El presidente palestino Mahmoud Abbas asistió a las honras fúnebres, que fueron califi cadas como un funeral de Estado. Autor: Reuters Publicado: 12/05/2022 | 09:21 pm
RAMALA, mayo 12.— Miles de palestinos acompañaron este jueves en Cisjordania el féretro de la periodista Sheerin Abu Aqla, de la cadena Al Jazeera, asesinada por las fuerzas de seguridad israelíes mientras cubría una nueva redada en ese territorio ocupado.
Con banderas nacionales y de los diversos partidos, los palestinos se volcaron a las calles en la margen occidental para despedir a Abu Aqla, de 51 años, reportera de la televisora qatarí Al Jazeera, describió PL.
El presidente Mahmoud Abbas y el primer ministro Muhammad Shtayyeh, así como numerosos políticos y miembros del gabinete rindieron homenaje a la comunicadora, que ayer recibió un disparo en la cabeza cuando cubría una nueva operación militar israelí en la urbe de Jenin, a pesar de que portaba el rótulo de prensa en su chaleco, condición por la cual, con más razón, el crimen ha sido denunciado como un asesinato.
Durante el acto, miles de palestinos corearon consignas contra la ocupación y reclamaron justicia ante su ataúd cubierto con la enseña nacional.
Al intervenir en la ceremonia, Abbas anunció que acudirá a la Corte Internacional de Justicia para castigar a los culpables y responsabilizó a Israel por el nuevo crimen.
Mientras, Shtayyeh rechazó nuevamente una investigación conjunta con las autoridades de Tel Aviv.
El jefe del Gobierno palestino prometió una pesquisa por separado, cuyos resultados serán enviados a la CPI.
Durante el cortejo fúnebre hacia la zona este de Jerusalén, ocupada desde 1967, se reportaron choques entre los palestinos y los uniformados israelíes que obstruyeron la caravana en el puesto de control de Qalandia, según diversas televisoras árabes citadas por el despacho.
Al llegar al patio del Hospital Francés, en esa urbe, los militares inspeccionaron la ambulancia y confiscaron un pañuelo que tenía sangre de la periodista, y se negaron a entregarlo, denunció Walid al Omari, jefe de la oficina de Al Jazeera en los territorios palestinos.
La muerte de la reportera conmocionó a los territorios ocupados y provocó una ola de condenas internacionales, incluso de aliados de Tel Aviv.
En numerosas ciudades y aldeas los pobladores colgaron fotos de Abu Aqla, banderas, y depositaron ofrendas florales en su honor. Mientras, en las
escuelas de la franja de Gaza, los niños y jóvenes la despidieron con diversos actos.
El diario israelí Haaretz reveló este jueves que las primeras investigaciones sobre el caso confirmaron que los militares dispararon rondas de balas hacia ella, como aseguran varios testigos.
Mediante su cuenta en la red social Twitter, Al Jazeera condenó «este crimen atroz» y responsabilizó al Gobierno israelí y a las fuerzas de ocupación por su muerte.
Pedimos a la comunidad internacional que condene y responsabilice a ese país por el asesinato deliberado de nuestra colega, agregó el canal noticioso.
Artistas palestinos pintaron un mural en la Cisjordania ocupada en homenaje de la periodista asesinada.Foto: AFP.
Inmediatamente después de conocerse la noticia, el secretario general de la ONU, António Guterres, expresó consternación por el hecho y exhortó a las autoridades relevantes a realizar una investigación «independiente y transparente» para garantizar que los responsables respondan ante la justicia.
La directora general de la Unesco, Audrey Azoulay, también repudió el asesinato y se pronunció por una investigación a fondo que concluya con la rendición de cuentas por parte de los responsables.
«Condeno el asesinato de Shirin Abu Akleh. El homicidio de un periodista que claramente lleva la insignia de la prensa en una zona de conflicto es una violación del Derecho Internacional», apuntó.
La Oficina de la Alta Comisionada para los Derechos Humanos expresó su alarma por el asesinato, e informó que uno de sus equipos está en el terreno revisando los hechos.
Esa instancia señaló que la impunidad «debe terminar».
Entre otras personalidades, también expresó su repudio el secretario ejecutivo del ALBA-TCP, Sacha Llorenti, quien calificó el suceso como un nuevo episodio de la agresión sistemática de Tel Aviv contra Palestina, según expresó en Twitter.
«No es un hecho aislado: es parte de una política de colonización, de ocupación de territorios y de violación sistemática del Derecho Internacional, perpetrados por Israel en contra del pueblo palestino», denunció Llorenti.
Según la agencia oficial de noticias Wafa, en 2021 las fuerzas de Tel Aviv cometieron 384 violaciones contra periodistas que trabajaban en las zonas palestinas.
