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La Zona Especial de Desarrollo Mariel es un importante polo para el encadenamiento productivo Autor: Abel Rojas Barallobre Publicado: 22/12/2020 | 12:27 am
«Esperamos que la inversión extranjera se beneficie con el ordenamiento. Estamos tomando las medidas, caso a caso, para evitar que haya algún tipo de afectación y seguiremos atentos a cualquier preocupación que surja», dijo este lunes Rodrigo Malmierca Díaz, ministro de Comercio Exterior y la Inversión Extranjera (Mincex).
Su afirmación la hizo al intervenir en el programa Mesa Redonda junto a otros directivos del Mincex para explicar qué impacto tendrán en la inversión extranjera las medidas asociadas al ordenamiento monetario y cambiario que comenzará el próximo 1ro. de enero en Cuba.
Malmierca Díaz explicó que el proceso tendrá repercusión en las empresas con capital extranjero en el país, las cuales verán con el tiempo los beneficios, pues «se logra eliminar una serie de distorsiones existentes en nuestra economía, además de establecer un entorno macroeconómico más transparente y estable».
Además, reafirmó que habrá mayores beneficios para las entidades exportadoras con el nuevo tipo de cambio de 1 USD x 24 CUP, pues «antes recibía un peso por cada dólar —dijo—, y eso no estimulaba las exportaciones».
Destacó que con el encarecimiento de las importaciones se prevé que la inversión extranjera se encadene cada vez más con la economía nacional y pueda sustituir importaciones utilizando productos y servicios nacionales.
Malmierca Díaz subrayó el peligro existente de inflación luego de que se elimine la dualidad monetaria y cambiaria y aseguró que «las medidas antinflacionarias son para todos los entes económicos en el país, de ahí que la inversión extranjera también va a tener que aplicar medidas que intenten prevenir la inflación».
El Ministro dijo que, a partir del ordenamiento, habrá que revisar el establecimiento de los precios en esos actores económicos.
En cuanto al salario de los trabajadores, explicó que las empresas que funcionan fuera de la Zona Especial de Desarrollo Mariel (ZEDM) poseen un convertidor para los salarios de los trabajadores cubanos: la parte extranjera paga en CUC y eso se multiplica por dos. Ahora se multiplicará por 24, aseguró.
También explicó que los trabajadores recibirán el ciento por ciento del salario en pesos cubanos, a partir de los niveles salariales acordados entre las partes y con las agencias empleadoras que facilitan estos procesos.
En Cuba existen, básicamente, tres tipos de asociaciones con capital extranjero y, según explicó el Ministro, en cada caso se analizan las características particulares.
«Esos servicios de gestión empresarial que hoy tienen un nivel fijado en dólares habrá que renegociarlos por las partes cubanas y extranjeras para ajustarse a la nueva tasa de cambio con respecto al dólar», dijo Malmierca, quien aseguró que igualmente habrá que fijar remuneraciones de acuerdo con la nueva situación, sin que las partes extranjeras sufran un deterioro en sus ingresos.
Sobre la empresa mixta, el Ministro expresó que los socios tienen determinada participación y declaran ganancias que se distribuyen como dividendos. «Ahí también habrá que ver, caso a caso, cómo se logra que los niveles de precios y de operaciones garanticen preservar los niveles de utilidad o rentabilidad del negocio», dijo.
En cuanto a la modalidad de negocio que tiene que ver con la Zona Especial de Desarrollo Mariel, Malmierca Díaz explicó: «En esa zona se opera en divisas directamente. Eso se mantendrá. No va a haber un cambio en el sentido de la operatividad diaria de las empresas».
Detalló que se facturará en CUP las relaciones monetarias mercantiles en la Zona, así como los servicios y producciones que compren en el mercado nacional, lo cual interesa para potenciar el encadenamiento con el resto de la economía.
«Los usuarios y concesionarios de la ZEDM efectuarán los pagos de la facturación en MLC por el equivalente en CUP según la tasa establecida, a través de un banco comercial con el que operen», dijo el Ministro.
Por otro lado, las empresas ciento por ciento extranjeras tendrán un tratamiento acorde con su situación particular, precisó Malmierca.
Por su parte, Déborah Rivas Saavedra, viceministra de Comercio Exterior e Inversión Extranjera, refirió que a partir del ordenamiento, las oficinas de representación de empresas foráneas, como líneas aéreas, instituciones financieras, sucursales establecidas en Cuba, entre otras —superan las 700 entidades—, operarán en CUP en el territorio nacional, tanto en sus cobros como en sus pagos.
Además, podrán tener cuentas en MLC y utilizarlas en operaciones vinculadas al comercio exterior y transferencias de determinados pagos. En estos se enmarcan entidades suministradoras de servicios, como los contratos de extracción de petróleo, puntualizó.
La Viceministra explicó que existirá un cambio sustantivo en la forma de contratar la fuerza de trabajo nacional por parte de las entidades que funcionan con capital extranjero. Anteriormente, estas empresas contrataban mediante agencias empleadoras, a las cuales se les pagaba en MLC y los trabajadores recibían el pago en moneda nacional. A partir de ahora, pagarán una tarifa que pactarán con las empleadoras, y el salario de los trabajadores estará en correspondencia con la nueva escala salarial, no tendrá un tope y serán contados estos nuevos salarios para establecer el pago de la jubilación.
En el caso de las entidades que brindan cooperación internacional a Cuba, sus cuentas no se verán afectadas, pues se multiplicarán por la tasa de cambio establecida, de 1 x 24, dijo.
Especificó que se han realizado capacitaciones, debido a la profundidad del cambio, al tener la posibilidad de pactar la tarifa que deseen las entidades empleadoras con la entidad.
A su vez, Carlos Luis Jorge Méndez, director general de Inversión Extranjera del Mincex, expresó que la manera en que se ha concebido este proceso posibilitará un impacto favorable en la atracción de nuevos actores, pues las empresas podrán medir mejor sus proyecciones y resultados, entre otros beneficios.
Pero no solo será provechoso para los futuros inversionistas, sino también para los que ya están establecidos pues sus cuentas no tendrán ninguna afectación, y podrán manejar de manera más factible algunos gastos, indicó. El directivo acotó que las nuevas entidades de inversión extranjera regirán su pago en dependencia de pactos y contratos establecidos por sus órganos de dirección y el acuerdo con sus clientes.
En cuanto a los proyectos extranjeros ya aprobados que se encuentran en fase de preparación, cuya puesta en marcha se ha visto afectada por la situación sanitaria actual, estos deberán rehacer sus estudios de factibilidad en dependencia de la nueva tasa cambiaria, siempre teniendo en cuenta los ya mencionados beneficios. Lo mismo sucederá con los más de 30 proyectos en fase avanzada de negociación que pueden aprobarse en 2021.
Al finalizar el programa, Malmierca Díaz reafirmó que, a pesar de las restricciones impuestas por el bloqueo y el recrudecimiento de la situación económica marcada por la pandemia y las acciones de la actual administración norteamericana, Cuba continúa siendo un destino de confianza, elegido por inversionistas de distintas partes del mundo, los cuales ven la Tarea Ordenamiento como beneficio, respaldado por una amplia estrategia para apoyar el proceso.
