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La primera secretaria del Comité Nacional de la UJC dio lectura al informe Autor: Dayam González Publicado: 03/04/2024 | 09:59 am
Marzo del 2020 paralizaba el mundo con la expansión de un virus por todo el planeta que lo convertiría en la pandemia más letal de los últimos tiempos. En Cuba, sus jóvenes ultimaban detalles para celebrar la sesión nacional de su 11no. Congreso. De inmediato, la decisión acertada y responsable no se hizo esperar: lo evaluado y discutido hasta ese momento en el proceso de base, era lo más importante. Nuestra militancia había marcado, de manera crítica y propositiva, el camino a seguir en la próxima etapa.
Fue necesario establecer importantes readecuaciones al funcionamiento de las estructuras de base de la Unión de Jóvenes Comunistas (UJC) y de las organizaciones estudiantiles para mantener en acción la vida orgánica de la vanguardia política juvenil. El espacio comunitario se convirtió en el bastión común para encontrarnos y desarrollarnos.
Miles de muchachas y muchachos marcharon voluntarios a las zonas rojas. Se abrieron frentes importantes de producción continua y en cada rincón de Cuba la voz y el accionar joven se hizo presente. Un especial reconocimiento para quienes laboraron directamente en la producción de nuestras vacunas y otros complementos médicos.
Al unísono se le imponía a Cuba el peor recrudecimiento del bloqueo. Más de 240 medidas empleadas en el propio pico pandémico han hecho de la Mayor de las Antillas y sus jóvenes un ejército que combate con resistencia creativa, también en contra de los desastres naturales; así como, accidentes lamentables que sumieron al pueblo en el dolor por la pérdida de vidas humanas y recursos naturales.
En abril de 2021, aún bajo los azotes de la COVID-19, se desarrolló el histórico 8vo. Congreso del Partido Comunista de Cuba. En su informe central el General de Ejército Raúl Castro Ruz, líder de la Revolución Cubana, señaló con fuerza como se robusteció la atención por el Partido a la UJC, las organizaciones estudiantiles y los movimientos juveniles.
Otros temas de discusión en los que la organización juvenil estuvo ampliamente involucrada en la magna cita partidista fueron en los referentes a la política de cuadros y al cumplimiento del Servicio Militar Activo. Como parte de estas discusiones, los resultados del propio proceso orgánico anterior y la implementación de los objetivos emanados del 11no. Congreso, fue aprobada, en octubre de 2022, la Estrategia de la Unión de Jóvenes Comunistas para fortalecer su papel integral en el presente y en el futuro del país.
Este importante documento contiene 82 acciones dirigidas a tres áreas fundamentales: la política de cuadros, la vida interna de la Organización y la labor ideológica.
Precisamente en este período y como resultado de la voluntad política de nuestro Gobierno se construyó, con la implicación de numerosos representantes de los organismos de la administración del Estado y los académicos, una Política integral para a las infancias, adolescencias y juventudes cubanas.
Tanto la Estrategia como la citada Política, han reforzado el mandato recogido en el Artículo 6 de nuestra Constitución de la República que refiere: «La Unión de Jóvenes Comunistas, organización de vanguardia de la juventud cubana, cuenta con el reconocimiento y el estímulo del Estado, contribuye a la formación de las más jóvenes generaciones en los principios revolucionarios y éticos de nuestra sociedad, y promueve su participación en la edificación del socialismo».
Nuestra ley de leyes refrenda, además, en su Artículo 87, que «El Estado, la sociedad y las familias, reconocen a las personas jóvenes como activos participantes en la sociedad, a tales efectos crean las condiciones para el pleno ejercicio de sus derechos y su desarrollo integral».
El proceso orgánico del 12do. Congreso, concluido tan solo hace 20 días, nos permitió profundizar en las principales inquietudes y problemáticas de la juventud cubana, así como del funcionamiento de las estructuras de base de la Organización.
¿Cómo es la juventud cubana hoy?
En las últimas cuatro décadas, Cuba pasó de ser un país con una población joven a uno con la población envejecida; en la actualidad más del 20% de la población total cuenta con 60 años y más, es el único grupo poblacional que se incrementa.
En aproximadamente 50 años (desde 1981 hasta 2030) la población de 0-30 años habrá disminuido en más de 2,1 millones de personas, lo que significa 27 puntos porcentuales menos de habitantes de esas edades, con respecto a los totales de población.
Tal situación nos impone el reto de hacer labor política y formativa en un contexto complejo, dentro de una sociedad donde han crecido las disparidades económicas que colocan a segmentos de la niñez, adolescencias y juventudes en condiciones de vulnerabilidad, lo que nos hacen pensar en la urgencia de una organización más plural, diversa y heterogénea, donde todos deben encontrar espacios que los representen.
Al mismo tiempo, enfrentamos poderosas influencias ideoculturales dirigidas a la transformación de valores, aspiraciones y proyectos de vida que buscan la banalización, el egoísmo y la imposición de modelos foráneos y colonizadores.
Ante semejante avalancha, estructurada y perfectamente diseñada desde los centros de poder hegemónico, se impone replantearnos los métodos y estilos de trabajo, con inteligencia, buen gusto y capacidad de mover los resortes patrióticos y aprovechar la fortaleza que significan los valores humanos del socialismo y el legado de la generación histórica que aún nos acompaña.
Es impostergable reforzar la presencia de nuestros mensajes y la defensa de la Revolución en el entorno digital. Sumar y hacerlo con inteligencia, a un mayor número de jóvenes capaces de combatir en las trincheras de las redes sociales y articularlos como avispero juvenil permanente.
Lograr tan urgentes propósitos, contempla la capacidad de sortear obstáculos y enfrentar con creatividad un conjunto de limitaciones que afectan objetivamente a niños, adolescentes y jóvenes, aquejados por las escasas y poco diversas opciones culturales, recreativas y deportivas, unido al deterioro de la cobertura docente; en tanto, crecen las insatisfacciones con la continuidad de estudios en varias enseñanzas.
A lo anterior se suman insuficiencias en la formación vocacional y orientación profesional, insatisfacciones en el proceso de ubicación laboral y pérdida del poder adquisitivo con los ingresos provenientes del trabajo.
Asimismo, de manera general existen carencias de recursos económicos que garanticen la vivienda y la adquisición de bienes duraderos para los jóvenes, al igual que los dispositivos electrónicos o electrodomésticos.
Tales impactos económicos provocan un lógico incremento de la población que emigra en edades jóvenes y sectores profesionales, tanto internamente desde las zonas rurales, como hacia otros países.
Los daños sufridos en el tejido ético y cívico de la sociedad, propios de estos tiempos, caracterizados por el declive en la economía, los servicios y los espacios de interacción, generan un dañino impacto en la población infanto juvenil y exacerban actitudes o conductas que, desde la UJC y sus mecanismos de influencia, reclaman acciones concretas, en estrecho vínculo con los organismos y entidades implicadas.
Crece la iniciación precoz de las relaciones sexuales, las elevadas tasas de embarazos y de interrupciones voluntarias en la adolescencia; unido a la poca disponibilidad y diversidad de medios anticonceptivos.
Aflora uno de los fenómenos más peligrosos para la salud y el desarrollo integral de jóvenes y adolescentes, el aumento en el consumo de drogas y sustancias tóxicas adictivas. Ante lo cual, la UJC, los Movimientos Juveniles y Organizaciones Estudiantiles, han ratificado su estricto apego a la política de tolerancia cero, promulgada e implementada por el gobierno revolucionario.
¿Cómo nos miramos al interior? ¿Qué tenemos para seguir siendo vanguardia?
En el 8vo. Congreso del PCC, entre los temas más profundamente discutidos, estuvo lo relacionado con la política de cuadros. En ese entorno la UJC cuenta con una plantilla de 2 355 cuadros, cubierta al 88.7%. Las principales causas de las plazas vacantes se centran en el insuficiente trabajo realizado con la identificación, selección y captación de las reservas. Del total de cuadros activos, son mujeres el 69.3%, negros y mulatos el 49.7%, el 91% de ellos son militantes del Partido, los demás se encuentran en proceso. El 45% de los cuadros son graduados universitarios y el 55% cursan la Educación Superior.
A partir de la prioridad que demanda la atención a quienes conforman la columna vertebral del trabajo político ideológico, se reforzó la Sección de Cuadros del Comité Nacional y se elevó a la categoría de Departamento.
A partir de la implementación de los acuerdos del 8vo. Congreso del Partido, dicho órgano acordó modificar el vínculo laboral previo de 5 a 3 años, para los jóvenes que conforman las diferentes canteras de reservas de la Organización, tomando en cuenta que durante su tránsito por las diferentes organizaciones y movimientos adquieren variadas herramientas de dirección; así como métodos y estilos de trabajo que favorecen, en el período de tres años, su incorporación efectiva al trabajo profesional.
El proceso de vinculación laboral de los dirigentes estudiantiles ha permitido sumar a jóvenes más preparados y con mayor reconocimiento en la base, aunque no se logra la incorporación de la totalidad de los seleccionados, a causa de la insuficiente atención que se les brinda durante su proceso de formación.
En el quinquenio objeto de evaluación, 421 dirigentes juveniles vinculados han culminado el proceso, de los que 137 se han incorporado al trabajo profesional de la Organización, un 31,5% de efectividad. Actualmente se cuenta con 239 compañeras y compañeros.
¿Cómo se comportan los principales indicadores de la vida interna de la Organización? ¿Cómo deben funcionar nuestras organizaciones de base? ¿Cuáles son las mayores preocupaciones que tenemos para lograr un crecimiento a las filas y al Partido, acorde a los momentos actuales?
Llegamos a esta sesión del 12do. Congreso, acompañados por la fortaleza de contar con 415 717 militantes, en 34 750 organizaciones de base. Resultado de un trabajo que busca construir una Organización más dinámica, inclusiva y transformadora, bajo el principio de atender sistemáticamente el estado de opinión de los jóvenes, el vínculo directo con la base, la integralidad en la labor de los cuadros y la actuación articulada con las organizaciones estudiantiles y los movimientos juveniles.
No llegar a todos los que pueden sumarse a nuestras filas, o no hacerlo con el mensaje correcto, abre una brecha entre las expectativas de los jóvenes y el nivel de satisfacción de las mismas que ellos pueden encontrar en la UJC. Una responsabilidad no cumplida por las organizaciones de base encargadas de aproximarlos y motivarlos.
Con respecto a los principales problemas relacionados con el funcionamiento, estos han estado asociados a la falta de ejemplaridad de los militantes, la disciplina consciente para cumplir, la valentía para emitir criterios, la creatividad; pero principalmente ha sido determinante la manera en que el secretario general se vincule o no con los jóvenes, cohesione el trabajo y movilice al colectivo. Las reuniones de secretarios generales no siempre han sido el escenario para introducir temas de interés, conocer las preocupaciones, orientar la metodología de un proceso y evaluar tendencias.
No se ha logrado que todos los comités de base identifiquen los problemas, encuentren las causas, propongan acciones, distribuyan las tareas entre los militantes y evalúen los resultados. Para ello es necesario que toda la membresía asista activamente a las reuniones ordinarias, aspecto que se ha comportado al 88% como promedio anual, índice afectado principalmente por la irresponsabilidad de algunos militantes; sin embargo, solo el 7.6% de estos ausentes, como promedio, se analiza en el seno de su organización de base.
Lo planteado se complementa con la necesidad de educar con exigencia y, a la vez, medir las consecuencias de lo que significa desactivar o separar de las filas a un militante, sin antes haber agotado todos los recursos en su conducción y formación.
No debemos perder de vista que el objetivo cimero es que ese joven comunista continúe su militancia fortalecido y motivado en las filas del PCC. En este sentido, se logra que el 96,2% de los militantes seleccionados sean avalados y se incorpora el 86.8% de aquellos a quienes se les inicia el proceso del PCC.
Aun cuando en la etapa que evaluamos 41 297 militantes pasaron a las filas del Partido, es un proceso donde tenemos grandes reservas, teniendo en cuenta que, de cada 100 nuevos ingresos, solo 30 corresponden a la cantera de la Unión de Jóvenes Comunistas.
Una familia grande, diversa y amada
Nuestra Organización tiene la responsabilidad de conducir el trabajo de las organizaciones estudiantiles y los movimientos juveniles. En reiteradas ocasiones hemos sido convocados a que estas estructuras tengan una dinámica tal que todos los días quieran y puedan hacer algo nuevo que les permita rebasar la cotidianidad y brinden verdaderas formas de participación a los jóvenes desde sus propias propuestas.
En este período, tanto la FEU como la FEEM, desarrollaron amplios procesos asamblearios (10mo. Congreso de la FEU con 65 acuerdos y Segunda Asamblea Nacional de la FEEM, que adoptó 32 acuerdos), donde evaluaron las principales inquietudes en relación con los aspectos que necesitaban revitalizarse o transformarse. La UJC asume la responsabilidad que le asiste en la conducción de estas dos organizaciones y reconoce la necesidad de un trabajo más orgánico desde las propias estructuras de los Comités UJC, Comités Primarios y organizaciones de base.
En similar sentido, creemos que la Organización de Pioneros “José Martí” requiere mayor atención a todos los niveles. Es importante que podamos rescatar las esencias fundacionales del funcionamiento, vital para educar a nuestros niños, niñas y adolescentes en valores, que los hagan crecer como buenos seres humanos, patriotas y comunistas.
Prioritario es también el papel que desempeñan los movimientos juveniles: Asociación Hermanos Saíz (AHS), Brigada de Instructores de Arte José Martí (BIAJM) y Movimiento Juvenil Martiano (MJM); así como, el periódico Juventud Rebelde, la Casa Editora Abril y el Centro de Estudios sobre la Juventud.
Durante el período que se evalúa se han desarrollado, bajo la guía de la UJC, los diferentes procesos que forman parte de la vida orgánica de estos movimientos e instituciones. En todos los casos han conseguido llegar a un amplio espectro juvenil e intercambiar a nivel comunitario.
No debemos olvidar que también la etapa que evaluamos ha visto surgir agrupaciones juveniles afines a temas diversos, que han recibido de la UJC el acompañamiento y la voluntad de sumarlos al objetivo común de defender la Revolución y acercarnos a las motivaciones de todos los sectores de la vida juvenil del país, propiciando espacios conjuntos, así como el diálogo activo y sistemático.
Una fuerza importante en la batalla económica
La batalla económica se erige en una de las principales misiones de la juventud cubana. Para ello se discutió y aprobó, en el II Pleno del Comité Nacional de la UJC, realizado en diciembre de 2020, los pilares que garantizan la participación, a través de la inserción de los jóvenes en tareas productivas y de impacto social.
En función de ello se crearon 5 116 brigadas, que aglutinaron a más de 120 605 integrantes. La producción de alimentos ha sido de las misiones que más ha movilizado en todo el país. También se han desarrollado acciones relacionadas con la producción cañera-azucarera, en un sector donde se precisa de mucha más efectividad para revertir los indicadores y resultados negativos que hoy muestra el desarrollo de la zafra
Por otro lado, se debe destacar la vinculación directa en la construcción, el transporte, los portadores energéticos y el desarrollo de los activos juveniles en los diferentes sectores. Como parte de las medidas que el país ha aprobado para garantizar la seguridad y la soberanía alimentaria, se les ha entregado tierras a 1 440 jóvenes.
De igual forma, la UJC y su militancia mostró apoyo total al proceso de corrección a las distorsiones y las diferentes proyecciones evaluadas en la Asamblea Nacional del Poder Popular.
A lo anterior se une el papel de la ciencia y la innovación juvenil, a través de las 6 851 Brigadas Técnicas Juveniles que funcionan en el país, con 71 402 brigadistas, un movimiento urgido de consolidar su papel y de ofrecer soluciones.
La atención de la Organización hacia los jóvenes que laboran en las nuevas formas de gestión no estatales, continúa siendo una prioridad dentro del sistema de trabajo.
Un tema sensible y que está ocupando a la Organización es el tratamiento que se le brinda a los jóvenes desvinculados del estudio y el trabajo. Junto al Ministerio de Trabajo y Seguridad Social se ha participado en la 1era Feria Nacional de Empleo y Oportunidades, esta actividad logró el objetivo de movilizar, en todos los municipios del país, a los diversos actores de la economía, poniendo a disposición de la población variadas ofertas de empleos.
El más sagrado deber de cada cubano
La atención a las tareas relacionadas con la defensa de la Patria socialista, el más grande honor y el deber supremo de cada cubano, ocupa espacio prioritario, considerando la tendencia a la baja natalidad y al envejecimiento de la población cubana.
Evidencia de ello es el valioso ejemplo que representan quienes, en la Brigada de la Frontera, frente a la ilegal base naval de Guantánamo, cumplen su Servicio Militar, como parte del movimiento político Vanguardia Combativa “Ramón López Peña”.
Tanto la incorporación al Servicio Militar Activo como al Servicio Militar Voluntario Femenino y la preparación militar de los cuadros de dirección juvenil y sus reservas, constituyen prioridades que, de conjunto con los ministerios de las Fuerzas Armadas Revolucionarias y del Interior, son atendidas y revisadas de forma permanente. Precisamente, el último Pleno del Comité Nacional evaluó profundamente la participación de los jóvenes en la defensa de la Patria, porque ello es esencial para lograr la continuidad de esta Revolución.
La UJC y el escenario internacional
El trabajo internacional de la UJC durante el período se ha caracterizado por profundizar las relaciones con organizaciones juveniles en el mundo, contribuir al rejuvenecimiento del movimiento de solidaridad con Cuba y mantener permanente la denuncia del bloqueo.
Además, la UJC se ha propuesto elevar su activismo en los organismos multilaterales a los que pertenece, con énfasis en la Federación Mundial de Juventudes Democráticas. Todo ello, en correspondencia con los objetivos de política exterior de Cuba y la Estrategia para fortalecer el papel integral de la UJC en el presente y futuro del país.
Resumen del proceso orgánico 12mo. Congreso
Cada asunto abordado en el informe tuvo su expresión particular en los espacios que fueron diseñados a lo largo de todo el Congreso y en las discusiones de los diferentes territorios. Entre los espacios principales se resalta:
El proceso de fortalecimiento que abarcó el 100% de las organizaciones de base previstas, con un 89% de asistencia de la militancia a las reuniones. El 64.3% de los secretarios generales fueron ratificados en sus cargos y el 35.7% de nueva elección. Como explicamos ayer, se recogieron 5 106 planteamientos de sugerencias para modificar los documentos rectores de la Organización.
Los congresos a nivel de zona de trabajo, constituyeron una experiencia de alto valor participativo, que reafirmó lo trazado por la estrategia aprobada y que justamente busca dar, a la base, el protagonismo principal en todo lo que hacemos. Se realizaron, en los meses de julio y agosto, con la participación de 310 594 jóvenes, adolescentes y pioneros.
Las asambleas municipales realizadas en los meses de septiembre a noviembre, así como las provinciales, efectuadas de diciembre a marzo, centraron sus debates en el funcionamiento orgánico, la necesidad de que el comité de base sea el espacio donde se materialicen las soluciones a los problemas de nuestros jóvenes e insistieron en hacer más flexible los procesos de la Organización, así como la importancia de que exista una mayor atención y apoyo, por parte de la administración, a los jóvenes. Insistieron en la urgencia de seguir acercándonos a la historia, fortalecer la ideología y aportar más activamente a la vida económica y social del país.
El proceso orgánico que hoy culmina, en una primera etapa, ha ratificado para nosotros una pregunta y respuesta formulada por el Comandante en Jefe, Fidel Castro Ruz, en el año fundacional de la Organización: “¿Qué queremos nosotros de nuestros jóvenes? De nuestros jóvenes queremos mucho, de nuestros jóvenes lo queremos todo y lo esperamos todo”.
Los desafíos de esta Cuba inmensa son también los de su juventud, que en su aniversario 63 ratifica el papel de vanguardia. El resumen hecho hasta aquí no implica vanagloriarnos o regocijarnos con lo hecho. No desconocemos nuestras deficiencias y errores, los asumimos con la más entera responsabilidad de que sabremos enfrentarlos.
Nos sabemos herederos de las tradiciones de lucha de la generación histórica de la Revolución y, en especial, de ese llamado que nos hizo el General de Ejército, desde Santiago de Cuba, cuando nos convocó a cuidar “!…la unidad más que a la niña de nuestros ojos!” Esta combativa juventud, que ha vivido intensamente el 12mo. Congreso de la UJC, el congreso de los jóvenes cubanos, así lo garantizará. Nos veremos siempre en cada trinchera donde se junte la voluntad de unir, la alegría de vivir en Cuba y la decisión de defender nuestro socialismo.
Seamos, entonces, consecuentes con el rigor y la calidad que nos ha acompañado durante estos meses de congreso y hagamos de estas jornadas, hoy en el trabajo en comisiones y mañana durante la sesión plenaria, un tiempo valioso y útil para hacer, aportar, participar y crear. Bienvenidos al debate y al aporte concreto.
¡Declaro oficialmente inaugurado el 12mo. Congreso de la Unión de Jóvenes Comunistas!
Muchas gracias
