Juventud Rebelde - Diario de la Juventud Cubana

Los colores de la felicidad

Con optimismo, tomando las medidas establecidas y mucho más, se abren los centros escolares. Se hacen realidad los deseos de niños, adolescentes y jóvenes, de regresar a las aulas luego del obligado confinamiento en el hogar que impuso el azote de la COVID-19

Autor:

Margarita Barrios

A las calles de casi toda Cuba regresó la algarabía de los muchachos. La Habana, taciturna durante meses por el cierre de las escuelas debido a la pandemia de la COVID-19, despertó más temprano, no solo por el oportuno cambio de horario, sino porque el regreso a las clases de manera presencial le devuelve su habitual entorno.

Aunque faltaron los matutinos, el abrazo y el beso a la llegada y escuchar el coro improvisado entonando el Himno Nacional, el momento fue como siempre de alegría y satisfacción por el rencuentro.

La capital no empieza el curso 2020-2021 como lo hacen 11 provincias y el municipio especial Isla de la Juventud, pues la compleja situación epidemiológica que tenía en septiembre último no permitió concluir con el período lectivo anterior, lo cual cumplirá ahora en cinco semanas.

Mientras, Pinar del Río, Sancti Spíritus y Ciego de Ávila tendrán que esperar a que las complicaciones que viven hoy con la pandemia estén del todo controladas para definir la fecha de apertura. Además, los municipios de San Cristóbal, en Artemisa, y de Cárdenas, en Matanzas, que reanudaron el curso 2019-2020 después del 1ro. de septiembre, empezarán el nuevo año lectivo los días 9 y 23 de este noviembre, respectivamente.

Comenzar las clases presenciales es, sin duda, un gran reto, pues todavía la pandemia es un hecho en Cuba y en el mundo. Sin embargo, la experiencia hasta ahora en el país es de cero transmisiones en las escuelas. Teniendo en cuenta esas realidades, y tomando todas las medidas establecidas y mucho más, se abren los centros escolares. Así, ya son un hecho los deseos de regresar a las aulas de niños, adolescentes y jóvenes, luego del obligado confinamiento en el hogar que impuso el azote de la COVID-19.

Por su parte, los maestros y profesores se han preparado con el fin de implementar las adaptaciones curriculares, elaboradas por especialistas, las cuales permitirán que, a pesar de que este año académico sea más corto, puedan cumplirse los objetivos para cada grado, año y nivel educativo.

El 2020-2021 tendrá 35 semanas, 31 lectivas y cuatro para evaluaciones finales. El primer período que empieza este lunes terminará el 30 de enero, con un total de 12 semanas y se incluye la de receso docente del 25 de diciembre al 2 de enero. Luego, continuará con el segundo período que culminará, como siempre, con las vacaciones de verano.

Hasta ahora ese es el plan. Dependerá de todos, del esfuerzo y cuidado de cada cual, de la responsabilidad no solo en los centros escolares, sino también en los hogares y las calles de nuestro país, que la experiencia culmine en victoria y atrás queden los temores.

Los alumnos estaban deseosos de regresar a la escuela. Foto: Roberto Suárez

Dentro de las aulas se ha preservado el necesario distanciamiento físico. Foto: Abel Rojas Barallobre

La desinfección de las manos es una prioridad en cada escuela. Foto: Abel Rojas Barallobre

Docentes y directivos se han preparado con el fi n de implementar las adaptaciones curriculares que permitan cumplir con los objetivos para cada grado, año y nivel educativo. Foto: Abel Rojas Barallobre

A la entrada de cada centro los imprescindibles pasos podálicos. Foto: David Gómez Ávila

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