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Palante fue a casa de dedeté a celebrar su cumpleaños. Autor: Roberto Suárez Publicado: 23/02/2022 | 09:59 pm
Por 53 años el dedeté (DDT) —que más que un suplemento de JR es columna vertebral del discurso en el diario—, ha acompañado estas páginas con sus reflexiones picarescas, agudas y necesarias.
Esa cifra, 53, se pronuncia fácil, pero pocos imaginan cuánta creatividad, inventiva, consagración, talento y ojo crítico, cuánta astucia y dedicación demanda una publicación constante, que se propone mirar nuestras realidades desde la sátira y los trazos profundos.
No por gusto su mes de cumpleaños es febrero, pues se requiere de amor al arte de la caricatura para sostener con decoro y exquisitez diversas miradas gráficas escrutadoras de la realidad nacional.
El capítulo trascendental marcado por esta publicación en el humor gráfico cubano se inició en 1968, cuando aparece el suplemento La Chicharra, luego del primogénito El Sable, nacido en las incipientes páginas del entonces muy joven y fresco Juventud Rebelde.
Ya para 1969 el cabezal luciría las siglas DDT por primera vez, cediendo espacio a la crítica social a través del prisma de las caricaturas y las historietas.
Desde los pioneros Virgilio, Manuel, Juan Padrón y Tomy, entre otros, hasta los continuantes Ares, Adán, Laz, Falco, Jape, y sus colaboradores, el dedeté se ha nutrido de gente con alma y vis cómica, pero con un alto sentido de compromiso y entrega.
En el sitio que los acoge, junto a los trabajadores de la casa azul de la prensa cubana y hermanos colegas de Palante, se celebró el aniversario recordando a Virgilio Martínez, cuya prolífera obra, aún no abordada lo suficiente, es hoy inspiración para quienes siguen alimentando el tesauro caricaturesco del país.
Si algo tienen los exponentes del DDT es la capacidad para aglutinar amigos y afectos, por eso tuvimos en JR a Perfecto Romero, que no necesita presentación, pues sus instantáneas hablan de un hombre que vivió momentos únicos de la épica nacional, cercano a míticas figuras como Fidel, el Che y Camilo.
¿Qué es DDT para nosotros? Una joyita para cautivar a los lectores y un orgullo para los que tenemos el privilegio de firmar en estas planas. Su permanencia es aliciente, motivación, un abrazo.
