El primer pensamiento que me asaltó cuando Yasel, el Presidente de la AHS, me comunicó que junto a otros compañeros me entregarían el premio Maestro de Juventudes, fue: «La cultura nos salvó y nos salvará».
Luego pensé en mis padres que sonrientes y colgados de los celajes se sentirían orgullosos de que, a su hijo, díscolo e impredecible, lo distinguieran con semejante reconocimiento. Después en mi querida maestra de primaria, y luego amiga, Zuluppa Olivé, quien es la absoluta responsable de lo que fui con el devenir.
También pensé en mis maestros posteriores, Frank Fernández, Julián Fernández, mi profesor de guitarra, Silvio, Pablo, Sara, José María Vitier, Juan Manuel Ceruto, en todos mis compañeros de la Nueva Trova y en mi amigo, el Comandante en Jefe Fidel Castro.
He querido asumir estas breves palabras de agradecimiento desde la singularidad por aquel adagio de que cada persona es un mundo, y el mundo de cada quien responde de manera distinta ante cada estímulo. No hay dudas de que el premio Maestro de Juventudes es una gran responsabilidad que instalo en mi alma entre temeroso y abrumado.
Es probable que todavía no lo mereciera, o pudo ser antes, o nunca y así lo recibo, con una mezcla de incertidumbres y certezas.
Creo que el amor a la Patria, que ha sido mi sostén y abrigo, sea finalmente el resultado de esta alegría que me embarga y aturde hoy.
Gracias, muchas gracias, gratitud que comparto con mis camaradas condecorados en esta luminosa tarde de octubre de 2025.
No soy un hombre de brindar consejos, todavía estoy para recibirlos, pero si tuviera que ofrecer alguno a los jóvenes, sería:
¡Vivan su juventud con optimismo y esperanzas, y amen a la nación ofreciendo sin esperar nada a cambio, y así ella les devolverá, sin solemnidades, la pasión y el privilegio de haber nacido en terreno sagrado: Cuba!
Y termino haciendo mía la divisa que mi hermano, Eusebio Leal, repetía como un credo.
¡Patria y Fe!
¡Venceremos!
Muchas gracias a todos.
(*) Palabras pronunciadas por el cantautor en el acto de entrega del Premio Maestro de Juventudes 2025 que otorga la AHS, reconocimiento del cual fue acreedor, al igual que otros destacados creadores cubanos.