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WASHINGTON, octubre 6.— El principal comandante estadounidense en Afganistán, general John Campbell, declaró que fue un error el reciente bombardeo sobre un hospital de Médicos Sin Fronteras (MSF) en Kunduz que mató a 22 personas, informó AFP.
Ante la Comisión de Fuerzas Armadas del Senado, Campbell afirmó que el «hospital fue golpeado por error» en un bombardeo estadounidense «solicitado» por los afganos, pero resuelto por EE.UU.
Un día antes, el militar señaló en conferencia de prensa que el ataque había sido pedido por las autoridades afganas, lo que provocó la cólera de MSF, que acusó a los estadounidenses «de intentar pasar la responsabilidad al Gobierno afgano».
Este martes el General subrayó: «Para ser claro, la decisión de realizar un ataque aéreo era una decisión estadounidense, tomada por la cadena de mando estadounidense», e indicó que «nunca apuntaríamos intencionalmente contra una instalación médica protegida».
En una entrevista a CNN, el director ejecutivo de MSF Jason Cone aseveró que, a no ser que se aporten pruebas, todo apunta a que el ataque contra el hospital de Kunduz fue deliberado, ya que la organización había provisto repetidas veces las coordenadas del centro médico a las autoridades de Kabul y Washington.
Médicos Sin Fronteras, indignado ante el ataque que provocó la muerte de 12 empleados de la organización y de diez pacientes, decidió el lunes retirar su personal de Kunduz. El hospital era el único capaz de tratar a los heridos graves en la región y en el momento del siniestro albergaba a más de cien pacientes y 80 miembros del personal, entre afganos y extranjeros.
