupaciones sobre diversos temas vinculados con el Derecho. Estos escenarios se deben multiplicar en aras de lograr ciudadanos más instruidos sobre sus legislaciones.

Xian Fong Zamora enfatiza en que los jueces son servidores públicos y se deben al pueblo. Fotos: Abel Rojas Barallobre

—Alberto García: Tenemos que trabajar en las sentencias, ser más claros y menos técnicos en cuanto al lenguaje, explicar y argumentar la resolución para que conozcan el sentido de la norma y por qué los tribunales lo aplican de ese modo; en nuestro quehacer diario en los juzgados y tribunales, al interactuar con las personas, se debe educar y fomentar una cultura de acatamiento de las leyes.

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