Juventud Rebelde - Diario de la Juventud Cubana

Tus mandados, en el móvil

Ampliar el uso de plataformas virtuales para el cobro en establecimientos del comercio y la gastronomía popular es un reto para clientes y administradores

Autores:

Mileyda Menéndez Dávila
Dorelys Canivell Canal
Lisandra Gómez Guerra
Nelson Rodríguez Roque

A las jornadas de labor de Yamilet Esparza, dependienta integral de la bodega La Quemazón, en Holguín, se le sumó en noviembre pasado la tarea de promover el pago mediante la plataforma digital EnZona.

«Hubo personas que no tenían la aplicación y aquí se las copiamos. Cuando alguien demanda el servicio, le sacamos la cuenta del costo de lo que comprarán y después que accionan en su móvil confirmamos que se haya efectuado el pago. Han sido pocos, uno o dos casos, los que han presentado algún retraso en el proceso».

Similar experiencia ha vivido en tierra vueltabajera Adolfo Cañizares, administrador de la bodega La Cotorra, quien también se ha dedicado a asesorar a sus clientes. «Desde que nos imprimieron el código QR, en noviembre pasado, nos dimos a la tarea de explicarle a la gente que solo necesitan un teléfono inteligente con conexión nacional y una tarjeta magnética».

Dichas historias forman parte de un proceso que dio inicio en el último trimestre de 2020, encaminado a implementar el pago electrónico en las dependencias del comercio y la gastronomía popular, empeño en el que todos los territorios no marchan a igual ritmo.

A fin de conocer qué ha pasado hasta ahora, JR incluyó en sus visitas a las unidades empresariales de base (UEB) El cochinito y 1514, de la ciudad de Sancti Spíritus, donde el código QR impreso pudiera parecer un elemento decorativo más.

«Desde el primer día está visible, junto al menú que se puede solicitar para llevar (única modalidad activa en la compleja situación epidemiológica). Algunos preguntan qué es y se les explica sus ventajas, incluso lo del descuento al pagar por esa plataforma, pero no hemos logrado la primera operación», explicó Yonael Torres, administrador de El cochinito.

En el reconocido restaurante 1514, el administrador Boris Martínez Roche consideró que la brevedad del intercambio con los potenciales clientes atenta contra la difusión de esa nueva opción. «Hemos capacitado a nuestro personal y para todos es un proceso nuevo. Precisamos ganar en cultura del comercio electrónico para promoverlo», añadió.

En zona… desconocida

Unido a la intención del Estado de potenciar la informatización de la sociedad, marchan los esfuerzos por incorporar a la cotidianidad el comercio electrónico en sus más diversas formas y opciones, sobre todo en un momento en el que muchos evitan manipular dinero efectivo o prefieren hacer las compras desde casa para minimizar los riesgos asociados a la pandemia.

Yunier Miguel Sánchez, director de la Unidad Básica Economía Digital Xetid, aseveró a este equipo de prensa que la plataforma EnZona posibilita a cualquier ofertante estar presente en su «bulevar» digital, para ganar clientes mediante tiendas virtuales, un servicio cuya infraestructura está disponible en menos de 72 horas.

«Esta variante es muy bien recibida por entidades del comercio y la gastronomía, pues con solo registrar un establecimiento en ese bulevar ya tienen disponibles sus códigos QR para recibir los pagos.

«El bulevar de EnZona tiene más de 12 000 dependencias registradas en el país, de todas las esferas, y es un registro que se incrementa por meses. La plataforma se concibió para que pudiera ofrecer esa capacidad», aseguró el directivo, y agregó que la Empresa Provincial de Comercio La Habana tomó la iniciativa entre diciembre y enero de este año, estipulando que todas sus instituciones se inscribieran en EnZona, un recurso poco justipreciado por sus clientes aún.

El restaurante Constelaciones ha trabajado de conjunto con Xetid en su informatización. Foto: Tomada del sitio web de Radio Angulo

En el mercado artesanal industrial (MAI) La Popular, sito en la avenida Ayestarán, del Cerro, supimos por el administrador Daniel Huerta Corzo que en este período han realizado una docena de operaciones como promedio mensual, aunque reciben más de un centenar de clientes diariamente.

A su juicio, influye mucho el tipo de productos que comercializa su entidad. «Nadie saca el teléfono para comprar un cepillo de dientes», le apoyó la dependienta Gretchen González. 

Otro elemento que no ayuda en su difusión es que la plataforma opera con datos «.com», no con los megas para navegación nacional —acotó Huerta Corzo—, por lo que mucha gente piensa que no compensa el ahorro del descuento con el gasto del saldo, a menos que sea un monto elevado.  

No obstante, en el mes de marzo la empresa habanera de Comercio y Gastronomía recaudó más de 7 000 000 de pesos utilizando códigos QR de la plataforma EnZona. «Parece muy básico, pero da una medida del crecimiento», dijo Sánchez.

Pica, pero no se extiende

A partir de indicaciones del Ministerio de Comercio Interior (Mincin), el sistema empezó a expandirse al resto del país antes de cerrar el año pasado. Yunier Miguel Sánchez reconoce lentitud en su consolidación: «Entendemos que hay muchos clientes reacios al tema de la tecnología. Es un proceso también cultural», valoró.

En tal sentido, hay provincias muy adelantadas como Ciego de Ávila, Guantánamo y Matanzas, en tanto otras como Santiago de Cuba deben trabajar con más intencionalidad para ganar clientes.

En busca de responder a la indicación del Mincin, Pinar del Río implementa una estrategia para incrementar el número de centros asociados al Comercio y la Gastronomía que dispongan de QR. Hoy suman más de 200 unidades, de las cuales 119 son bodegas, 69 de ellas ubicadas en la cabecera provincial.

Según el ingeniero en Telecomunicaciones y máster en Nuevas Tecnologías Asdrúbal Andrés Hernández, jefe del Departamento de Informática del Grupo Empresarial del Comercio (GEC), hasta el 16 de abril se habían realizado en la occidental provincia 949 operaciones, con un monto de aproximadamente 200 400 pesos.

Juan Yurief Castillo, especialista de informatización de la Empresa Provincial de Alojamiento y Gastronomía, explicó que recibieron la indicación de empezar a trabajar en un primer momento con EnZona, y luego decidieron sumar Transfermóvil para lugares más apartados en los que no existe una adecuada cobertura por datos móviles.

Advierte el informático que primero trabajan en la generación de los QR impresos, que el cliente puede escanear en el mostrador, y en un segundo momento incluirán las tiendas virtuales.

En el restaurante Mar-Init precisan de un diálogo más cercano con el cliente para generalizar el uso del código QR a la hora de ejercer los pagos. Foto: Jaliosky Ajete Rabeiro

«A partir del proceso de perfeccionamiento de la Empresa tenemos establecimientos de Gastronomía especiales, a los que se le exige como primer requisito disponer de códigos QR, y como segundo hacer los pagos a sus proveedores mayoristas a través de EnZona».

En esta situación está el Mar-Init, donde Ramón Ernesto Romero Linares, su director, afirmó que ya pagan los suministros por esa vía: «Ahora todo es muy rápido, y en el mismo teléfono veo el historial de cada factura. Eso sí, necesitaría poder colocar el número de factura para saber a qué se corresponde».

Clara Ileana Ballart, jefa de Centro de Despliegue Territorial de Xetid en Pinar del Río, precisó a JR que se ha cumplido con la capacitación y se ha ido incrementando el uso de la pasarela de pagos por QR en las bodegas y en el resto de las instituciones de Comercio y Gastronomía, pero sigue siendo insuficiente. «Hay que reconocer que en muchos lugares el código no se emplea por falta de orientación a los clientes», insistió.

A fin de hacer atractivo el uso de este servicio, desde la segunda quincena de abril, la Empresa de Gastronomía vueltabajera comercializa un grupo de ofertas a modo de combos o módulos que se reservan por teléfono y se pagan a través de EnZona, iniciativa que también aprovecha la Empresa de Comercio del municipio de La Palma y la tienda virtual Sensación, con muy buenos resultados.

En la UEB El cochinito, de la ciudad del Yayabo, se muestra junto a los productos que expenden y el menú del día, el QR y una explicación del pago electrónico. Foto: Lisandra Gómez Guerra

Por su parte, en la tierra del Yayabo el proceso transita ralentizado, al no contabilizar aún ni una sola compra online en el sector del Comercio y Gastronomía.

De no revertirse esa realidad será casi imposible que el territorio cumpla con su aspiración: «Al finalizar el año, el anhelo es que el 30 por ciento de los servicios se pague vía comercio electrónico. Incluso hemos realizado contrataciones con Etecsa para acceder a Transfermóvil en la cabecera provincial», refiere Ihosvany Montero, director de Desarrollo del GEC.

En busca de atraer clientes a la modalidad de compra digital se llevó el servicio a cuatro unidades perfeccionadas, tres en la ciudad del Yayabo y otra en Cabaiguán, así como a seis entidades en Trinidad.

«Luego pasaremos el servicio a las bodegas de la Ciudad museo del Caribe, que deben ser las primeras de la provincia», informó Yuneisy Chirino, especialista de Xetid en Sancti Spíritus.

Variantes click

Diferente es la realidad de Holguín. Desde hace un quinquenio, su GEC trabaja por extender los pagos electrónicos y la informatización avanza, confirmó el funcionario comercial Omer González.

«Durante el año 2020 y los meses transcurridos de 2021 añadimos otras modalidades, apelando al código QR. El resultado es que 200 unidades minoristas (al cierre de marzo) pueden prestar ese servicio, de ellas 158 bodegas, diez mercados industriales, siete mercados Ideales, 15 restaurantes de gastronomía y diez centros de alojamiento.

«Han efectuado operaciones 139 unidades, lo cual ya reportó un importe significativo. Por el aniversario 60 del Mincin identificamos 60 bodegas para, además de las remodelaciones y cambios de imagen comercial, proveerlas de estas prestaciones virtuales».

A partir del 1ro. de enero de 2021 se permitió el pago a través de EnZona de las reservaciones en el buró de la empresa Recinto de Exposiciones de Holguín. Yoanka Jiménez, comercial de ExpoHolguín, identificó como punto de partida la implementación de una zona wifi gratis en el restaurante Ranchón Real, por la que se aprecian y solicitan las ofertas. En el semestre actual incorporarán además la utilización de códigos QR, y proyectan extender gradualmente esos beneficios al resto de los servicios en la instalación.

También el restaurante Constelaciones, una de las unidades sujetas al nuevo sistema de perfeccionamiento del Comercio, anda en modo QR desde octubre pasado: «Estamos inmersos en el proyecto Sabor Cubano —afirma Orlando Santos, su director— y contamos con EnZona para reservar y pagar online. Quisiéramos que todas nuestras operaciones se caractericen por el elemento virtual», comentó.

Desconocido y oportuno

Y la población, ¿conoce realmente el servicio?

A la salida del MAI capitalino La Popular preguntamos si alguien de la cola estaba para pagar por EnZona, y la respuesta de la única persona que entendió la pregunta fue que ese servicio «era nada más en el Coppelia, y solo por una de las colas, casi siempre muy larga». Cuando le mostramos el QR bien visible en la tienda se encogió de hombros con cara poco convencida.

En Sancti Spíritus, en las afueras de los restaurantes visitados escuchamos: «No conocía esa opción». «No tengo celular». «¿EnZona?, solo conozco TuEnvío». «Ya saqué todo el dinero de la tarjeta de jubilado de una vez. Ahora no se puede andar mucho en la calle». «No tengo tarjeta magnética. He ido a sacarla al banco y la cola dobla la esquina».

Conscientes de estas opiniones, los administradores de las dos UEB espirituanas insisten en promover la opción porque reconocen que el comercio electrónico facilita el trabajo al reducir la circulación de efectivo, además de que las operaciones pueden realizarse desde la cuenta bancaria.

«Se pudieran utilizar las redes sociales y una comunicación más personalizada para que nuestros clientes comiencen a concientizar esa oportunidad», acotó Martínez, administrador del emblemático 1514.

La idea es buena, pero necesita mejoras, comenta el administrador de La Popular, en el Cerro: «Para la empresa sí queda claro que la venta se realizó, pero a nivel de unidad yo no tengo cómo saberlo, a menos que le tire una foto a la pantalla del teléfono del cliente con el mío», explica. Por ahora resuelven así, pero cuando sean miles y no una decena las ventas, este sistema sería lento e infectivo. «Algo podrán programar, y darnos recursos para controlarlo», estimó.

Adaisy González, directora adjunta del GEC Pinar del Río, corroboró que ha existido resistencia por parte de no pocos administradores y dependientes, pero con el tiempo muchos han percibido las ventajas de la plataforma, para los clientes y para la contabilidad de las entidades.

«Nuestra aspiración es elevar la calidad de los servicios a la par que incorporamos estas nuevas formas de pago. Creo que eso prestigia la empresa, favorece a los clientes y ofrece vitalidad a los comercios».

Agustín Chiong, director de la Oficina Territorial de Control del Ministerio de Comunicaciones (Mincom) en Holguín, expresa que «aun cuando se aprecia un incremento a nivel de país y de provincia en el empleo de EnZona y Transfermóvil, todavía falta informar más a la población.

«Debemos asegurar una señalización adecuada en los lugares donde se empleen. Y hay que ganar en cultura digital para que se facilite su manejo».

Si bien el comercio electrónico es mucho más amplio y se extiende hasta las más diversas esferas de la sociedad, en el Comercio y la Gastronomía popular aún no se ha logrado explotar todo su potencial, como sí ha sucedido en otros sectores.

La falta de información, la resistencia al cambio y la escasa venta de celulares con potencial para usar estas aplicaciones, han impedido que se asuma con rapidez y naturalidad este servicio, que a la larga redundará en mejoras para la calidad de vida de toda la población.

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