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ASTANÁ, mayo 4.— Representantes de Rusia, Turquía e Irán, Estados garantes de conversaciones de paz en Siria entre grupos armados y el Gobierno de Bashar al Assad, acordaron crear cuatro zonas de distensión en los territorios de conflicto.
El jefe de la delegación siria a las negociaciones en la capital de Kazajistán, Bashar Yaafari, anunció que Siria respalda la iniciativa rusa sobre la creación de zonas «de freno a la escalada», reportó la agencia oficial Sana.
Las zonas se localizarán en la provincia de Idlib, la región al norte de la ciudad de Homs, Guta oriental y en el sur de Siria, informó Prensa Latina.
El jefe de la delegación rusa, Alexander Lavrentyev, dijo que la firma del memorando sobre el establecimiento de estas zonas permite la preservación de la integridad territorial de Siria y alcanzar un arreglo político.
Lavrentyev subrayó que los Estados garantes acordaron la posibilidad de incorporar observadores de otros países y que el cese de hostilidades en las cuatro zonas entrará en vigor a partir del 6 de mayo.
El acuerdo cobró fuerza al conocerse un inusitado respaldo del Departamento de Estado norteamericano a los acuerdos de Astaná.
EE. UU. apoya los esfuerzos de Rusia y de Turquía para reducir la violencia en Siria y llama a la oposición siria a participar activamente en las negociaciones, expresa el comunicado, citado por la cadena televisiva RT.
Sin embargo, Washington incluyó una nota discordante, al expresar su preocupación por la participación de Irán.
El comunicado especifica que el subsecretario en funciones, Stuart Jones, estuvo presente en las negociaciones, si bien EE. UU. no forma parte de ellas, subrayó RT.
Por su parte, el viceministro iraní de Relaciones Exteriores, Jaberi Ansari, dijo que una aplicación correcta del arreglo puede llevar a un cambio sustancial en la situación de guerra.
La medida incluye el cese de las acciones de la aviación siria, exceptuando las operaciones contra los movimientos terroristas Estado Islámico y el otrora denominado Frente Al Nusra.
