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OTROS tres palestinos murieron en las últimas 24 horas como resultado de un ataque aéreo en las cercanías de Khan Yunis, en el sur de Gaza, mientras este martes continuaban los bombardeos en una flagrante violación del cese al fuego acordado el 10 de octubre.
Según Al Jazeera Arabic, una persona resultó herida como consecuencia de un bombardeo de artillería en la zona de Zanna, en la ciudad de Absan, al este de Khan Yunis.
El Ministerio de Salud de Gaza informó este martes que «el saldo total de la agresión israelí ascendió a 69 182 mártires y 170 694 heridos desde el 7 de octubre de 2023».
Desde el inicio del alto al fuego, puntualizó en un comunicado, las fuerzas israelíes han matado al menos a 245 palestinos, mientras que otros 623 han resultado heridos.
Agregó que sus equipos han recuperado hasta ahora 529 cuerpos de debajo de los escombros.
El comunicado indica que muchas víctimas siguen bajo los escombros y en las carreteras, ya que los equipos de ambulancias y de protección civil no han podido llegar hasta ellas hasta el momento.
El pasado lunes, dos palestinos murieron como resultado de un bombardeo del ejército israelí en la ciudad de Bani Suheila, al este de Khan Yunis, informó Al Jazeera Arabic.
Entretanto, también se recibieron los cadáveres de otros 15 prisioneros palestinos, lo que eleva el número total de cuerpos recibidos a 315, informó el Ministerio de Salud.
El departamento forense de Gaza declaró que la mayoría de los cuerpos palestinos devueltos desde Israel estaban con los ojos vendados y atados, lo que proporciona evidencia de tortura y ejecución antes de la muerte.
Según develó el grupo de defensa de los derechos humanos con sede en Ginebra, Euro-Med Human Rights Monitor, Israel continúa con los asesinatos premeditados . Mientras el ejército israelí continúa violando el alto al fuego diariamente mediante bombardeos aéreos y de artillería, así como disparos, Euro-Med Monitor afirma que la violación también continúa con la destrucción constante de casas y edificios, particularmente en las zonas orientales de Khan Yunis y la ciudad de Gaza.
Por otra parte, colonos israelíes incendiaron una zona industrial palestina cerca de Tulkarem, en Cisjordania. Según testigos citados por la Agencia Palestina de Noticias e Información, los colonos incendiaron varios vehículos, entre ellos cuatro camiones pertenecientes a una fábrica de productos lácteos en la zona industrial de Al-Lada’in, cerca de Beit Lid, y causaron daños a las instalaciones. Asimismo, destruyeron terrenos agrícolas cercanos, cobertizos metálicos y tiendas de campaña utilizadas por una pequeña comunidad beduina que reside en la zona.
A su vez, Unicef afirmó el este martes que Israel está impidiendo la entrada a Gaza de artículos esenciales, entre ellos 1,6 millones de jeringas y refrigeradores solares utilizados para almacenar viales de vacunas.
La advertencia se produce mientras Unicef trabaja para llevar a cabo una campaña masiva de vacunación infantil bajo el frágil alto al fuego que Israel ha violado 282 veces desde octubre.
Las jeringas, junto con los biberones para leche infantil, llevan desde agosto esperando el despacho de aduanas, lo que pone en riesgo a miles de niños, ya que los servicios de salud en la asediada Franja siguen destrozados tras dos años de genocidio israelí.
Por último, según un nuevo informe de una destacada organización de derechos humanos, Israel está llevando a cabo «una práctica organizada y sistemática de tortura sexual» contra prisioneros palestinos de Gaza que se encuentran bajo su custodia.
Investigadores y abogados del Centro Palestino para los Derechos Humanos (PCHR) entrevistaron a hombres y mujeres de la Franja de Gaza que habían sido liberados de la detención israelí.
Los detenidos relataron casos de violación, desnudamiento forzado, grabación de abusos, agresiones
sexuales con objetos y perros, y humillación sicológica.
