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La dupla de voleibol de playa se lo juega todo en el partido contra Italia Autor: Roberto Morejón Rodríguez Publicado: 28/07/2021 | 08:29 pm
TOKIO.― La sexta jornada transcurrió para los cubanos con sensaciones agridulces. Los boxeadores Lázaro Álvarez y Arlen López ganaron en la ronda de 16 sin ser exigidos, pero el judoca Iván Felipe Silva no pasó del primer combate y la pareja de voleibol de playa sumó su segundo revés.
Sucedió, más o menos, lo previsto, aunque de Silva se esperaba que lograra avanzar un poco más, e incluso algunos colegas creían que podía coquetear con un bronce.
No se vio seguro en su combate contra el turco Mihael Zgank. «Sabía lo que iba a hacer, pero no supe cómo resolver la situación», comentó poco después en zona mixta.
Y también el nuevo tándem L-L (Leila Martínez y Lidianny Echevarría) volvió a ceder, ahora frente a la dupla de Nadezda Makroguzova y Svetlana Kholomina, que juega bajo la sombrilla del Comité Olímpico de Rusia (COR), con parciales de 21-16 y 21-11.
Articulada poco antes de partir hacia Tokio, a la pareja insular le resta un juego de vida o muerte frente a Italia en sus aspiraciones de avanzar en la justa.
Y sigue siendo noticia el protagonismo de Japón en el medallero. Los locales se afincan en su supremacía en el judo, cuyas acciones se ejecutan donde mismo se efectuaron durante los Juegos Olímpicos de 1964.
Con el cetro de Arai Chizuru en la división de 70 kilos, suman seis de oro en las diez finales efectuadas hasta el día 28, casi la mitad de las preseas áureas (13) ganadas de manera general por los anfitriones hasta esa fecha.
En el baloncesto 3x3, que hizo su debut aquí, Estados Unidos en el femenino y Letonia entre hombres dejaron en plata a los equipos del COR; mientras Fiji se confirmó como potencia en el rugby 7 al retener su corona de hace cinco años en Río de Janeiro.
¿Y Simone Biles?, la gimnasta estadounidense volvió a acaparar titulares con su renuncia al concurso general individual, una decisión que exacerba la polémica entre quienes aplauden a la gran estrella por asumir que su salud mental no la acompaña y el grupo de detractores, cuyo argumento es que su comportamiento deja mucho que desear para una atleta de su jerarquía.
Por lo pronto, USA Gymnastics, el ente rector de ese deporte en Estados Unidos, hizo público su respaldo a la muchacha, que en la urbe carioca se colgó cuatro medallas de oro y una de bronce, y aterrizó en Tokio con la idea de agenciarse cinco títulos.
¿Competirá en las demás pruebas individuales? Lo más probable es que ni ella misma sepa. Pero su ausencia se nota, y mucho.
