24
Por fin habló Bolsonaro, pero no admite la victoria de Lula. Autor: Reuters Publicado: 01/11/2022 | 10:02 pm
BRASILIA, noviembre 1ro.— Camioneros bolsonaristas continuaban bloqueando caminos al amanecer, estimulados por el silencio que el Presidente rompió, finalmente este martes, cuando aseguró que «seguiré cumpliendo todos los mandatos de la Constitución», pero se abstuvo de reconocer explícitamente el triunfo electoral de Lula.
Durante un mensaje aparentemente ambiguo de apenas dos minutos, según RT, Bolsonaro demostró que «se mantiene en sus 13». No impugnó directamente los resultados electorales del domingo y tuvo palabras de relativo reproche para las protestas, aunque atenazó otra vez el odio, al afirmar que «nuestros métodos no pueden ser los de la izquierda, que siempre han perjudicado a la población (…)».
Sin embargo, terminó dándole la razón a sus movilizados cuando aseveró que los bloqueos «son el resultado de la indignación y un sentimiento de injusticia por cómo se llevó a cabo el proceso electoral», con lo cual reiteró también sus no probados señalamientos al sistema de elecciones y a los comicios.
Pese a que en muchos sitios, quienes protestan mantenían su actitud, la Policía Federal de Carreteras reportó que 192 de los cortes de ruta ya habían sido controlados, y que el flujo de vehículos en esos puntos se normalizó.
Desde la víspera, el Tribunal Supremo Electoral (TSE) había ordenado que el Gobierno adoptara medidas inmediatas para el despeje de las rutas obstruidas por camioneros que no aceptan la derrota de Bolsonaro, a quienes se habrían sumado otros seguidores del mandatario, y trascendió que se impondrían multas a los infractores.
El cuerpo uniformado había hablado antes de la existencia de más de 250 bloqueos totales o parciales en al menos 23 estados. Según medios locales, la protesta frente al principal aeropuerto internacional del país, en Sao Paulo, provocó la cancelación de varios vuelos por retraso de los pasajeros.
La reacción es coherente con las dudas sembradas por Bolsonaro durante varias semanas en torno a la legitimidad del proceso electoral si él perdía los comicios, y reiteradas ahora, en medio del clima de odio al adversario que sembró durante la campaña y su mantenido cuestionamiento a la institucionalidad.
Algunos de los que protestan declararon a medios de prensa que esperaban por su impugnación de los resultados. Por esa razón, analistas estimaban que el mutismo de Bolsonaro y su no reconocimiento de la victoria de Lula, había promovido el desorden. Con sus palabras de este martes, el mandatario tampoco desarticuló esos amagos de desestabilización.
Mientras, la transición daba sus primeros pasos. Su jefe de gabinete, Ciro Nogueira, usó de la palabra tras Bolsonaro para informar que ya tuvieron acercamientos de cara al traspaso con el equipo de Lula, que estará encabezado por el vicepresidente electo, Geraldo Alckmin, e integrarán otras 50 personas nombradas por el que será nuevo mandatario, puntualizó Brasil de Fato.
Entre otros funcionarios bolsonaristas que han aceptado la derrota se encuentra Arthur Lira, presidente de la Cámara de Diputados, quien afirmó que «la voluntad de la mayoría manifestada en las urnas nunca debe ser impugnada y avanzaremos en la construcción de un país soberano, justo y menos desigual».
En similar sentido se pronunció Ricardo Salles, exministro del ejecutivo de Bolsonaro y diputado electo, quien estimó que «el resultado de las elecciones más polarizadas de la historia de Brasil trae consigo muchas reflexiones y la necesidad de buscar formas de pacificar un país literalmente dividido por la mitad».
En tanto, Lula, quien en su alocución tras el triunfo invitó a la unidad y negó que existan «dos Brasil», sigue recibiendo los saludos de mandatarios y líderes de distintos países que lo felicitan por el triunfo.
«Ayer hablé con docenas de jefes de Estado. Todos quieren ampliar las alianzas y trabajo conjunto con Brasil en el comercio, en la cuestión del clima y en los grandes temas globales. Estamos volviendo al mundo», escribió el líder del PT en la red social Twitter, apuntó PL.
